DOCTORA XXX MICHIKO DAIMON. MI RIVAL, MI OMEGA, MI AMANTE... OTRA VEZ (Doctor-X)

¿Quién de ustedes fue?

A la mañana siguiente, en el hospital, el doctor Ushio estaba entrando al departamento de cirugía llevando una pila de sobres que apenas le dejaba ver el camino, cuando de repente el doctor Morimoto entró como un bólido por la misma puerta, sin darse cuenta que al pasar tan repentinamente, sorprendió a Ushio y le hizo perder el equilibrio al tratar de evitar que los sobres cayeran al suelo.

Los sobres cayeron, pero él no, el doctor Kitano había aparecido justo en ese momento, sosteniendo al sorprendido doctor Ushio entre sus brazos, inclinado hacia abajo, estilo princesa, quedándose ambos mirándose a la cara, Kitano muy sonriente y Ushio parpadeando como un tonto.

"¡Uy! I caugth you just time!, ¿verdad, doctor Ushio? Se hubiera dado un buen golpe por culpa de ese tonto residente de Morimoto, ¿no?".

"S---si...". Se puso colorado, aquel tipo siempre lo ponía nervioso y no entendía por qué.

Quiso ponerse de pie pero Kitano lo detuvo, inclinándose más sobre él, sonriendo aún más mientras Ushio se ponía más nervioso, parpadeando sin parar detrás de los cristales de sus pequeños anteojos, haciendo la cabeza hacia atrás, tratando de mantener la distancia entre ellos.

"Emmmm... ¿Podría dejarme ir?".

"¿Por qué la prisa? Esta posición me encanta... Usted se ve tan frágil como una princess así...".

"¡Oh!".

Y todo el mundo estalló en risas, haciendo que Ushio se pusiera de pie inmediatamente, empujando muy molesto y avergonzado a Kitano, que también se estaba riendo de él mientras se arreglaba la bata de doctor que siempre llevaba abierta. Kitano solía vestirse muy bien, tanto como Kaji en ese momento.

"¡Oh, vamos! ¿Es que no van a besárse? ¡Hacen una linda pareja!". Se burló Kaji desde su escritorio, y hubo otra explosión de risas.

"¡Uuuuuuuuuuuuuuuuhhhhhh!". Se burlaron todos.

"¡Que se besen! ¡Que se besen!". Insistió el doctor Saionji, comenzando a aplaudir muy entusiasmado. Los demás lo imitaron, poniendo a Ushio muy avergonzado y nervioso y a Kitano muy divertido.

"¿Cuándo van a madurar?". Se quejó el doctor Hiroshi Korogi, un cirujano de 32 años bastante apuesto y muy creído que había perfeccionado sus habilidades en los EEUU y se hacía llamar a si mismo White Jack. Estaba sentado en su escritorio, leyendo una revista en inglés.

"¿Y tú cuándo dejarás de ser tan pesado?". Se quejó Kaji de inmediato mientras aplaudía junto a Saionji y Hara. 

Los escritorios de ambos estaban uno al lado del otro.

Koorogi se alzó de hombros, sin quitar la vista de la revista.

"What it's the problem, doctor Kaji? Algunos de nosotros preferimos comportarnos como verdaderos profesionales".

"Váyase al diablo con su inglés, ¿por qué no me habla en japonés, idiota?. Por lo menos no salgo corriendo como usted cuando surge alguna dificultad".

Koorogi volvió a alzar los hombros, ignorándolo, y Kaji lo asesinó con la mirada mientras fruncía la boca y se cruzaba de brazos, molesto, echándose sobre el respaldar de la silla.

"Idiota presumido...". Murmuró, molesto.

"¡Lo siento! ¡Lo siento!". Se disculpaba Morimoto, inclinándose varias veces, con la mano en la nuca mientras los demás seguían burlándose de Ushio, sintiéndose culpable por el problema en el que había metido a su superior Ushio.

