La princesa de el imperio de Occidente

Celos

Pov t/n

Me encontraba en la habitación de Navier junto a ella, y frente a nosotras se encontraba Kaufman.

—Pero, se supone que si había funcionado—hablé mientras me acercaba a este.

—Creo que no—habló Navier

—Mmm—puse mi mano en mi barbilla y pensé un momento—Tengo una idea.

—¿Qué es?—pregunto Kaufman

—Gran Duque Kaufman—me acerqué—No mire a Navier, ella no está aquí, ¿De acuerdo?

—Esta bien—cerró los ojos—Listo, ya no la veo ni escucho, solo a usted.

—De acuerdo—sonreí—Mis sospechas eran correctas.

—¿Cuáles sospechas?—cuando Navier habló Kaufman se puso rojo y yo sonreí.

—La cura si funcionó—los dos se veían confundidos—La cura únicamente funcionó hacia mi, no hacía Navier. Por eso Kaufman sigue actuando de esa forma frente a ella.

—Es verdad, yo la quería ver a usted Emperatriz—hablo Kaufman—Por favor ignore lo que digo.

—¿Porque únicamente funcionó con usted?—se preguntó Navier

—Es un misterio, no podría saberlo—conteste

—¿Y si era la poción equivocada?—se sentó Navier

—Imposible—habló el Gran Duque—Como ya sabrá, esa poción fue echa específicamente para contrarrestar la poción.

—Además de que no hubiera contrarrestado los efectos hacia mi—me senté frente a Navier

—Es verdad—Navier puso su mano en su barbilla—¿Qué habrá pasado, algo habrá afectado la poción?

—Tengo una vaga idea de lo que podría ser—hablé—Tengo que confirmarlo—me levantaré—Iré a ver si me puedo contactará con alguien. Si me disculpan, me retiro—Me di la vuelta y me dirigí a mi habitación—Coleette—hablé al entrar

—¿S-si?—se acercó

—Por favor contáctame con el Gran Mago tan rápido como sea posible—me senté en mi escritorio y escribí una carta para después entregársela.

—De acuerdo Princesa—salió de la habitación para buscar a un ave especializada en cartas al Gran Mago.

—Mmhm la la la—tararé una canción y después suspire—¿Será esto parte de los fallos en la magia...o algo más?—mire a la ventana

Pov Rastha

Me encontraba junto al Emperador en mi habitación, por fin había ganado el valor para preguntarle por su extraño cambio de comportamiento hacia la Princesa. No perdería la oportunidad de preguntarle.

—Rastha quiere preguntar algo, Su Majestad—me acerqué a él.

—¿Qué es?—me acarició la cabeza

—Mmm...—dude un momento—Rastha quisiera saber porque si cambio tan repentino de actitud hacia la Primera.

—¿A que te refieres?—pregunto sorprendido

—Rastha se refiere a que usted al principio la golpeó por tratar mal a Rastha, y ahora se preocupa por ella—hice un puchero

—¿Estas celosa?—sonrió y me sonroje—La Princesa tiene mucho poder, a pesar de no ser la siguente heredera. Además de que es un médico mago, nos convendría más tenerla de nuestro lado.

—Es verdad—sonreí

—Además..—siguió hablando y yo lo volteé a ver—Si logramos tenerla de nuestro lado, tendíamos más poder y el Príncipe Heinry no podría iniciar una guerra.