Capítulo 13

240 62 53
                                    

Había pasado casi toda la semana y las cosas se mantenían estables, Caín seguía en mi casa y yo seguía con permiso de su madre en el trabajo, hable con ella a los tres días de ausencia y me comentó que estaría de viaje con Nate así que podía estar tranquila, lo cual de verdad me tranquilizaba mucho más, no me gustaba pensar que estaba siendo irresponsable o algo por el estilo.

Mi madre ya no necesitaba estar todo el día acostada y eso le alegraba, no soporta estar quieta, de todas formas no la dejábamos hacer casi nada para prevenir los mareos, Caín había ido a comprarse ropa puesto que estaba arto de usar la ropa de mi padre y la que traía aquel día había preferido tirarla a la basura.

Hansen había dado la idea de hacer un asado en el patio trasero de mi casa y a todos nos había gustado, Caín se llevaba de maravilla con todos y me parecía estar viviendo un sueño, hasta parecíamos una familia, una de verdad.

Quizás eso era lo que a Caín y a mí nos tenía en paz; el hecho de ambos estar conviviendo en un ambiente realmente diferente al que crecimos.

Kaya había traído su consola y pasaban horas jugando video juegos junto a Caín todos los días, mi mamá descansaba y en tanto Hansen y yo seguimos limpiando y ordenando el resto de la casa, él decía que había que mover todo ya que así las energías fluían mejor. Me caía tan bien ya que era como un hippie moderno y apuesto.

Sonó el timbre y fuí a abrir de inmediato. —Abran paso que llego la ensalada más deliciosa que probaran en la vida —Dijo Alejandra tan sonriente como siempre, junto a ella venia ¿Juls? Al parecer me había perdido de mucho en una semana.

—Traje Soju que compre en una tienda de productos asiáticos en el centro —Exclamó Juls entrando junto a la rubia a mi casa.

Caín tenia la misma expresión que yo al verlas juntas pero no dijo nada, las presenté con Hansen y Kaya para que luego fueran a dejar las cosas a la cocina y posteriormente saludaran a mi madre, a Ale ya la conocía pero debía conocer a Juls. Quien le cayó muy bien de primera.

Íbamos entrando nuevamente cuando la rubia se detuvo.
—Óscar dijo que lo disculparas pero tenía una tocada fuera del pueblo hoy —Dijo Alejandra suspirando mientras ponía su mano en mi hombro.

—De todas formas dijo que te enviaba besitos —Añadió Juls.

Hice una mueca y posteriormente saqué una cerveza del refrigerador, le di una a ambas y salimos al patio donde estaban mi madre y Hansen.

—No pensé que el novio de tu madre fuera tan sexy —Comentó Alejandra destapando la cerveza para darle un largo sorbo.

—¡No es su novio! —Chille.

—Pues lo parecen —Dijo Juls. —Que hay de Isabella ¿No vendrá?

—Le toco ir a trabajar hoy, ha estado haciendo horas adicionales para juntar más dinero, pero dijo que pasaría un rato —Encendí un cigarrillo y di un sorbo a mi cerveza.

—¿Y mi chico rubio donde está? —Preguntó Ale mientras sacaba un cigarro de mi cajetilla.

Me quedé en silencio un momento, fue como un golpe de realidad tocando a mi puerta. Deje salir el humo de mi boca y después de un buen rato sin decir palabra alguna hablé: —Juls debería saber, yo no he hablado con él —Mentí, lo había hecho cada día desde lo ocurrido.

—Pues en el grupo que tenemos los tres no ha dicho nada, incluso le envié unas fotos que encontré de Robertito en mi pc y ni siquiera me dejó el visto, simplemente me ignoró —Dijo Juls haciendo un puchero.

—Debe estar ocupado —Me encogí de hombros —¿Vamos a probar la carne? —Les pregunté cambiando totalmente el tema, ellas asintieron con total normalidad pareciendo ignorar la forma en la que esquive la dirección que estaba tomando la conversación.

Just Like An EngelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora