Kamigami No Basket

Acercamiento

Advertencia: Este capítulo contiene Kikasa Hard :v porqué sí, porque puedo y porque quiero :v disfruten mis marranit@s~ ( ͡° ͜ʖ ͡°)🔥

Kise se separó de sus labios, jadeando y se irguió un poco admirando el desastre en su cuerpo. Se estremecía casi con violencia y su bonito pene se contraía de vez en cuando mientras sus marcadas venas punzaban, deseosas de contacto.

Por Zeus. Era demasiado atractivo.

Demasiado erótico.

Chasqueó su lengua molesto al percatarse que su única prenda de vestir cubría las hermosas piernas de su amante, así que rápidamente se deshizo de esta, dejándola cerca de la vestimenta del mayor.

Ahora estaban en iguales condiciones y podían continuar con aquello.

-...N-No me mires tan fijo...-Dijo el pelinegro, desviando su mirada, sonrojado.

-...Lo lamento...-Sonrió-...Es que eres tan hermoso que no pude evitar admirarte...-Murmuró y acarició su costado antes de aferrar sus manos a su cintura con fuerza-...Tengo tantas ganas de...-Se relamió sus labios y lo haló hacia sí, haciendo que su pene se presionara en la estrecha entrada del oji-azul.

Yukio dió un respingo y abrió sus ojos grandes, echándose hacia atrás del susto.

-...¡No hagas eso tan de la nada! -Se puso totalmente rojo y tomó el pene ajeno para quitarlo de su entrada. Kise suspiró suavemente y rió un poco-...No te burles. No es gracioso...-Frunció el ceño, inflando sus mejillas.

-...Lo siento Yukiocchi...-Acarició una de sus sonrojadas mejillas-...Pero es que no puedo evitarlo. Eres demasiado...tierno.

-...¡No soy tierno! -Golpeó su rostro. Un fuerte puñetazo que hizo enrojecer rápidamente la mejilla del rubio.

En ese momento era que agradecía todo el ejercicio que su padre le había dado a base de golpes.

Sino ya le hubiese desencajado la mandíbula con ese puñetazo.

-...Me doy cuenta de ello...-Se sobó la zona, ligeramente adolorido.

-...¡Ah! ¡Lo siento! ¡No quise...! ¡Yo! -Un dedo cubrió sus labios, el rubio le miraba dulcemente.

-...Tranquilo, lo entiendo...-Volvió a tomarlo por la cintura, acercándolo a su pelvis, esta vez sin acercar su pene a su entrada-...Será mejor que continuemos...-Se relamió los labios y juntó su pene con el del contrario, comenzando a masturbarlos a la vez.

Yukio se sonrojó de sobremanera y se mordió los labios, evitando soltar sonido alguno. Sabía que eso solo encantaría más al griego y alimentaría su ego a tal punto que tal vez no le gustaría como terminaría aquello.

Y solo quería que fuera lo suficientemente bueno como para intentarlo de nuevo en otra ocasión y de preferencia en su palacio o en una cómoda cama.

O simplemente en un lugar más cómodo y privado.

Ahí los estarían observando quien sabe quienes.

Kise frunció el ceño y lentamente llevó sus dedos hasta su boca, obligándolo a abrirla y dejar salir sonidos ahogados. Siseó cuando sus dígitos fueron mordidos, y sonrió de lado. Aprovechando la humedad de su saliva y que esta ya había lubricado suficiente sus dedos, los sacó de ahí y los pasó por su abdomen hasta llegar a la entrada a su cuerpo. Yukio se crispó al sentirlo palparlo y rodearlo.

Tragó duro.

-...No calles, quiero oír lo bien que te hago sentir, Yukiocchi...-Sonrió y se inclinó a besar sus labios mientras uno de sus dedos se abría paso en su interior.