Oh barrotes!
Fríos, tan fríos cómo tus manos cuando soltaron las mías.
Delgados cómo tus lindos labios.
Pero fuertes cómo la espada que clavaste en mi costado, el día que me traicionaste.
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La siguiente conversaciónimaginensela en inglés, me da mucha pereza traducirla. Gracias♡
– Es obvio que Altagracia se encontraba en Río de Janeiro aquella semana que fuimos pero no contábamos con que logrará escapar — deja la tableta sobre la mesa de juntas
– El vuelo que tomó aterrizó en Francia, nos llevó la delantera y consiguió refugiarse... hasta ahora no hay aviso de las autoridades de que logrará moverse, lo que nos hace pensar que sigue allí
– Pero ha estado muy quieta capitán, opino que deberíamos regresar a Río de Janeiro ¿Y si nos engaño?
– Se está tomando su tiempo, sabe que escapo apenas, tendremos que fingir que bajamos la guardia, apuesto que cuando se sienta segura volverá a aparecer. Por ahora eso es todo caballeros, estén atentos a cualquier movimiento inusual a las afueras de la ciudad
Aunque los gringos se creían más listos que Altagracia, ella ya estaba un par de pasos adelante. Les daría exactamente lo que ellos esperaban; después de unos días desconocidos comenzaron a llamar describiendo a la mujer que todos estaban buscando, luego las redes se llenaban de cortos videos donde Altagracia aparecía, esto los volvió locos porque parecía estar tan cerca pero no entendían como ella lograba escaparseles, en lo que ellos se enfocaban en elaborar una trampa efectiva, ella estaba en Río cuidando de su pequeña.
Pero no sólo se encargo de eso, a pesar de que debía mantener descanso, enfocarse en su maternidad para eso tenía a José Luís, además de Magda y Matamoros. Mientras ella analizaba el gran plan que se le ocurrió, revisaba que no hubieran inconsistencias porque sino todo se iría al carajo y ese era un lujo que no podía darse; dejando eso de lado también comenzó a movilizar a su gente para localizar a sus lindas fichitas de cambio, ya el abogado de José Luís se estaba asegurando de dar con un juez que este algo implicado para que no se negara a revisar la propuesta de absolución de cargos.
Así se la pasaron un par de días, José Luís tuvo que prepararse mentalmente para regresar a México, un viaje de negocios no dura tanto y el suyo pues fue bastante largo. A pesar de que recién se encariñaba con Aliyah, se le hacía muy difícil irse, ella era una bebé algo complicada a veces pero se trataba de su pequeña, la misma que cuando duerme da pequeñas sonrisas, a la que le gusta estar recostada boca abajo sobre su papá y la que es una cosa tierna por donde la veas. Dejarla no iba a ser fácil, mucho menos verla a través de una pantalla pero quería creer que esto era temporal.
– No quiero irme — se mece con Aliyah en brazos
– No puedes seguir aquí, un viaje de negocios no dura dos semanas Luís, además entre más tardes, habrán más sospechas
– ¿Por qué te pones a doblar ropa ahora?
– Porque más tarde no podré, cuando tienes la oportunidad de hacer las cosas debes hacerlas de una buena vez
