Capítulo 25 Los guerreros

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   Justin disfrutaba su viaje en escoba con Heather, sobrevolaban por paisajes únicos y hermosos. Le hacía miles de preguntas a Heather, preguntas que ella respondió sin demora. Por cierto, Heather, era una hermosa chica de grandes ojos color miel, cabello ondulado largo, muy abundante, castaño, piel blanca de labios pequeños, muy ocurrente y regordeta.

_¿Estamos muy altos o ese es un mundo de pequeños?_ Preguntó Justin mientras volaban sobre un pequeña aldea.

_ Son pequeños, las personas más pequeñas del Inframundo, son del tamaño de un ratón, son los Liliputienses.

     De ahí siguen sobrevolando más aldeas, conociendo muchísimas cosas del inframundo, cosas que Justin le encantaba demasiado porque eran cosas realmente mágicas, animales únicos, criaturas inigualables, en cada gota, en cada vista, en cada lugar se veía en grande la magia, era un lugar único que sólo estaba en la imaginación humana, pero aquí era real, todo lo que veía era real.

Mientras tanto, Peter caminaba junto a Úrsula, la nueva ministra, y la Emperatriz por los pasillos del moderno Palacio, iban a la sala de reuniones. El pasillo era mármol blanco y muy iluminado, con flores y orquídeas de colores vivos, las paredes estaban adornadas con cuadros de jardines y frutas, así como paisajes hermosos del Inframundo.

Ellos entran a la sala de reuniones que estaba con 10 mujeres vestidas como ella solían hacerlo típicamente, eran las colaboradoras y manos derecha de la Emperatriz. El salón era blanco con toques rosado como un almendro floreado, las butacas eran madera de cedro, y el podio era perfecto. Las mujeres ya estaban de pie esperando la Emperatriz.

_ Buenos días señoritas... Pueden sentarse. Ya sabrán las noticias, Raquel Chan es la nueva Ministra de Magia, tenemos mucho trabajo que hacer. Alejandra, trae por favor a los guerreros que dije que buscarán_ está sale_ Antes de cumplir con sus misiones ¿te gustaría hacer un recorrido por tu casa materna? quizás sea allí donde vivan mientras estén en el Inframundo. Es una hermosa campiña.

_ Sería interesante mi amor_ Habló Úrsula.

_ El  hacerlo me traería bonitos recuerdos. Podríamos ir después de conocer a los guerreros.

_¡Excelente! El lugar está conservado tal cual como quedó el día de la Gran Guerra_ entra Alejandra acompañada de los guerreros sólo entraron dos mujeres, una elfa y una bruja. Al verlas la Emperatriz se levanta de su butaca y se acerca a las guerreras_ Se las presento. Ella es Dalailu, de las tierras altas de los elfos, es la mejor arquera no sólo de sus tierras, sino de todo el Inframundo.

_ Un placer en conocerlos, sus majestades._ Hace una reverencia. Ella era como todos los Elfos, aunque la diferencia de Dalailu, es que era morena, su cabello era marrón, corto, dejaba ver sus puntiagudas orejas, sus ojos eran color miel hipnotizantes. Normalmente casi todos los elfos son blancos ella no.

_ Y ella es, Elsie, una valiente bruja. Fue criada con los Brujos Ermitaños, así que tiene conocimiento en artes mágicas y bastante poder.

_ Es un honor._ También hace una reverencia. Ella era joven, a diferencia Dalailu que aparentaba 35 años, ella tenía 19 años. Era de piel española, ojos verdes, cabellos amarillos con reflejos dorados liso y largo.

_ Es un placer para mi esposa y para mí, contar con dos personas experimentadas_ Dijo Peter.

_ Y por último un Guerrero que no esperaban y que les alegrará mucho tener aquí... Díganle que pase_ Entra el joven, era nada más y nada menos que el recién convertido Harold Scolli; bueno, no tan recién, llevaba más de 4 años, esto puso muy alegres a Peter y a Úrsula quienes salieron abrazarlo en cuanto lo reconocieron.

_ Nos costó convencerlo de que viniera, pero cuando se enteró de la misión y que sería con ustedes, aceptó de inmediato.

_ Hay muchas razones por la que quiero estar aquí.

_ Tenemos mucho de qué hablar amigo_ Dijo Peter.

_ Bien. Tienen el resto de la tarde para arreglar sus asuntos, prepárense, mañana en la mañana comenzarán con su nuevo trabajo.

    Dalailu y Elsie, salen quizás, a despedirse de sus familiares y amigos, o a prepararse para los retos que vienen. Peter salió junto a Úrsula y a Harold con dirección a su antigua casa en la ciudad de Altagracia, en el pueblo rural de Colonos, este era un pueblo muy pintoresco lleno de verde, de agricultores, apicultores, ovejas y otras criaturas domésticas inframúndicas, entre otros y personas  que trabajaban en el campo.

Se veían en las hermosas laderas sembradíos de maíz, frijoles, hortalizas, tubérculos, frutas como fresa, mora, cerezas, parchita y papayas. Los olores de estos frutos impregnado en el campo. Las Casas eran pocas, separadas tal vez por 500 metros, la gran mayoría con sus propios cultivos. Estas casas básicamente eran de madera o bambú, eran ecológicas y hermosas, muchos mortales soñarían con casas así. La casa donde vivían los fallecidos padres de Peter era de madera, con ventanas panorámicas, no tenían cultivos por la razón de que llevaba décadas sola. Peter y los suyos se bajan del vehículo que le había asignado la Ministra, era una carroza gris con blanco, tirada por unos criaturas fantásticas llamadas Mortivos, parecidos a Elefantes, pero con alas.

Los chicos entran al patio de la casa, suben hasta el corredor, ahí estaba una mecedora, Peter se detiene un momento, ve el lugar, y sus memorias los trasladan hasta su hermosa infancia._ Qué raro me siento. Veo todo muy grande. _ Entraron. Todo estaba igual.

Después de observar el lugar tomaron asiento en la cómoda sala de estar. Peter tenía en sus manos la foto del matrimonio de sus padres.

_ Recuerdo que ese día mamá preparaba galletas, eran las 3 de la tarde, yo estaba allí sentado_ Señala un rincón con la ventana panorámica de fondo, donde había un lugar de estudios_ Estudiaba para los exámenes finales. Papá entró muy agitado por la puerta con varios brujos, le dijo a mamá que estaban atacando al Inframundo, y que nuestros amigos los vampiros se habían aliado con los licántropos, desde ese momento dejé de ser un estudiante adolescente apunto de graduarme, para ser un joven Guerrero. Supimos que la profecía del desequilibrio se cumplía. Salimos a luchar, y más nunca volvimos a este lugar; mi vieja casa hasta el día de hoy.

    Harold hurgaba por la cocina y saca del horno aquellas galletas viejas y duras de muchas décadas.

_ Por lo menos a tu mamá le dio tiempo de apagar el horno_ dijo mostrando las galletas.

_ Casi nunca me has hablado de tus padres_ Habló Úrsula.

_Creo que el estar aquí me motivó hacerlo. Fueron muy buenos padres, como todos, movidos por el amor, la fe, la paciencia, y la dedicación. Siempre me dieron lo mejor a pesar de que teníamos poco, algo que yo no he hecho con mi hijo, algo que no logré con Justin.

_ En estos cinco años que llevamos con nuestro hijo le has dado lo mejor, Peter.

_ Cómo mentirle que tuvo un hermano gemelo...

Vampiros y Brujos. La Profecía Del Equilibrio (Historia Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora