38 |Klaus estresado (Parte I)

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—¿Qué pasa? ¿Veneno? ¿Esa porquería que tomaba? —Klaus habla muy alto y su voz me destroza los oídos, así que aprieto lo que sea que estoy sujetando, logrando darme cuenta que es su mano

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—¿Qué pasa? ¿Veneno? ¿Esa porquería que tomaba? —Klaus habla muy alto y su voz me destroza los oídos, así que aprieto lo que sea que estoy sujetando, logrando darme cuenta que es su mano. —¿Soleil? —Me llama e intento abrir los ojos.

Consigo hacerlo, pero la luz me enceguece casi por completo y quiero cubrirme, pero Klaus con su mano libre lo hace por mí, colocando la palma sobre mis ojos para que de esta forma el choque no sea tan fuerte.

—Joder... —Me quejo porque su mano contra mi frente me hace doler la cabeza. —¿Qué pasó?

—Eso queremos averiguar. —Poco a poco la luz deja de ser tan irritante, así que aparto su mano y trato de sentarme, pero un fuerte mareo me lo impide. —Kol te trajo, ¿Lo recuerdas?

—Si. —Me duele la cabeza como no me había dolido en siglos, pero ya puedo ver y resulta que todas, excepto Melody, Alejo y Hope me están observando. —¿Qué pasó? —Recuerdo lo que pasó a la perfección, simplemente no lo entiendo.

Malcom saca su teléfono de su bolsillo, teclea un par de veces y luego lo coloca frente a mí, enseñándome mi reflejo gracias a la cámara frontal.

¿Qué demonios?

—Tampoco lo entendemos. —Me explica mi mejor amigo mientras o toco la asquerosa herida que tengo en la frente, aquella que efectivamente recuerdo como me la hice, pero ¿Cómo es posible que siga ahí? y lo más extraño es que tiene tres puntos, es decir, la cosieron. —No dejaba de sangrarte, tuve que coserla. —Me explica Malcom mientras juego con los trozos de hilo quirúrgico que sobresalen al final.

Cuando me duele como si me encajaran un cuchillo en la cabeza suelto el hilo y tomo una respiración profunda.

Mi estómago ruge y lo sujeto con fuerza porque tengo hambre, demasiada.

—¿Me dan algo de comer? —Pregunto y es Elijah quien se acerca con una copa repleta de lo que imagino debe ser sangre, porque no puedo olerla y lo obtengo por lógica cuando puedo verla. —Gracias. —Él asiente y se retira, permitiéndome beberla, pero en cuanto toca mi lengua termino vomitando sobre el suelo ¡Porque es asqueroso!

Klaus se acerca y me sujeta el cabello en la parte trasera de la cabeza mientras yo vómito, asqueada por ese terrible sabor ¡Y está coagulada! Dios santo, es tan asqueroso que no puedo creer que durante mil años viví alimentándome de eso.

Y, lo peor, tengo más hambre ahora, así que volteo a ver a Klaus.

>>—Quiero una hamburguesa. —Él abre los ojos de par en par porque acabo de pedirle una hamburguesa teniendo un chaco de vómito en frente de mí ¡Pero tengo mucha hambre!

—Hay comida para Alejandro abajo. —Replica Freya, que se encuentra moviendo un curioso collar sobre un tazón de madera. —Alguien tráigale algo, juro que escucho su estómago gruñir.

Marcel es caballeroso y sale, también Rebekah, mientras yo siento como mi estómago se estruja y se relaja constantemente. Tengo hambre, lo sé, pero es un hambre diferente que puedo controlar porque no es mortal como el ansia de sangre, es un poco más tranquila, pero sí irritante.

Keyla {Klaus Mikaelson}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora