XXXV

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Después de comer con Ximo y hablar con calma asegurándome de que comía me fui a casa de Kilian.

Si que se puso enfermo, su habitación tenía varias estufas encendidas para tratar de subir su temperatura corporal a la fuerza. Menos mal que yo no podía sentir los cambios de temperatura.

–Me empapé con la lluvia ayer y bueno, me recupero como puedo –Explicó suspirando con algo de dificultades–. Que es tan urgente que te saltaste las últimas horas?

–Ximo –Respondí sentándome en la cama de cualquier forma con él.

–Esta bien? Le ha ocurrido algo? –Dudó con rapidez preocupado.

–Bueno, desde la pelea contigo realmente siempre le ocurre algo, sabías que los druidas tienen desequilibrios?

–Esa palabra existe?

–Claro que si tonto, lo que no esperaba es que se aplicara en un druida –Contesté comenzando a quitarme la chaqueta y el chaleco antes de ponerme a sudar.

–Y que es? Que le hace?

–Fue el motivo por el que empezó una pelea contigo –Comencé a explicar suspirando solo de recordarlo–. Los druidas necesitan tener un equilibrio mente-cuerpo perfecto, y parece ser que realmente eso es muy complicado. Para Ximo especialmente, y la situación en el instituto lo hace todavía peor, desde que rondo a su alrededor ha tenido varios desequilibrios gordos, casi se rompe la mano, se volvió completamente invisible, la verdad es que es una locura como pierde el control y el dolor y el agobio en el que se queda por culpa de eso. Ximo es alguien muy sensible.

Todas esas situaciones las afrontaba como podía, pero siempre con miedo e impotencia por no saber realmente que hacer para controlar su mente. Era duro para él.

–Joder –Murmuró Kilian frotándose los ojos frustrado al escuchar que empeoró tras la pelea.

–Ximo quiere arreglar las cosas pero tiene miedo de que Seiji lo mande a la mierda y tu le pegues una paliza –Añadí consiguiendo que volviera a mirarme con sorpresa–. Sabe que la cagó, creía que tu manipulabas a Seiji y perdió los papeles, le tuve que contar algunas cositas pero entendió que no lo manipulabas, solo tuviste suerte, cosa que le hace sentirse peor por que perdió a sus amigos por culpa de eso.

–Seiji aún está resentido, se sintió utilizado –Suspiró Kilian negando con la cabeza–. A mi me da igual si dice que lo siente y no se repite esta bien, todos cometemos errores y la situación era normal que la entendiera así, pero Seiji... cree que Ximo no era su amigo de verdad.

–Si lo hablaran crees que podría solucionarse? –Pregunté tan poco convencido como él.

–No se, Seiji tras una bronca con su hermana no le ha vuelto a dirigir la palabra, literalmente ella se fue a la universidad aunque la estábamos convenciendo para que la dejara solo por no seguir viendo el vacío que le hacía Seiji.

Joder, si que era rencoroso.

–Pues echar un buen polvo y convencelo –Resoplé sin saber tampoco que hacer–. Ximo lo necesita, ya no sólo por lo que le hacen en el instituto, de verdad que le jode haberse quedado solo, más desde que sabe que no manipulabas a Seiji.

–Veré que puedo hacer –Suspiró mirando hacia otro lado.

Eso era que no prometía nada.

Mierda.

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Tal vez debía escribirle de una vez un mensaje a Mo para que tuviera mi número de teléfono... al final no era tan malo, solo... nuestras personalidades eran diferentes. Pero tal vez ahora fuera extraño.

Control (Yaoi/BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora