Lo Que Siento Por Ti

Despierta

Abrió los ojos en grande y volteo la mirada..

La masa se había desecho, se movió rápido hasta la camilla, ahí estaba Naruto, pero no estaba despierto, colocó su oído en su pecho podía escucharlo sus latidos, eso era un alivio.

Rápidamente salió en busca de Shizune quien es la que se había quedado a cargo.

Ambos entraron a la habitación, mientras monitoreaba y checaba al rubio, Sasuke no entendía lo que hacía, pues no es doctor, pero si algo estaba seguro es que su rubio despertaría.

— ¿Está bien? — pregunto el azabache después de un rato de silencio.

— Se encuentra estable, ahora que está libre podré conectarlo.

— ¿Conectarlo?

— Si, para que reciba suero, no te preocupes estará bien, pronto despertara — hablo Shizune mientras conectaba a Naruto con una jeringa.

El azabache observaba todo intrigado, hasta que quedó solo en la habitación, suspiro y se sentó en el sillón más cerca del rubio.

Era un gran alivio, ahora podía verlo, aún estaba dormido, pero por lo menos habían avanzado en algo.

Se quedó observando detalladamente al rubio, su respiración era tranquila, podía ver cómo su pecho subía y bajaba lentamente, su ropa estaba toda arrugada y rasgada, no tenía heridas superficiales era lo bueno, solo uno que otro rasguño que ya estaba cicatrizando, volvió su mirada a su rostro, tan tranquilo y en paz, era hasta raro encontrarlo así, siempre lo veías gritando y sonriendo, prefería verlo despierto, o durmiendo si supiera que está cansado y despertaría al día siguiente, no si lleva haciéndolo 3 días seguidos.

Con cuidado paso su mano por sus marcas en sus mejillas y una que otra cicatriz que tenía en el rostro, tenerlo tan tranquilo era raro, pero le gustaba la sensación de estar junto a él, siempre le gustaba la sensación de estar junto a él.

— Ehem... — escuchó en la puerta, casi salta del susto y se alejó de Naruto en un rápido movimiento.

— ¿Quién eres? — pregunto a la defensiva.

— Hola, soy Mila, es un gusto — se acercó a saludarlo de mano, más no recibió respuesta, algo apenada la bajo — Vengo a ver a Naruto, ouh... Pobrecito, aunque debo de admitir que es más tranquilo así — dijo tratando de aligerar el ambiente, claramente no lo logro.

— ¿De dónde conoces a Naruto? — pregunto el azabache aún dudoso.

— Es uno de mis clientes frecuentes, en mi tienda, siempre compra ramen y ese tipo de cosas, nos llevamos bien, ¿Tu que eres de Naruto?

— Soy su... Mejor amigo — le agrego serio.

— ¿Eres Shikamaru? — pregunto.

— ¿Qué? — nombró ofendido — Mi nombre es Sasuke.

— Oh — solo lo había dicho, porque solía hacerle la misma broma a Naruto, diciendo que su mejor amigo es Shikamaru y Sasuke parece más como su novio, pero nunca lo convencía — Mucho gusto Sasuke, he escuchado mucho sobre ti.

— No parece, como para haberme confundido con alguien tan diferente como lo es Shikamaru.

— Ya, solo era una pequeña broma, no te alteres pequeño.

El azabache no confiaba en la nueva persona que decía ser amiga de Naruto, pero tampoco tenía pruebas de lo contrario.

— ¿Cuánto tiempo ha estado durmiendo? — pregunto realmente preocupada.

— Tres días.

— Eso es mucho, pero estoy segura que no tardará.

El azabache asintió, no tenía otra opción que hablar con la desconocida.

— Traje el desayuno, aún es temprano, ¿Quieres comer?

Recibió una mirada de desconfianza.

— No te haré nada malo, Naruto realmente es una persona cercana, me preocupa y tú no eres la excepción, también deberías comer.

