Dangerous Lineages (Linajes Peligrosos)

Capítulo 23

Frederick POV

El sol estaba por ocultarse en el horizonte. Todas las facciones estaban enfocadas en proteger la ciudad de un ataque que no ocurriría, por lo menos no esta noche. Mientras todos estaban entretenidos con la vigilancia eso me daría la ventaja que necesitaba para separar a Hayley y a Jackson de su manada y entregarlos a Rhaegar en una zona fuera del campo de visión de sus seguidores. Desconocía los motivos por los cuales Rhaegar los necesitaba, sabía que los iba asesinar, pero desconocía porque solo a ellos si los cazadores podían aplastar a los lobos de Hayley con un poco de esfuerzo.

Solomon había mencionado que habían estado causando problemas para ellos y con eso se había referido a toda la manada, así que ¿Por qué asesinar solo a los alfas? Luego de su muerte alguien más tomaría su lugar y seguirían interponiéndose en su camino.

Después de entregarle a Solomon ambos lobos tendría que alejarme para no levantar sospechas, pero esta misma noche hablaría con él y le exigiría las respuestas a mis preguntas. No podía pedirme que hiciera esta clase de cosas sin darme una explicación, mucho menos cuando estaba corriendo un gran peligro por hacerlo.

Miré el reloj una última vez esperando que ambos lobos pasaran por el sendero que les llevaba a la carretera, pero aún no había rastro de ellos. No creía que hubiesen tomado otra ruta para salir del lugar, algo los debió haber entretenido.

Aguardé por unos minutos más antes de poder visualizarlos caminando en dirección a la camioneta de Jackson a unos cuantos metros. Estaban solos y no parecían haberse percatado de mi presencia todavía. Aquí era donde iniciaba mi plan.

Tomé una bocanada de aire y salí corriendo de entre los arboles cruzándome en su camino, aparentando lucir cansado.

- ¿Frederick? – me llamó la loba acercándose a mí - ¿Qué haces aquí? – preguntó

- Un cazador, varios miembros de mi manada lo interceptaron y ahora van tras él – mentí haciendo ademán por seguir con mi presunta carrera.

- ¿Dónde? – preguntó Jackson interponiéndose en mi camino.

- Cerca del arroyo, a diez kilómetros antes de llegar al rio, cerca de un pequeño arroyo – me apresuré a decir mencionando el lugar exacto donde los cazadores aguardaban por ellos.

- Hayley avisa a Klaus, yo iré con Frederick – ordenó Jackson a la loba. Esta de inmediato rebuscó algo en el bolsillo delantero de su jersey sacando el móvil luego de unos segundos.

Mi cuerpo se tensó al ver como esta se disponía a llamar al híbrido. Instintivamente metí la mano en mi chaqueta tomando el arma que los cazadores me habían otorgado. El más mínimo indicio de que lograra contactar a Klaus y me vería en la necesidad de acabar con ambos yo mismo.

- No tengo cobertura – dijo Hayley guardando su dispositivo móvil de nuevo.

- En ese caso ve y busca a la manada, diles que se dirijan al arroyo. Nosotros iremos tras él – esta vez la loba se negó a la petición de Jackson interponiéndose en su camino.

- No, yo voy con ustedes. Si su manada ya va tras ellos no será necesario que llamemos a alguien más – apuntó Hayley con firmeza

Observé a Jackson esperando a que hiciera caso a Hayley y desistieran de su idea de llamar a alguien. Solo eso necesitaba, una vez que lograra alejarlos del pantano ya no habría vuelta atrás.

- Esta bien – aceptó un no muy convencido Jackson regresando su mirada hacía mí – Guíanos hacia él –

Asentí sonriendo internamente dejando el arma en su lugar. Obedecí al lobo emprendiendo de nuevo mi supuesta persecución al lugar donde encontrarían su muerte.