XVI

329 43 2
                                    

Tenía que tener tanto cuidado de no asustarlo al besarnos... no quería perder el control al dejarme llevar, solo quería hacerlo feliz.

Sus labios siempre estaban más tibios que los míos y eran suaves, igual que su piel... nuestros labios ya conocían tanto los del otro, los teníamos memorizados... y Seiji se dejaba llevar derretido por mis movimientos hundiendo sus dedos en mi pelo mientras que con la otra mano acariciaba mi cuello notándose que temblaba muy ligeramente por mi.

Sus piernas eran las que aprisionaban mi cuerpo para que no le diera ni un hueco al aire para pasar entre nosotros.

Estaba perdido por él... hasta la médula...

–Kilian la ducha esta lista! –Me llamó Sheila desde el piso de abajo provocando que nos separáramos a coger aire.

Mejor... no se si podía seguir controlándome, mis manos ya trataban de tirar de su camisa para sacarla del pantalón.

Aun así le di un último beso mucho más fugaz sonriendo a sus labios y me puse en pie para ir a la ducha.

Por mi condición de híbrido la temperatura del baño debía ser alta antes de quitarme la ropa y meterme en el agua, sino podría enfermar.

Por un segundo revisé mis tatuajes una vez me quite la camiseta como si hubiera la posibilidad de que se hubieran ido a algún lado, pero estaban igual que el día que me los hice.

Todo mi brazo derecho estaba tatuado con las flores favoritas de mi madre, eran finas líneas con el sombreado justo dejando a la vista mi piel y llegando hasta mi omóplato. Mi piel parecía que tenía muy buena aceptación para estas cosas que después de dos años seguía como si estuviera recién hecho.

Bueno, estaba todo bien, así que me metí en la ducha dejando que el agua caliente aclarara un poco mis ideas.

Cuando empezó este curso aún veía a Seiji desde la distancia sin ninguna forma de acercarme a él y ahora...

Era muy afortunado.

Aun no habíamos usado nuestras lenguas en los besos, quería que él marcara el ritmo de lo que hacíamos, lo primero de todo era no asustarlo, que él quisiera hacerlo.

Ya llegaría el momento si tenía que llegar, y ahí ya experimentaríamos juntos todo lo necesario si él quería.

Por un segundo fui incapaz de no imaginarme a Seiji debajo mía abrazándome con fuerza y nuestras lenguas jugando entre ellas... El tacto de su piel ya sin heridas... Sus posibles expresiones...

Kilian –Gimió su voz en mi cabeza teniendo que abrir los ojos para volver en mi.

No, tal vez Seiji se daba cuenta que no quería dar esos pasos conmigo y tenía que aceptarlo.

Aunque mi miembro ya estaba pensando en otra cosa y no se iba a bajar solo.

Mierda.

Mejor hacerlo ahora y no despertarme mañana duro por dormir a su lado.

    *.     *.     *.     *.

La curiosidad al final me ganó y abrí uno de los cuadernos de Kilian para ver lo que dibujaba.

Mezclaba muchas técnicas, pero lo que más parecía gustarle era la acuarela y el lápiz, tenía dibujos que solo eran bocetos rápido de la naturaleza, su entorno, animales y flores, juntos y por separado, pero después tenía otros mucho más elaborados, también de animales y plantas, pero también de personas.

Algunos eran amigos suyos, otros no sabía quienes eran o si simplemente salían de su imaginación, había desde simples retratos a el cuerpo completo haciendo alguna actividad.

Control (Yaoi/BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora