YES, DADDY T.2 (+18 Daryl Dixon)

29. Misericordia

-Bien, bien.- Dice Michonne entre risas de felicidad. -Es tu turno, Rick.-

El intercambio de regalos ha comenzado y después de que la morena le diera a Hershel un par de herramientas que había pedido y este le dijera que lo que quería era una vaca para la granja, entre risas y jadeos es turno de mi padre.

-Bueno, bueno...- Suspira para tratar de coordinar si respiración y poder hablar. -Ustedes saben que los amo a todos, son una familia espectacular...- Todos sonríen con ternura. -La persona a quien le daré este regalo es alguien de quien estoy realmente orgulloso. Ha paso por muchas cosas y las ha sabido sobre llevar por completo...- ¿Carol? Trato de adivinar. -Ha pasado tanto tiempo a mi lado que he visto su evolución completa.- ¿Daryl? -Es una persona realmente amable, tierna y muy inteligente.-

Bien, ahora todo se reduce a una mujer. Podría ser Carol, Michonne o Maggie... sigo votando por Carol.

Nuestra tradición consistía en dar una descripción general de la persona que nos tocó, no hay que dar detalles físicos para que tratemos de ser lo más misteriosos hasta que se revelará el nombre.

-Así que de quien hablo es...- Hace una pausa y mira a todos por un par de segundos. -Lanai.-

-¿Yo?- Me señaló a mi misma.

-Aquí tienes, amor.- Me tiende una caja relativamente grande envuelta en papel rosa y con un moño blanco que hace juego.

-¡Ábrelo, Lana!-

-¡Queremos ver que es!-

Los gritos de las personas a mi alrededor me hacen sonreír, coloco la caja en el suelo ante lo pesada que es, me siento junto a él y comienzo a desenvolver el papel. Lo rasgo con suavidad y escucho el crujir de este al partirse. Cuando esta lo suficientemente desenvuelto, puedo ver lo que hay en la caja.

-¿Una laptop?- Levanto la vista y observo a mi padre con ojos sorprendidos.

-Sé que no lo pediste, pero también sé que te hacía falta una. La que tienes ya está fallando y con la escuela y todo eso, necesitas una de buena calidad.- Sonríe.

La computadora que tengo era suya, después se la obsequio a Carl y hace dos años me la dio a mí cuando Michonne le dio la suya. No me había molestado en pedir un nuevo computador porque a pesar de que el que tengo se apagaba un par de veces y debía estar conectada para funcionar me servía lo suficiente.

-Gracias, papá.- Me levanto del suelo y corro a abrazarlo. -Eres el mejor.- Digo mientras mi cabeza reposa sobre su pecho.

-Trato de serlo.- Me responde. -Eres mi princesa.-

Los regalos continuando siendo repartidos por los demás, dan una breve descripción para después decir de quién se trata y acto seguirlo entregarlo a esa persona. Se supone que en las reglas de los intercambios de regalo deben ser de un mínimo de $50 dólares y no debemos gastar más de $100, pero mi padre se excedió de más.

La amena velada continúa, después de reír con aquella actividad regresamos al comedor para poder beber algo de chocolate caliente. Carol saca de pronto un par de álbumes de fotos y comenzamos a ver el contenido. Son fotos de hace unos cinco años, ver como éramos de jóvenes hace que a algunos les de nostalgia y a otros simplemente risa. Recordamos momentos divertidos mientras en algunas ocasiones contamos las historias detrás de las fotografías.

Es una navidad muy tranquila y dulce, puedo sentir el calor de hogar y a pesar de que papá se sentía triste en la mañana por no poder estar con Judith, se ha relajado y disfrutado de lo que ocurre a su alrededor.

El tiempo comienza a correr con rapidez al igual que el alcohol en el sistema de todos. Por alguna extraña razón las personas aquí presentes quieren beber hasta estar perdidamente ebrios.