Efectos de amor

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Pov T/n

—Conocí ahí a la peor persona del mundo—comencé a quejarme—Primero me detuvo, comenzó a hacerme preguntas y a gritarme, sospechaba demasiado. Un rato después me harte de todo eso y saque mi arma para amenazarlo, lo herí por accidente y el me hirió de regreso a propósito ¡Lo miso fue un accidente! Pero el problema es que esa fue la gota que derramó el vaso y me baje y lo golpeé, me regreso el golpe y comenzamos a pelear.

—Veo que tuviste un viaje interesante—tomo un trozo de comida Navier—Mi hermano se encuentra en la frontera, cuando tenga la ocasión le diré que me muestre fotos de los encargados de la frontera y recibirá el castigo por herir a la realeza y mi amiga.

—¡¿Tienes un hermano?!—me sorprendí

—Si, el fue enviado a la frontera por mis padres un tiempo—contestó como si nada—Es una persona muy amable, pero se metía en muchos problemas.

—Que tipo Jajaja—reí y cruce mis brazos—Luego tienes que presentarme a tu hermano—suspire—Con esto siento que no se nada sobre ti jajaja.

—Vamos—sonrió—Sabes mucho más que el 99% del Imperio, la excepción serían mis padres y familiares.

—Me alegra saber eso—sonreí

—Si—sonrió de regreso, pero después parece haber recordado algo y su sonrisa se borro—Me entere que tu hermano está más delicado.

—Oh, si—mi mirada se entristeció—Pronto llegara el momento en el que nos dirá sus últimas palabras—sonreí triste

—Los extrañare cuando se vayan—tomo mi mano

—¿Nos? Awww—sonreí—Si quieres a mi hermano.

—Es un muy buen amigo—se sonrojó un poco—Y me a ayudado bastante.

—Me alegra que se lleven bien—sonreí

—A mi también—me regreso la sonrisa

—Pero no te preocupes—tome su mano—Al menos estoy 100% segura de que yo regresaré después de su muerte. Por ti y porque soy la encargada del comercio—sonreí

—Me alegra saber que regresarás—apretó mi mano—Doy gracias porque iniciáramos un comercio entre los dos Imperios Jajaja.

—Lo mismo opinó—seguimos hablando de diferentes temas mientras terminábamos de desayunar. Al terminar la acompañe por unos papales a su oficina, ya que pronto nos iríamos a la reunión de comercio.

Estábamos sentadas en su escritorio, cuando de pronto entró Laura pero...sin Coleette.

—Su Majestad—llegó corriendo Laura—Se entero que el Vizconde Lotteshu se piensa mudar aún más cerca de la capital.

—Es verdad—dijo una de las damas de honor—Yo también escuché eso.

—También me entere que busca una niñera—dijo Eliza

—¿El Vizconde expone a Rastha y después se alía con esta y se muda a la capital?—susurró Navier—Algo anda mal.

—Es verdad—le susurré de regreso—Se lo que piensas y es verdad, el Vizconde si la chantajea. Por eso lo del anillo—me acerqué un poco más—Pero no le des importancia, mientras le afecte únicamente a ella no le des importancia.

—Tienes razón—sonrió—Bueno, tengo que encontrar los papeles—abrió su cajón y ahí encontró una poción.

—¿Qué es?—pregunte

—¿Es la poción de amor que le regalaron en su cumpleaños?—preguntó Laura con ilusión.

—Si—la miro detenidamente—Creo que me la regalaron como una broma.

La princesa de el imperio de OccidenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora