9. Fiesta

39 6 2
                                    

Capítulo dedicado a xiao_fenghuang por ser nuestro primer voto.

𝙴𝚝𝚑𝚊𝚗

Mis compañeros de carrera me invitaron a una fiesta que será en casa de otro compañero de la misma facultad. Realmente no tenía ganas de ir después de todo lo ocurrido y considerando que mi turno acaba en la noche, pero igual me convencieron. Según ellos, una manera de socializar ya que soy uno de los mayores. Quizás pueda servirme para despejar un poco la mente y con eso me refiero a beber hasta desmayarme. No debería, considerando que estoy en la cuerda floja en casa. Cuando les conté sobre mi trabajo y sobre la universidad pensé que estarían orgullosos o tan siquiera felices, como siempre mis expectativas son muy altas. Ni siquiera felicidades.
Nada.
Papá fue un poco más considerando prestándome su auto para que pueda movilizarme mejor y cumplir con mis horarios, no sé cuánto más pueda aguantar viviendo así. Tendré que considerar alquilar un pequeño cuarto en un apartamento o casa. Será más incómodo sí, pero prefiero eso a vivir bajo el mismo techo con las dos personas en las que más confiaba en el mundo y que ahora actúan como completos extraños hacia mí.
Han pasado cuatro años.
Cuatro años del incidente y ellos hacen que ese recuerdo se mantenga ardiendo constantemente en mi cuello.

— Pensé que solo seríamos los de gastronomía —comenté bajando del auto de Peter.

— La voz debió de haberse corrido —respondió la rubia Grace mientras el chico de un piercing en la oreja, Peter pasa su brazo hasta el hombro de ella atrayéndola a él—. Hey, yo me gradué con esa gyal —señaló a una chica de cabello corto pintado de azul. Caminó hasta ella para saludarla.

— Mejor busquemos a William.

Por dentro de la casa está por reventar, no cabe un alma más. Por suerte es de dos pisos con un patio bastante grande. Huele a diferentes tipos de bebidas alcohólicas, pizza y humo de cigarrillo. William está en la cocina comiendo un pedazo de pizza de pepperoni. Nos regaló un gesto leve con la mano.

— Pensé que éramos los únicos invitados —Peter tomó un trozo de la pizza.

— Yo también. Ya me di por vencido, entran y entran por doquier.

— ¿Intentaste cerrar la puerta?

— Sí, claramente no funcionó—suspiró—. Disfruten y coman mientras puedan, están hambrientos.

— ¿Tú la compraste? —negó y caminó hacia la estación de bebidas.

— Come algo antes de emborracharte. Buscaré a Grace.

Decidí echar un vistazo a mi alrededor antes de comer un poco. La mayoría vino en pareja o está en proceso de conseguir una o quizás sean los efectos del alcohol. Hay un par de chicas utilizando un vape sentadas en el sofá grande mientras tres chicos juegan a la consola. Al mirar fuera, sentada en una hamaca se encuentra la de cabello castaño largo rizado, Linet. Mi ex novia Linet abrazada y besando a otro chico, el mismo de la foto.
¿Por qué es tan pequeño este maldito país?
Necesito encontrar a Peter o a William, no puedo estar solo. Soy blanco fácil; debo concentrarme para no perder la cordura y armar un espectáculo. Recorrí los pasillos y subí las escaleras pero no veo a ninguno. El vaso de Coca-Cola con ron ya siento que comienza a hacer efecto.
Mierda.

𝓜𝓲𝓬𝓪𝓮𝓵𝓪

Una casa. Una multitud. Alcohol.
Eso no es lo mío y ya me estoy arrepintiendo desde el minuto en que cruzamos las puertas. Principalmente porque no me siento cómoda mostrando piel. Las chicas vinieron al apartamento a arreglarme. Alina me maquilló, Valeria me peinó y Jennie me vistió. Una prenda de vestir a crochet celeste con blanco que revela parte del estómago con unos pantalones rotos de tiro alto celestes y una camisa a cuadros rosada con blanco. Me dejaron ponerme algo encima, por lo menos. Muestro mitad de mis brazos y mitad de mi estómago. Mucho de lo que suelo mostrar una vez al año.

La chica de las estrellasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora