"Capitulo 45"

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Sentí el cuerpo de alguien encima de mi, me estaba presionando el pecho cortandome un poco la respiración, era demasiado peso para mi pobre cuerpo debilucho.

--Oye Lukas--Dije quejándome mientras lo movía para que despierte.

--¿Que pasa?--Contesto con voz débil sin moverse.

--Me estas aplastando.

--Lo siento--Se levanto con pesadez y se volvió acostar.

Lo note un poco decaído--¿Lukas te sientes bien?

--Me duele la cabeza--Volvió a cerrar los ojos.

--¿Quieres uno de los analgésicos que está tomando James?

--Tengo los que me dieron en la clínica, pero están en mi auto en un rato más voy por ellos.

--Lukas si te duele la cabeza tienes que tomarlos, yo iré por ellos ¿Donde están tus llaves?--Dije mientras me bajaba de la cama.

--Anne acuestate, aun no sale el sol.

--Y eso que, no importa--Me salí del cuarto antes de que dijera algo.

Todo estaba silencioso y con una oscuridad neutra, baje corriendo las escaleras y prendí la luz de la sala, busque por todas partes las llaves del auto hasta que las encontré detrás de una almohada sobre el sofá.
Abrí la puerta principal y el aire mañanero me pego en la cara, empecé a caminar sobre el césped que estaba húmedo por la brisa de la noche, presione el botón de las llaves para desactivar la alarma y abrir la puerta.
Creí que no encontraría rápido el frasco de los analgésicos pero estaban sobre el tablero del auto, las tome, cerré la puerta y volví activar la alarma.

Escuche unas voces que se acercaban sin pensarlo corrí hasta la casa y cerré la puerta, agarre una botella de agua y subí corriendo las escaleras, entre al cuarto y Lukas ya estaba sentado.

--Te dije que no fueras.

--Lukas se que no te gusta que te ayuden en nada, pero ahora no te sientes bien--Se quedo callado, me acerqué y le ofrecí el frasco junto con la botella de agua.

--Gracias Anne.

--No hay problema, deberías dormir un poco más.

--Tu igual--Se volvió acostar dejando la botella sobre el mueble de noche.

Me volví acostar junto a el poniendo mi cabeza sobre su brazo y ambos nos volvimos a quedar dormidos.

Después de un rato desperté y fui directo a darme un baño, sabia que tenia clases y tenia que darme prisa, a Lukas ni lo moví el tenia permiso de quedarse en casa y estudiar desde aquí, así que lo deje tranquilo.
Me termine de bañar me puse una falda y una blusa normal, estaba frente al espejo poniéndome un poco de maquillaje.

--Anne--Entro Kevin sin tocar--Creí que seguías dormida.

--No, ya estoy por bajar.

--Okay, antes de irme molestaré un poco al gruñón--Empezó a caminar hacia Lukas.

--¡No Kevin!--Lo agarre del brazo--El no se siente bien.

--¿Que le pasa?

--Tenia un fuerte dolor de cabeza, aun no amanecía y fui hasta su auto por el frasco de analgésicos.

--Entonces mejor lo dejo tranquilo, se salvo por esta vez--Me sonrió.

--Siempre tienen que hacerse maldades, ya vamos abajo--Dije mirando mi cabello por ultima vez.

--Me encanta hacerle maldades a estos idiotas.

--Ahora Lukas no esta para eso, así que fuera de aquí--Puse mis manos en su espalda y lo empuje.

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