La tercera es la vencida

68-Mundo gris

En el viaje Alejo hizo una parada en su casa, de donde sustrajo dos armas.

ꟷ¿Cómo es que tienes eso?ꟷpreguntó Samuel sorprendido viendo como se sentaba nuevamente en el asiento del copiloto con aquellos dos objetos.

ꟷ Nunca me intereso la milicia, pero no quita que no me hayan enseñado a disparar. Todo es legal porque tengo permiso para portar armasꟷles aseguró mientras guardaba las armas en la guanteraꟷ Las tengo por si algún día tengo que proteger a mi familia ¿Fiama no te enseño a disparar?

ꟷ No, no es algo que estuviera interesado en aprender. Aunque capaz ahora empieza a cambiar de opinión.

ꟷ Pues, deberías, ahora nos haría falta. Ojalá no tengamos que usarlas.

Los hombres no dijeron más y se embarcaron en el viaje.

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Los nervios de los cautivos estaban a flor de piel. Ninguno sabía que pasaría. Se suponía que Maximiliano llegaría ese día. El tiempo estaba llegando a su límite.

De repente nuevamente aquello chicos ingresaron. Uno portaba un arma con el cual amenazo tanto a Fiama como a Juan Pablo para que se quedaran quietos mientras que el otro fue directo a tomar a Lara, la tuvo que jalonear ya que ella se negaba a ir de buena gana.

ꟷMuy bien, así los quiero quietitos ꟷdijo el hombre que les apuntaba.

Cuando lograron sacar a Lara salieron cerrando nuevamente la puerta.

ꟷNo va a funcionarꟷaseguró Juan Pablo mientras Fiama empezaba a forzar la soga que la mantenía atada.

Había descubierto entre el polvo una hoja metálica, lo cual le hizo saber que se encontraba en una fábrica metalúrgica, aquella hipótesis fue corroborado por Juan Pablo. Con aquel objeto había empezado a romper un poco la soga cortándose varias veces la mano al intentarlo. No pensaba en romper la soga en su totalidad ya que no le servía de nada estar libre en aquella habitación ya que ellos podrían entrar con un arma y matarlo sin tanto problema por eso solo había rasgado un poco el amarre para que con hacer un poco de fuerza ésta se rompiera. Tenían que aparentar ser totalmente indefensos.

ꟷ Es la única oportunidad que se nos presentóꟷrespondió ocupada en desatarse.

ꟷ Lara no va a poder contra ellos. Solo tiene de arma una hoja de metal. La matarán y luego vendrán a matarnos a nosotros

ꟷ Por lo menos va a luchar. Yo sé que ella va a luchar.

Afuera de la habitación Lara fue llevada a rastras hacia una clase de cama improvisada.

ꟷ Muy bien. Ayer anunciamos la transmisión en vivo de una violación. No sabés la cantidad de personas que esperan ansiosos este momento, hubo muchas suscripciones para el eventoꟷ le aseguró el que sostenía el arma. Cuando ella estuvo instalada en la cama, puso su arma sobre una mesa y se dispuso a grabar con su celular mientras el otro se ponía un pasamontaña para cubrir su identidad en el videoꟷ Sueltale las manos, es mejor cuando intentan pelear.

El hombre se subió a la cama junto con ella e hizo lo que su hermano le indicó.

ꟷNo te limites bonita. Intenta pelear para que sea más excitanteꟷpidió el que filmaba.

Su instinto de supervivencia prevaleció e intento golpear al que tenía el pasamontaña, pero éste simplemente se rio y la abofeteo tan fuerte que hizo que terminara tendida en el lecho.

ꟷMirá eso fue lo único que pudo hacer. Probablemente la embarazada hubiese sido más divertido ꟷdijo el que iba cometer primero el acto, totalmente desilusionado.