Faltaba un poco menos de media hora para el inicio de la ceremonia de bienvenida al infierno para mí. Me encerré en la habitación en la que me maquillaron y les prohibí la entrada a todos, no quería ver a nadie.
Suspiré y me miré en el espejo, traía puesto un hermoso vestido blanco con falda desmontable, era enorme, mi cabello seguía recogido en un moño precioso e impecable. Pero el maquillaje tan prolijo ahora estaba destruido junto a mis ojos hinchados e inyectados en sangre de tanto llorar. Sabía que era yo, pero no me reconocí.
Moría de frío aunque no había aire acondicionado y no estábamos en invierno. Todo a mi alrededor se veía gris, entonces supe que los colores, la calidez, mi corazón y mi alma se quedaron con Changbin cuando ésta mañana lo abandoné.
Me deslice hacia el suelo y apoye mi cabeza en una silla para llorar de nuevo, pero ya no tenía lágrimas, había quedado completamente vacía.
- ¿Noona?- Escuché una voz a lo lejos.- Noona por favor levántese, no se quede así.- Unos brazos me envolvieron ayudándome a levantar.
- ¿Jeongin?- Lo reconocí cuando estuve de pie.
- Sí, soy yo Noona.- Sonrió.
- ¿Cómo entraste?- Pregunté al recordar que había cerrado la puerta con llave.
- Yo... Robé la llave.- El pequeño sonrió apenado mostrándome un manojo de llaves.- Tenía miedo de que se lastimara a usted misma.- Negué con la cabeza.
- No te preocupes pequeño, soy una cobarde.- Hice el amago de sonreír, pero no funcionó. Jeongin me envolvió en brazos pegandome a su cuerpo, simplemente me dejé hacer abrazándolo también.
- Si no lo amas ¿Por qué estás aquí Noona?- Preguntó frotando suavemente mi espalda.
- No lo sé, no sé porqué no puedo dejarlo, hay algo que me tiene atada a él.- Negué con la cabeza contra él, seguramente manchando su traje azúl.
- Pues ya es hora de cortar ese hilo, solo te hace daño.- Asentí, comencé a sentirme más tranquila en sus brazos.- Usted ama al señor Seo, ¿Verdad?
- Mucho más de lo que te imaginas Jeongin. Él me devolvió a la vida, las ganas de amar y la felicidad que creí que había perdido. Pero ya no me queda nada sin él.- Mis ojos se llenaron de lágrimas de nuevo.- Pero... ¿Cómo lo sabes?- Pregunté al recordar que jamás le había contado nada sobre eso.
- Siempre supe sobre ustedes, trabajo medio tiempo en el bar de su hotel.- Suspiré, no recordaba haberlo visto allí.- También pude notarlo por como se miran, aunque intenten esconderlo es como si se les saliera por los poros.- Oí un leve risa brotar de su garganta.
- Ya no queda nada de eso Jeongin, lo he perdido.- Sentí las lágrimas brotar de mis ojos y me abracé más fuerte a él.
- Aún no es tarde, aún puede terminar con ésto.- Negué con la cabeza, Jeongin me tomó de los hombros apartandome un poco para mirarme a los ojos.- Noona, escucheme por favor, nadie más que usted tiene derecho a decidir que hacer con su vida, ni siquiera sus propios miedos. Nada importa más que su felicidad, aunque la gente hable de usted lo importante es que usted esté bien y sea feliz.- Me abrazó de nuevo.- Yo mismo la defendería si es necesario.
- Gracias Jeongin.- Lo abracé fuertemente mientras él frotaba mi espalda.
- Solo usted creyó en mi cuando nadie en la compañía lo hizo, me dió la oportunidad de demostrar lo que soy capaz de hacer y convirtió ese lugar en un hogar para mí, siempre voy a estar agradecido por eso.- Dejó un beso en mi cabeza y se apartó.- Traeré a la maquillista, nadie debe verla triste.
Jeongin se apartó y salió de la habitación, minutos después regresó con la maquillista que gritó de horror al ver su trabajo destruido. Jeongin la miró con cara de pocos amigos y la chica intimidada me maquilló de nuevo sin decir ni una palabra.
Cuando estuve lista caminé hasta el salón donde sería la ceremonia y entré, todos se levantaron mirándome fijamente, al ver a mis amigos, familia y la familia de Christian todo mi valor se esfumó. Simplemente caminé hacia al altar donde Christian me esperaba sintiendome intimidada bajo la mirada de todos.
Cuando estuve a su lado el hombre que nos casaría comenzó a dar su discurso, dejé de escucharlo sumiendome en mi pensamientos.
¿De verdad me casaría con Christian y viviría siendo infeliz el resto de mi vida? ¿Abandonaría al hombre que amaba? Porque sí, por fin admitía que estaba perdidamente enamorada de Changbin desde aquella noche que lo ví en el club.
Lo amaba profundamente y estaba segura de que lo haría hasta el fin de mis días, con él quería estar. Recordando todos lo momentos que pasamos juntos sentí que una sonrisa tonta se formó en mi rostro.
De repente las palabras de Jeongin resonaron en mi mente "Nadie más que yo tiene el derecho de decidir qué debo hacer en mi vida." Y me llené de valor, no renunciaría a él.- Lee Soyeon ¿Acepta a Bang Christian como su esposo?- Preguntó el hombre visiblemente fastidiado, como si no fuera la primera vez que me lo preguntaba.
La mirada de Christian, sus padres y los míos estaban fijamente en mí, sus ojos me presionaban para que diera por fin una respuesta afirmativa y mi valentía se fué de nuevo. Estaba por hablar cuando algo más llamó mi atención.
Oí el ruido de una motocicleta fuera del salón, miré hacia la gran puerta de cristal por la que antes había entrado y efectivamente había una motocicleta estacionada. Apoyado en ella estaba un hombre musculoso vestido totalmente de negro aún con el casco sobre su cabeza.
Mi respiración se detuvo, yo era capaz de reconocer esa figura a dónde quiera que fuera y esperaba que mi mente no estuviera traicionandome, con mi corazón golpeando fuertemente contra mi pecho di mi respuesta.
Olvidé decir que el final está dividido en tres partes para que no se haga tan largo XD.En un rato o mañana subo la tercera parte ( ◜‿◝ )♡
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The Lover ፧ Seo Changbin ፧
Fanfic⋰ ⋱⋰ ⋱⋰ ⋱⋰ ⋱⋰ ⋱⋰ ⋱⋰ ⋱ - Me gusta jugar con fuego. + Si lo hacemos, nos quemaremos. - Esa es la mejor parte. ⋰ ⋱⋰ ⋱⋰ ⋱⋰ ⋱⋰ ⋱⋰ ⋱⋰ ⋱