Outer Banks [JJ Maybank]

(28)

La tarde siguiente nos habíamos reunido John B, Kie, JJ y yo en el embarcadero, después de que John B hubiera pasado el día fuera y llegase todo alterado diciendo que tenía que hablar con nosotros. De lo que me enteré -y lo digo así porque no prestaba apenas atención a lo que nos contaba, solo podía mirar a JJ a mí sentando en la barandilla mirándome, igual que yo a él, con una sonrisa de oreja a oreja con una nota tímida. Aún recordaba con exactitud lo de anoche, y no me arrepentía en absoluto. Aún sentía sus manos en mi cuerpo, dejando besos por todo ello, moviéndose en mi interior de una forma tan bonita e intima. Nos había juntado del todo, habíamos sido solo uno durante unos minutos. Los minutos más bonitos de toda mi vida. Unos minutos que nunca olvidaré y una sensación que jamás dejará mi piel-. El caso. Lo que me enteré que John B quería decirnos era que Ward había comprado la casa de los Crain y se había llevado todo el oro.

— ¿Se lo ha llevado todo? — preguntó Kie

— Todos los lingotes — respondió el castaño tumbado en la madera del embarcadero con su cabeza reposada en un salvavidas mientras hacía el intento de quitarse la escayola del brazo — Todos y cada uno — decía soltando un suspiro para después lanzar el cabestrillo al suelo — Tampoco me esperaba un final feliz —

— John B... — le regañó la morena

— ¿Qué, Ki? Es una fisura, da igual

— No, vas a joderte el brazo de por vida —

— No pasa nada. ¿Ves? — movió su mano

— ¡Chicos! — escuchamos la voz de Pope a lo lejos corriendo por el punte hasta el embarcadero. Nos giramos hacía él — ¡Chicos! — venía todo sudado y con la camisa mojada por la parte interior del pecho — He venido corriendo — se apoyó con ambas manos en sus rodillas cuando se detuve en medio nuestra 

— ¿Qué tal? — le preguntó John B

— ¿Y la entrevista? — le preguntó JJ girándose

— No preguntes —

— Guay — murmuró el castaño con desinterés. Kie y JJ nos habían contado lo sucedido ayer, quizás -y solo quizás- me picará un poco con ellos por no decírmelo antes ya que aunque lo negará era mi padre y me hubiera gustado saber que lo estaban espiando. Pero... no pasó nada. Era entendible.

— JB — balbuceó Pope — Escucha. Lo siento, tío. Por todo —

— No pasa nada — respondió este con los ojos cerrados

— No tengo mucho tiempo, pero tengo información tácticamente relevante. A ver, antes de la entrevista, mi padre me dijo que iba al aeródromo a cortar palmeras por el avión de Cameron — le miramos atentos — Como pesaba tanto, necesitaba una pista más larga. Así que, estaba en la entrevista, pensando: "Mm, ¿por qué necesita Cameron una pista más larga? ¿Qué podía ser tan pesado?" —

— El oro — murmuró JJ

— Eso es — asentí

— Exacto — gesticuló un tanto extraño dandole la razón — Tíos, es nuestra oportunidad. Sale esta noche. Vamos —

— No podemos rendirnos — decía Kie bajándose de la vaya sonriente

— ¿Cuál es el plan? — le preguntó el rubio abrazándome por la espalda

— Robar esa mierda — respondió decido John B

JJ rápidamente bajo de la barandilla y todos juntos comenzamos a correr por el punte.

— ¡Vamos allá! —

— ¡Vamos, chicos! —

Exclamábamos felices. Nos subimos rápido a la furgoneta y pusimos rumbo a la pista donde Ward tenía su avión.