"No se preocupe, doctor Morimoto, hoy casi no hay cirugías y estábamos muy aburridos. Con esto nos entretendremos un poco". Le dijo Ebina, deteniéndose al lado de Kaji, con una taza de café en las manos. Kaji miró la taza y sintió que se le revolvía el estómago al oler el aroma a café.

"¡Oigan! ¡Yo no soy el chiste de nadie!". Se molestó Ushio, dando un zapatazo al suelo, ofendido.

"No, sólo eres mi chiste, doctor Ushio". Remarcó Kitano, pasándole el brazo sobre los hombros, atrayéndolo hacia él mientras Ushio ponía cara de asco, tratando de apartarse, y todo el mundo estalló de nuevo en carcajadas hasta que Michiko entró al departamento de cirugía junto a Hiromi, el doctor Kondo y el doctor Takanori Inomata, de 49 años con su característica cabeza blanca y voz chillona. Todos ellos habían estado haciendo la única cirugía que había que hacer aquel día.

"¡¿Qué diablos sucede aquí?! ¿De qué rayos se ríen?". Se quejó éste último, siempre de mal carácter. "¿Son niños o son doctores? ¡Compórtense, demonios!".

Y sin que le diera tiempo a reaccionar ni que tampoco nadie llegara a contestarle, Kaji se levantó de su asiento de repente y corrió hacia la puerta, tapándose la boca con una mano e hizo a un lado de golpe al doctor Inomata, huyendo por el pasillo rumbo a los sanitarios, blanco como el papel, dejando a todo el mundo muy sorprendido.

"¡Oiga, tonto! ¡Tenga más cuidado! ¡Casi me tira al suelo!". Se quejó Inomata, acomodándose la corbata.

"¿El doctor Kaji estará enfermo?". Se preguntó el doctor Kondo, el cirujano más apuesto del hospital, mirando hacia el pasillo mientras Ushio suspiraba aliviado porque ahora sus compañeros se habían olvidado de él, poniendo su atención sobre Kaji, así que se soltó del doctor Kitano y se agachó para comenzar a alzar los sobres del suelo junto con la ayuda del doctor Morimoto, que se deshacía en disculpas al mismo tiempo.

"No lo sé. ¿A quién le importa?". Contestó Michiko de mala gana, yéndose a los vestidores con paso firme. "Tal vez comió algo que le hizo mal".

"O tal vez se comió una mujer que le hizo mal". Se burló Hiromi, dirigiéndose hacia el escritorio de Michiko.

"¡Es lo más probableeeeeeee!". Comentó Michiko desde el vestuario.

Estaba saliendo de allí, acomodándose la bata de doctor mientras sus compañeros seguían con sus propios asuntos con un Kaji ausente que aún no había regresado de los sanitarios cuando de repente entró una mujer mayor al departamento de cirugía, muy molesta.

"¡Oh! ¡Señora Kaji! ¿Qué hace por aquí? ¿Vino a visitar a su hijo? ¿Y los mellizos? ¿Acaso pasó algo malo?". Quiso saber Hiromi, preocupada, acercándose a ella, pero la madre de Kaji la hizo a un lado de manera muy poco amistosa y asesinó a todo el mundo con la mirada, furiosa, incluyendo a Michiko y a Hiromi.

"¡Muy bien!". Gritó. "¡¿Quién de ustedes fue el gusano que se atrevió a embarazar de nuevo a mi hijo, desgraciados?! ¡¡Lo mataré aquí mismo!!".

"¡¡¡¿¿¿Eeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeehhh???!!!". Exclamaron todos al mismo tiempo, sorprendidísimos, y un tenso silencio lleno de sorpresa y confusión se hizo en todo el departamento de cirugía, con todo el mundo mirando a la madre de Kaji y con ella mirándolos a ellos a la misma vez, dispuesta a destruir al culpable.

"Mierda...". Murmuró Michiko.

Ujujujujujuuuu.... XD A la mierda el secreto de Kaji.