Lo Que Siento Por Ti

Estando juntos

Los días empezaron a avanzar con rapidez y con el tiempo era más fácil llevarse bien.

— ¡Usuratonkachi! — bueno, casi bien.

— ¿Qué pasó? — contesto desorientado el rubio.

— ¿Cuántas veces te tengo que decir, que acomodes la cama cuando te levantes?

— Iba a hacerlo, solo me estoy cepillando los dientes — alego.

— Primero, lo primero Naruto, apúrate o no te daré de desayunar — sentenció.

Naruto tuvo que tenderla en tiempo récord.

Cuando llegó a la mesa, la comida ya está servida y Sasuke está a esperando pacientemente a que llegara.

Se sentó con emoción.

— Itadakimasu — agrego el rubio y comenzó a comer.

Sasuke tuvo que reprimir una sonrisa, todo este tiempo con el rubio habían sido los mejores días de su corta vida, bueno por lo menos después del incidente del clan.

Sabía que se llevaba bien con Naruto, pero vivir juntos, era tanto un reto como un alivio, se sentía menos solo y eso era lo mejor.

— ¿Por qué sonríes? — escuchó la pregunta y rápidamente dejo de hacerlo.

— No lo hacía — agrego serio.

— Solo preguntaba, no me molesta que lo hagas, al contrario, tienes una hermosa sonrisa — dijo despreocupado mientras se mantenía centrado en su comida.

Sasuke no hallaba donde esconder su rostro sonrojado, eso había sido demasiado.

Naruto por su parte al no escuchar una respuesta, alzó la mirada para verlo y encontró una cara ligeramente roja, miro confundido.

— Sasuke...

— Más jugo, claro — hablo rápidamente mientras se paraba y casi corría a la cocina.

El rubio no tuvo más opción que seguir comiendo, pero ahora más confundido.

— Contrólate Sasuke — se repitió a sí mismo, mientras servía más jugo, regreso con toda la calma del mundo.

— Aquí está el jugo que pediste — agrego.

— Pero yo no pedí ningún jugo...

— Pues te lo tomas.

— Si, Sasuke.

Si, tenían una convivencia muy normal, en definitiva.

— ¿Tienes algo que hacer hoy? — pregunto el azabache.

— Saldré a dar un paseo, ya sabes, ¿Vienes?

— No tengo algo mejor que hacer de todos modos.

Naruto sonrió ante eso y juntos salieron del departamento.

— Esto puede ser peligroso — nombró Sasuke algo lejos del límite, una vez que habían llegado.

Naruto por su parte estaba sentado en la orilla disfrutando del viento en su rostro.

— Es mi lugar favorito.

— ¿Este voladero? — pregunto incrédulo.

— Oye, mucho cuidado, cuando hablas de mi papá — nombró ofendido.

Sasuke por su parte lo miro serio y luego se acercó más a la orilla.

— En definitiva, esto da vértigo — hablo mientras cerraba los ojos.