Exhibicionismo.

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Durante el resto del evento, la familia de James no para de contarme cosas sobre él y de dejarlo en evidencia. "Tenías que haberlo visto con quince años. Recibimos muchas quejas de familias de otras chicas a las que les había roto el corazón."

James le pide a su madre que se calle pero yo le dejo continuar, Se ve que el grandioso James Buchanan Barnes siempre ha sido un mujeriego rompecorazones. "¿Te acuerdas de aquella chica? Margott creo que se llamaba" pregunta su madre y James asiente.

"Como para no acordarte de ella, era mi mejor amiga" le reprocha Olivia. James se rasca la cabeza incómodo y sus padres se ríen. "Bueno, dejemos de hablar de mis chavaladas y vamos a casa. Aquí ya hemos terminado" anuncia James,


Tras avisar a mi familia, todos nos dirigimos al ático. "Te gustan los lujos eh..." vacila mi padre después de fijarse en absolutamente todas las paredes. "Bueno, me gusta que su hija tenga todo tipo de comodidades y caprichos."

Mi padre lo mira y seguido niega con la cabeza. "No hace falta que digas eso, ya me tienes ganado." James sonríe aliviado y yo interrumpo el momento. "Bueno poneros cómodos que James y yo vamos a por la bebida y esas cosas."

James y yo nos alejamos hacia la barra de las bebidas y sacamos todos los licores y whiskys de lujo. "Si te has ganado a mi padre, te has pasado el juego. Ningún antiguo novio consiguió caerle bien."

"Es que yo le gusto a todos..." tira de arrogancia. "Calla y saca las botellas" río.

Ambos volvemos a la sala principal y vemos que nuestras familias ya se han hecho amigas, sobre todo nuestras hermanas. Las dos se han separado de nuestros padres para sentarse en el sofá de al lado juntas hablando de quién sabe qué.

Bucky y yo nos sentamos en el sofá que queda y esperamos a que nuestros padres hagan las típicas preguntas que aún no han tenido tiempo de preguntar en conjunto.


La conversación se alarga unas cuantas horas, concretamente hasta las cuatro de la madrugada. Y en todo ese tiempo hemos estado hablando de nuestros planes de futuro y bebiendo como nunca.

Mi madre a estas alturas no se puede ni siquiera ni mover. Mi padre está a punto de quedarse dormido y los padres de James igual. En cambio, mi hermana y Olivia están demasiado activas. Ambas han puesto en la televisión un karaoke de Justin Bieber para cantar.

Y por último, Bucky no puede aguantar más. En sus ojos veo destellos de lujuria. Sé que el alcohol lo revoluciona, y creo que ese es el problema, que ha bebido demasiado.

"Bueno, creo que va siendo hora de que nos vayamos todos a dormir. Permitidme que os enseñe vuestras habitaciones" se ofrece. Tanto mi familia como la suya aceptan y lo siguen a través de los pasillos.

Él los instala en las diferentes habitaciones para invitados que hay y se despide de todos ellos. Yo hago lo mismo y seguido me coloco a su vera dispuesta a irme a la habitación con él.

El sonido de la última puerta confirma que todos están en sus aposentos y con ello James me agarra de la cintura y me coge en brazos. "No sabes cuantas ganas tenía de que se fueran a dormir" confiesa borracho de lujuria.

"Buck espera, ni siquiera estamos en la cama" me quejo pero parece no importarle en absoluto. "No me importa, esta noche te voy a hacer mía en todas las partes de esta casa sin importar que haya invitados." Otra vez su torcedura de exhibicionismo.

Con cuidado de no hacerme daño, me baja al suelo y me pone contra la pared. Poco a poco comienza a besarme el cuello. Primero son besos lentos y suaves y después rápidos y húmedos.

Gimo de placer. "No te calles nada, no me importa que oigan." Intento formar las palabras mientras me besa. "Ya bueno, pero a mí sí que me importa que mis padres sepan la cantidad de guarradas que hacemos" le explico.

Él comienza a reírse pero no para de besarme. Con una mano me sujeta de la cintura y la otra la usa para perderla entre la costura de mis bragas y mi piel. "Estás muy mojada, apuesto a que llevas así toda la noche." Vuelvo a gemir.

El movimiento de sus dedos es rápido y muy satisfactorio. Intento girarme para besarle pero no me deja. "Esta noche voy a hacer yo todo el trabajo, ¿de acuerdo nena?" Cierro los ojos y asiento lentamente.

Lentamente sube mi vestido y lo saca por mi cabeza. El aire frío choca con mis pezones y estos automáticamente se ponen duros. "¿Qué quieres que te haga?" pregunta muy cachondo.

Nunca habíamos hecho una charla sucia a estos niveles, así que no sé muy bien qué responder. "Quiero que me folles, señor." Por su reacción, creo que no había mejor manera de responder a su pregunta.

De repente, deja la lentitud de lado y se desabrocha los pantalones dejando a la vista su enorme y duro miembro. "¿Lo quieres duro?" Jadeo por su tono y asiento. "¿Sí qué?" "Sí señor."

Sin perder más el tiempo, se introduce en mi sacando un gemido que retumba por las paredes que nos rodean. "Tan apretado para mí cariño..." Según va hablando, sube el nivel de fuerza de las embestidas llegando al punto de dolor placentero que me hace gemir.

"No sabía que tenías un lado masoquista pequeña." Sinceramente no lo sabía ni yo, pienso para mí misma. Seguido de eso, su mano golpea fuertemente mi glúteo dejando la marca roja.

"Otra por favor" pido a la desesperada y concede mi deseo. "Quiero que las cuentes, te voy a dar diez." Asiento con las lágrimas apunto de resbalar por mi mejilla.

¡Plass!

"Una"

¡Plass!

"D-dos" me cuesta hablar.

¡Plass! Esta es más fuerte que las dos anteriores.

Aguanto las siguientes como puedo y al llegar a la última no puedo más.

"No te he oído" reclama pero no puedo armar una simple frase. Entonces deja de embestir. "Por favor..." suplico a la desesperada. "¿Por favor qué?" pregunta. "Por favor, sigue. Estoy a punto de correrme."

"Solo porque has sido una buena chica. Ahora córrete por toda mi polla." Y con esas palabras vengo como nunca antes lo había hecho. "Oh Dios..." dice antes de hacer lo mismo.

Ambos jadeamos de cansancio. "Sin duda el mejor polvo de mi vida" confieso. "Lo mismo digo" concuerda. "Confiemos en que nuestras familias no se hayan enterado."

"Si no se han enterado con este, se enterarán con el que te voy a echar ahora en la encimera" dice con un tono oscuro. "Literalmente acabamos de hacerlo" me quejo. "¿Y?" pregunta mientras se agarra con la mano su pene que ya vuelve a estar duro.

Maldito James Barnes, eres un dios del sexo. 

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Sin duda creo que es una de las cosas más sucias que he escrito. Espero que la disfruten😈


Por otro lado, me gustaría deciros cosas sobre la próxima historia:

La historia será con Sebastian como personaje principal (obviamente) y tengo pensada hacerla mucho más explícita que esta. Respecto a la trama, en mi tiktok subí hace mucho la idea...

Saludos, los amo cada día más❤️

Y perdonen por la inactividad. 

-C

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