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Amelia estaba una vez más en casa de Ric sacando sus emociones en el saco de boxeo después de rechazar una carrera matutina con Elena y Matt. Había estado evitando a todo el mundo debido a su estado últimamente inestable. No había dormido en casa, estaba durmiendo en la casa de Liz en su propia habitación ahora que Caroline se quedaba con Bonnie y su madre en su casa. Su habitación era un desastre y no se había molestado en limpiar. Sabía que Elena llamaba a estos sus días de Mia, pero en realidad nunca lo gritó.
Rebekah básicamente la envió al límite después de mostrarle todo lo que siempre mantuvo tan embotellado, estaba agradecida de no haber cavado más profundo, pero tenía una pista de que no lo hizo porque no podía, no porque no lo hiciera. Su magia se estaba volviendo loca una vez más, pero no porque no tuviera el control. Si no porque sus emociones estaban por todas partes.
Intentaba olvidarse de sus problemas. No había superado nada de lo que había pasado. De hecho, se había cortado el pelo de una manera que le quitara la mente de todo. Ignoraba el montón de llamadas perdidas de Damon, Stefan y Elena. Alaric no estaba en su apartamento y estaba un poco contenta porque no estaba lista para hablar con nadie.
Todo lo que quería era olvidarse de lo que Rebeca había hecho. Lo odiaba, no tenía derecho a entrar en su mente y cavar en sus inseguridades de esa manera. Lo peor era que su salud mental no estaba ayudando en absoluto. Sufría de una grave culpa de sobreviviente y tenía pastillas para dormir cuando tenía pesadillas, pero se había agotado y Jenna tenía sus descripciones, así que ahora se alimentaba básicamente de café.
Ella se había abrazado con Liz anoche para ayudar a dormir, pero Liz pronto tuvo que irse para una emergencia de sheriff y Amelia se había despertado de una pesadilla. Miró hacia abajo a su teléfono mientras tomaba los guantes de perforación y los dejaba agarrando su teléfono.
12 llamadas perdidas de Stef 5 llamadas perdidas de Drácula 3 llamadas perdidas de Lena + 1 buzón de voz.
Amelia suspiró e ignoró todas las llamadas pero puso play en el buzón de voz de su gemela.- Amelia, ¿dónde estás? He visto tu habitación, ¿qué está pasando? Por favor, llámame, estoy preocupado.- La voz de Elena salió del teléfono.
Amelia acaba de dejar el teléfono y decidió no llamarla. Había enviado un mensaje de texto la noche anterior diciendo que Rebeca había mencionado que la estaba torturando emocionalmente y que quería saber a qué se refería. Amelia también ignoró el texto sin querer hablar de eso.
Los únicos mensajes de texto de la persona a la que había respondido eran los de Matt cuando él le pidió que corriera, pero ella respondió con un simple no. Amelia pronto recibió una llamada de Liz para interrumpirla por sus molestos pensamientos.- Oye, Liz. ¿Todo bien?.- Amelia preguntó por teléfono.
Explicó la razón por la que estaba llamando.- Lo siento, ¿qué?.- Amelia preguntó en voz alta por teléfono y pronto cogió sus cosas y se fue para ir a la estación. Pero rápidamente arregló su nuevo pelo corto, en realidad le encantó.