Acepto el almuerzo y se quedaron platicando un rato más, Mila le contaba cosas acerca de su tienda, que Sasuke no entendía y ciertamente no le importaba entender.

Después de un momento más, Mila tuvo que retirarse para su alivio y lo dejo solo por fin, tomo su libro y quedó inmerso en la lectura.

Recostándose en el sillón de una manera cómoda, logro volver a conectar con su lectura, estaba intrigado por lo que se venía, estaban tan cerca del final de la historia, cómo había avanzado todo, le encantaba, sin duda noto la diferencia con su lectura anterior, la novela pasada era un amor juvenil, cliché, pero realmente entretenido de ver, en cambio está historia era diferente, todo se desarrollaba de una manera más elaborada, con un mensaje más específico y con una calidad mucho mejor.

Tal vez ese libro se convertiría en uno de sus favoritos, sabe que suena tonto, tomando cuenta que es el segundo que lee, pero está increíble, era todo lo que podía decir.

Cuando lo acabo se emocionó por el final, estaba muy feliz, aunque el final no lo conocía y fue realmente nuevo para él, le encantó, a su parecer término de una forma perfecta, es como si el libro le hubiera dado un abrazo al final, felicitándolo por su lectura y el orgulloso de que terminara así, pensamientos extraños ahora que lo pensaba.

Dejo el libro de lado y miro a la camilla del rubio, seguía durmiendo, su vista se perdió en esa dirección, no estaba viendo realmente, solo estaba pensando el final, imaginando los escenarios, y reflexionando de la lectura.

Para despejar un poco su mente, salió a dar un paseo rápido, solo caminando por la aldea, comió en el camino y nuevamente regreso al hospital.

— Hola — la voz lo saco de sus pensamientos, miro hacia el rubio, pero no era el, entonces miro a la puerta — Hola Sasuke, lamento molestar.

— No es nada, me extraño no verlo antes aquí.

— Si he venido, pero cuando lo hice no estabas, era la hora de comida, he estado rondando por aquí, Kakashi tampoco ha despertado.

El cerebro de Sasuke se iluminó por un segundo, Kakashi, se le había olvidado completamente su existencia, muy malo de su parte.

— ¿Cómo está?

— Estable, al igual que Naruto, creo que solo será cosa de esperar a que despierten — agrego con una sonrisa.

— Si eso creo — suspiro agotado.

— Me alegra que estés aquí, Naruto se sentiría muy solo, pero sé que está bien si tú estás junto a él.

— Solo estoy cumpliendo con mi responsabilidad — nombró serio.

— ¿Tu responsabilidad? — pregunto curioso.

— Si, si está así es por culpa mía, no pude idear un plan lo suficientemente rápido y esto paso.

— No creo que haya sido culpa tuya, las misiones siempre van a hacer complicadas, eres solo un niño Sasuke.

— Soy lo suficientemente grande, soy un ninja y es mi responsabilidad actuar como tal.

— Ya no digo nada, pero quiero que sepas algo, cuando estás en una misión complicada, siempre trataras de pensar en cómo salvarlos a todos, pero no siempre será posible, a veces las cosas no saldrán como quieres, no dejes que llegue ese momento, usa todos tus recursos, usa un buen trabajo en equipo, tal vez no sea fácil, pero se va a lograr y de todos modos, no te culpes, en ese tipo de situaciones no la tienes, créeme.

Para Sasuke escucharlo fue un alivio, que un adulto se lo dijera se sentía mejor, que el mismo haciéndolo.

— Gracias, supongo.

— Eres un chico muy responsable Sasuke, cuando te di clases en la academia, temí por un momento que pelearas por ti mismo, pero veo que eso no es un problema, sabes cómo ser fuerte, por las personas importantes — nombró mientras miraba en dirección al rubio.

Sasuke miro de igual forma.

— Te dejare descansar, ya es tarde, igual estaré pendiente por cualquier cosa, buenas noches — dijo antes de salir por la puerta.

Sasuke se recostó y pensó en todo lo antes dicho.

— Despierta —