Capítulo 84

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ELIJAH POV

No lo soportaba.

Mientras el doctor Anderson examinaba a Elise como venía haciendo a diario, yo permanecía anclado a la silla a escasos dos metros de la camilla con las manos echas puños mirando como el susodicho anotaba algo sobre las pulcras hojas en sus manos.

Sabía que el médico no le haría daño, pero me resultaba rotundamente complicado no sentir desconfianza hacía todo aquel que entraba a la habitación considerando los últimos acontecimientos, los cuales eran prueba de que las lealtades no eran algo certero. Y aunque el escuálido humano no podía representar una amenaza por si solo, podía actuar a costa de la manipulación del enemigo.

Quizás exageraba con mi comportamiento, pero no iba a dar el beneficio a la duda en este asunto.

Anderson pasó de examinar el monitor de signos vitales a observar el monitor de actividad cerebral. El cual no había tenido ninguna variación. En otras palabras, no había cambios ni avance productivo en su coma.

- ¿Algún cambio? - Me atreví a preguntar a pesar de la evidente respuesta.

- Ninguno - respondió con sinceridad enfocando su atención en mi - Ha pasado poco tiempo señor Mikaelson, no pierda la fe en que ella logrará despertar. Es joven y goza de buena salud incluso en este estado. Todo está a su favor -

Si su intención era darme esperanzas estas no lograron llegar a mí. Era como si a cada día que pasaba esa posibilidad fuera perdiéndose poco a poco.

- ¿Ha hablado con la señorita Freya? – preguntó. Lo miré extrañado por su pregunta. ¿Debía hacerlo? No recordaba que Freya hubiese mencionado algo.

- No, ¿Hay algo que deba saber? – cuestioné enfocando mi total atención en él mientras este de forma apresurada y ligeramente nerviosa se dispuso a examinar que el cuerpo de Elise no tuviese llagas por la inmovilidad.

- Hace unos días le planteé la posibilidad de trasladarla al Tulane Medical Center, un colega mío trabaja ahí y estaría dispuesto a tratar a la señorita Elise... si usted está de acuerdo –

¿Llevarla a un hospital? Apreté la mandíbula. ¿En que ayudaría eso? Probablemente lo único que conseguiríamos era que el enemigo completara su cometido ahí sin ningún problema. Tal vez por eso Freya no me había mencionado nada.

- Agradezco la intención Dr. Anderson, pero por el momento ella permanecerá aquí recibiendo la misma atención de su equipo. A menos que usted prefiera no hacerlo más – apunté

- Mi equipo y yo permaneceremos al tanto de ella hasta que usted lo considere oportuno señor – respondió.

No estaba al tanto de hasta donde ascendía la suma pagada por Niklaus al equipo de experimentados médicos, pero por su negativa a abandonar su trabajo aquí en el complejo ya podía hacerme una idea de lo jugoso que debía ser su pago.

Asentí en su dirección y este arropó a Elise nuevamente comenzando a guardar sus pertenencias en su maletín.

- Sin nada más que añadir, yo me retiro. Si nota algún cambio no dude en llamarme sin importar la hora que sea –

- Se lo agradezco – el médico asintió y sin más preámbulo se dirigió a la salida dejándome a solas con ella.

[...]

Freya POV

Mi vida era un manojo de nervios y tensión acumulada. Nuestra situación no mejoraba y los problemas seguían apilándose poco a poco hasta el punto de volverse asfixiante permanecer en el complejo que ahora fungía como base central de operaciones de la alianza.

Dangerous Lineages (Linajes Peligrosos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora