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Luego de un par meses de ellos dos haciendo su propia rehabilitación para el mayor, el pelirosa solía salir a caminar un par de cuadras a la redonda de su departamento de la mano de Sunghoon, y aunque ya no tenía miedo de salir, seguía teniendo pá...

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Luego de un par meses de ellos dos haciendo su propia rehabilitación para el mayor, el pelirosa solía salir a caminar un par de cuadras a la redonda de su departamento de la mano de Sunghoon, y aunque ya no tenía miedo de salir, seguía teniendo pánico a la gente, luego de tantos avances en solitario, finalmente Sunoo se animó para ir a un pequeño grupo de ayuda para su fobia social.

Eran cuatro pacientes en total, entre ellos Sunoo, había tres terapeutas, el primer día cada uno había ido con un invitado, alguien con el que tuvieran confianza y se sintieran seguros.

Por supuesto, Sunghoon fue acompañando a Sunoo, por ser el primer día harían todo juntos, y se irían despegando poco a poco hasta que Sunoo pudiera estar sólo, no lo iban a presionar y lo haría a su propio tiempo.

Cómo primera actividad debían presentarse, si bien debían intentar hacerlo ellos, fueron sus acompañantes quienes hablaron por ambos, apenas uno de los cuatro pacientes pudo murmurar una pequeña presentación; era un muchacho joven, debía tener la misma edad que Sunoo, y murmuró solamente un "Hola, mi nombre es Felix", mientras el sonriente chico a su lado, que se presentó como Lee Minho, lo felicitaba.

Cuando tocó presentarse a ambos, Sunghoon fue quien habló, Sunoo sólo respondió con un asentimiento y una sonrisa bonita, fue directo y sin ninguna vergüenza:

— Soy Park Sunghoon, y estoy acompañando a Kim Sunoo, mi novio.

>> Sunoo cumplió veinticinco años hace poco, es la primera vez en casi tres años que está en un grupo para hacer amigos... Le gusta dibujar, colorear, comer dulces, dormir y molestarme.

Recibió un golpe en el brazo por parte del mayor, haciendo que unas cuantas risas surgieran en el grupo.

Shhh — el pelinegro acarició su cabello como si fuera un perrito —. Yo soy Sunghoon, tengo veintitrés años y me gusta... — lo pensó un momento—. Hacer feliz a Sunoo, por eso estoy aquí.

Luego de aquellas presentaciones, las terapeutas los habían invitado a conseguir una pareja para jugar algo a modo de actividad.

— Yo ya tengo pareja, que tontas — murmuró Sunoo, cerca del oido de Sunghoon.

— Creo que se refiere a una pareja como un compañero, alguien de los demás chicos, Sunoo — dijo Sunghoon con una sonrisa tierna—. Ya sabes, alguien más del grupo, no yo.

— No quiero, tú eres mi única pareja— se abrazó hacia él.

— Yo estaré contigo, Ddeonu, sólo estaremos acompañandos de alguien más, tontito — Sunghoon intentaba despegarse del apretado abrazo del mayor, cuando notó a las dos personas que se acercaba hacia ellos.

— Hola, Sunoo — saludó Minho, con una sonrisa muy brillante y alegre, era ese tipo de sonrisa que te daban ganas de sonreír aún más—. Felix quería hacer pareja con ustedes, ¿Les parece bien?

— Claro que sí— respondió el pelinegro —. Sunoo, llegó tu amigo, vamos, bebé.

El pelirosa miró por sobre el hombro del menor, para observar al pelirrojo que iba de la mano con aquel chico peli azul que tenía la mirada fija en el suelo.

Imitando aquel gesto, tomó la mano de Sunghoon, para salir de su escondite y alzar su mano en un saludo.

— Hola — con su voz, Felix alzó la vista un poco, para verlo un segundo y luego volver a dejar la vista en sus pies, con un intento de sonrisa amable.

A Sunoo le pareció algo irrespetuoso, e inflo sus mejillas con molestia, pero recordó lo que Sunghoon le había dicho: "No vayas a juzgar a los demás, porque ellos son iguales a tí, Sunoo, también van a dar lo mejor de sí para estar con otras personas, respetalos".

— Muy bien, ya que están hechas las parejas, podemos iniciar con el juego — dijo una de las terapeutas, una joven quizás bastante energética, había hablado la mayor parte de la sesión—. Vamos a jugar al "espejo", así que cada uno coloques de frente, de a dos, y uno va a iniciar con un gesto que el otro tiene que imitar.

>> Tienen que mirar al otro para esto, pueden iniciar haciendo movimientos con sus manos o pies, y después vamos a continuar haciendo lo mismo con el resto del cuerpo, ¿Bien?

— Es un juego estúpido— murmuró Felix, aunque fue casi un susurro, los tres pudieron escucharlo.

— Eso fue una palabra muy fea — dijo Sunoo, Sunghoon no lo dejaba decir palabras muy feas.

Minho soltó una risa incómoda antes de contestar hacia el más alto.

— Fefi... Alguien se esforzó para hacer ese juego, y es para que conozcas a Sunoo, no para que te diviertas — explicó con voz calmada, Felix sólo asintió—. Bien, ¿Quieres empezar?

Negó levemente, y el pelirrojo respondió con un "Bien, empiezo yo".

De frente a Sunghoon, hizo una señal de la paz con sus manos, cosa que el pelinegro imitó, por otro lado, Sunoo hizo un puño.

— Piedra, gana a la tijera, perdieron.

Sunghoon soltó una carcajada, el pelirosa lo había dicho muy en serio, se veía que no prestó atención a la explicación del juego.

— Papel — Felix extendió su mano hacia adelante, siguiendo el juego de Sunoo, ya que le gustaba más que un estúpido juego de un espejo.

— Tijera gana a papel — comentó Minho, para hacer un gesto sobre la mano de Felix, como si lo cortara.

— Tú ya estás muerto— dijo Sunoo, a lo que Felix asintió.

— Y estás jugando con él— Felix señaló a Sunghoon.

— Bueno, bueno, los dejo solos — comentó Minho, antes de alejarse menos de un paso de ellos para continuar con el juego que las terapeutas habían ofrecido con el pelinegro.

Aunque ninguno de los dos pudo dejar de ver a los dos que continuaban jugando "piedras, papel, tijeras" en su propio mundo, era solo el inicio de su amistad.

Aunque ninguno de los dos pudo dejar de ver a los dos que continuaban jugando "piedras, papel, tijeras" en su propio mundo, era solo el inicio de su amistad

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