Bitter| myg.✓

veinticuatro

⎯ ¡Love no corras!⎯ le gritó Min a la menor que iba corriendo detrás de unos pajaros.⎯ Ay, ¡Ay se va a caer!⎯ chilló atemorizado viendo como la pequeña rubia tropezó con una piedra pero no llegó a caerse.⎯ ¡Victoria hace algo, te lo suplico!

⎯ Tranquilo, papá luchón.⎯ se burló la mayor entre risas. Ya sabía que su hija era una hiperactiva cuando salía y no iba a cortarle la diversión solo porque YoonGi ahora estaba como un alcón pendiente de su casi hijastra.

Ahora los dos mayores buscaban un lugar cómodo, donde el cálido sol este iluminando, para poder poner una manta y sentarse para relajarse ahí. YoonGi, aunque no estaba del todo de acuerdo de estar bajo el rayo del sol, pues mucho no le gustaba, él solo lo aceptaba por su enamorada.

En lo que te convierte el amor eh.⎯ dijo su subconsciente decepcionado de él mismo.

Min y Predetti iban de la mano, como una pareja oficial, y eso hacia que la idea de YoonGi se refuerce cada vez más, perdiendo el tonto miedo de que pueda ser rechazado, cuando era más que obvio que sus sentimientos eran correspondidos por parte de la rubia.

Aún les quedaba muchísimo por recorrer, y hasta el mismo YoonGi pensaba que capaz estaba siendo muy apurado en querer comenzar una relación formal ahora, siendo que todavía no conoce a la familia de él y habló poco y nada con su segunda familia (bangtan). Pero aún así, no quería perder el tiempo, pues él bien sabía que Victoria era una mujer atractiva ante cualquier hombre, y de solo pensar que podía perder la oportunidad de ser su chico solo por un tonto temor se le revolvía el estómago.

⎯ ¿Quieres aquí?⎯ Victoria apuntó un lugar, había unas cuantas flores, un árbol y pasto bien cuidado, y por supuesto, el sol daba con todo su poder. Min asintió y primero fue ella quien se dirigió, y el menor no pudo evitar suspirar desganado al saber que después tendría las mejillas rosadas por la quemada del sol, eso le pasa por no ponerse protector solar, pero tampoco se le podía culpar, se supone que están en otoño, ¿Por qué el sol da con tanta fuerza en pleno otoño?

Desplazaron una manta en el suelo para después sentarse ellos encima, siempre observando a Love jugar no tan lejos con unas aves y unos niños que se cruzó. No sacaron la comida de su lugar porque, según YoonGi, las hormigas irían a robarles, o los perros de las personas, y si bien era algo tonto Min estaba seguro que eso pasaría.

Victoria solo reía de las tontas ocurrencias de YoonGi y permitió que el mismo ponga su cabeza en el regazo de ella para cerrar los ojos, simulando dormir, pero en realidad escuchaba todo lo que decía la mayor.

El plan de YoonGi funcionaba bien, estaban hablando de lo lindo que estaba el clima y que había sido ideal salir, pero lamentablemente Victoria volvió a hablar del tema de su accidente. El pelinegro sabía que obviamente Predetti no era la culpable, ni siquiera sabía si había uno porque él asume la culpa de que iba hablando por celular mientras manejaba, y en el caso que haya un culpable, era la persona del otro auto, pero no tenía nada que ver con el de Victoria, claramente.

No sabía quién sacó la idea tan descabellada de que ella podía ser la culpable de su accidente, era completamente ilógico. Ahora pasaban tiempo juntos, vivían en la misma casa, le dió su confianza para cuidar a su hija, lo curó, lo cuidó, y por sobre todas las cosas; se gustan. No había chances de que ella sea la culpable de tal accidente, no vivían en una novela de wattpad escrita por una adolescente en la que la protagonista es una espía encubierta buscando matar al famoso cantante. Claro que no.

Había alguien atrás de eso, Min lo sabía, su intuición nunca se equivoca. Pero la única persona que tenía en mente también tenía sus dudas, pues, ¿Para qué iba a querer inculpar a la casi nueva pareja de su ex? ChaeYoung no era alguien vengativa. Además, habían terminado ya hace mes y algo, vamos a suponer que ya dos meses, por lo que si hubiera hecho algo perteneciente a una ex dolida, no estaría esperando tanto tiempo.