- ¿Y te quedarás aquí?
- No por mucho tiempo, debo ir a Italia para algunas fotos.
- Y... ¿Disfrutas ser tan famoso?
- Digamos que tiene sus pros y contras.
Clave en el tenedor un pedazo de durazno y lo metí a mi boca sin pensarlo demasiado. Los chicos llevan 30 minutos haciéndose preguntas de sondeo bastante extrañas y obvias, siendo que ninguno da una respuesta concreta, pero tampoco las evitan.
- ¿Regresarás pronto? - cuestione a Willow - Hanna me dijo que estaba muy contenta por tenerte aquí después de tanto tiempo desaparecido.
- ¿Me extrañarás si digo que no? - comento con una sonrisa.
Giré los ojos e inserté nuevamente en mi tenedor un pedazo de pan.
- Si si, como sea señor perfección.
- Jajaja, regresaré en un par de meses. No me necesitan temporalmente y mis padres se encuentran de gira, así que... - movió los hombros, restándole importancia.
- ¿Y tu hermana?
- Parece que sabes muchas cosas de él - hablo Dylan, cortando su comida.
- Esto no es...
- Digamos que hemos compartido un buen tiempo - Willow le regreso el comentario.
- ¿Ah sí? - cuestionó el ojiverde menor.
- Por supuesto - Willow añadió con una mirada pícara - como cuando estuvimos en la habitación y...
Comencé a toser y tape mi boca, impactada por la intención de sus palabras. Lo observé reírse y tenderme una servilleta, por lo que le di una mirada de reproche, asegurándole que él y yo tendremos una plática después.
Los 3 chicos restantes nos miraron con los ojos bien abiertos, por lo que mi rostro empezó a arder sin control.
- Ajam - James carraspeó la garganta, en un intento de cambiar de tema - ¿Cuáles son tus planes para esta noche Atenea?
- Mm... No...
- ¿Señorita Morgenstern?
Giré a mi costado, encontrándome con uno de los meseros.
- Si, esa soy yo.
- Por favor - me tendió una nota junto con un vaso de contenido naranja y se alejó sin más.
Mantuve neutro el rostro y abrí la carta. Al levantar la mirada, observé el lugar buscando al remitente. Cuando lo encontré, me levanté con todo y la bebida, comenzando a caminar hacia la barra principal.
- ¿Señorita Janneth? - pregunté un tanto sorprendida.
- Ou... Hola - se giró a verme.
Sus ojos azules muestran cansancio, pero se ve sana y el cabello rubio lo tiene atado en una coleta.
No vi a nadie sentado a su lado, así que me tomé la libertad de sentarme junto a ella.
- ¿Qué la trae por aquí? - aborde de manera casual.
- Yo... Vine para despejar un poco la mente de todo... - comento mientras agarra el vaso de contenido transparente.
Espero sea agua.
- Usted me invitó el trago, supongo.
- Si. Te veías en aprietos con los chicos de allá - señaló hacia la mesa con el mentón.
- Ja... Algo de razón tienes - me giré hacia donde hace un par de segundos estaba sentada con una media sonrisa.
Todos están viéndonos. Blake y Dylan mantienen un rostro serio, mientras que Willow y James se ven un tanto confundidos por mi actitud.
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Los Nuevos Morgenstern
Random- Permíteme dejarlo en claro - cruce las manos sobre la mesa y fijé mi vista en ellos - soy la persona más letal y poderosa en este momento. Si quisiera acabar con ustedes, lo habría hecho hace mucho tiempo y de manera tan discreta que nadie volverí...