Cazadora de sentimientos

Capítulo 24

Cuando llegó mi papá sentí una felicidad absoluta, nos habíamos visto más temprano y desayunamos juntos, mi mamá y Ana estaban visitando a unas amigas, por la noche los vería a todos, por eso Peter preparó el fuego en la parrilla de mi casa.
-¡Te vas a enfermar!-lo miré con penita porque estaba en el jardín en pleno invierno, lo abracé para trasferirle algo de calor- tuvimos que haber pedido pizza..
-Ya, no pasa nada La-me sonrió y me besó, lo miré con cara de tonta, todavía no me acostumbrada a que él sea tan demostrativo, tan cariñoso.
-Hay algo de lo que no hablamos... De las noticias-hice una pausa- lo de nuestro bebito.. y seguro voy a tener que explicar mi anillo, ¡todavía no se como mamá y Ana no lo registraron!
Peter me hizo una caricia delicada en la cara.
-Podemos hacer lo que quieras, yo estoy con vos en lo que decidas mi amor
"Mi amor", no puede evitar abrir mis ojos como platos, ¿se le había escapado un dicho amoroso? Me llamó amor.. ¿Soy su amor?
Se dio cuenta de que algo me pasaba.
-¿Qué?-elevó sus cejas- ¿no estas de acuerdo con lo que pienso?
No se había dado cuenta... Peter no registró lo que me dijo, mientras mi corazón estaba alterado no pude responderle.
-¿Pasó algo?-me miró extrañado.
-Na... Nada.. Solo no se que hacer-cambié de tema.
El que se le haya escapado de la boca algo tan lindo me hacía sentirme especial, y me ponía muy alegre, porque le salió natural, del alma, fue tan sincero, quería escucharlo otra vez.
Rodeé su cuello con mis brazos y besé su mejilla.
-Bueno, vemos lo que surge-me sonrió y se le achinaron los ojos- pienso seguirte en todo lo que hagas y digas..-apoyó su frente con la mía hasta que sonó el timbre.
No quería separarme de él, pero lo hizo por mi, entró a la casa y le abrió la puerta a mi familia, le sonrieron a Peter y después a mi, a los minutos otras vez sonó el timbre, Ana abrió.
-¡Pedí helado!-ella lo señaló- lo meto en el freezer La
Asentí con la cabeza.
-Hola mi chiquita-papá me besó la frente- estas... estas lisiada pero te veo luminosa, no se como explicarlo
-¡Es el amor!-Ana empezó a joder, la fulminé con la mirada.
-¿Hay novedades?-mi papá elevó sus cejas.
Miré a todos lados buscándolo a Peter para que me salve, pero se había ido a buscar vino, trajo copas.
-Carlos, Majito, Ana, ¿toman tinto?-les ofreció y ellos asintieron, aceptaron una copa cada uno.
-¿Vos no mi amor?-mi mamá me miró extrañada-¡el tinto es tu favorito!
Giré la cabeza como la nena de La llamada y Peter se puso nervioso, sin darse cuenta "metió la pata", me dejó expuesta.
-Yo tampoco voy a tomar, es que tomamos mucho ayer, todavía siento las consecuencias de la resaca-agregó rápidamente, que poco responsable sonó eso.
-Eso-me reí del nerviosismo y Peter nos sirvió a los dos una copa con agua-bueno, ¡salud!-brindamos.

Nos sentamos en la mesa del living, estábamos por ponernos a comer cuando sonó el timbre, me quedé pensativa, ¿ahora qué?
-¡Hola enana!-mi hermano Pato hizo su aparición y nos sonreímos-¡no sabías que iba a cenar con ustedes eh! Llegué hace minutitos, manejando desde allá.. Amo manejar
-¡¡Ay todos son unos boludos! Los amo, amo que hayan caído de la nada-otra vez emoción.
-¿Vas a llorar?-Ana siempre tan observadora- ¿tanto nos extrañaste?
-¡Ustedes no saben lo que es pasar por algo feo y estar lejos de tu familia! Los extrañé... ¡los extrañé mucho! Los primeros días me sentí como esa nena chiquita con la que crecieron.. Quería estar en mi cama de antes y que me malcríen.. me mimen..-todo fue llanto incontrolado- y..-me estaba costando respirar.
-Ey, calmate-Peter acercó su silla a la mía y me dio un abrazo, nos quedamos así por unos momentos-¿entonces yo no te malcrié ni te mimé?-me miró con diversión para levantarme el ánimo.
-¡Sos un tarado!-me reí, él corrió de mi cara las lágrimas que se me habían deslizado por las mejillas.
-Raro-Ana miró a mi hermano Pato, después hicieron lo mismo conmigo, lograron intimidarme.
-Así que la malcriaste...-mi papá no perdió el tiempo, miró a Peter con seriedad.
-Sí... ¿No que sí La?-Peter estaba desesperado, asentí con la cabeza.
-Es buena persona pa, lo sabes... Tiene sus cositas pero..
-Pero estoy aprendiendo poco a poco-Peter completó la oración- y a Lali la quiero.. Siempre la quise.. es una persona maravillosa, ustedes más que nadie lo saben y...
-Están pasando cositas-mamá puso al día a los dos hombres de la familia.
-Cositas-Pato se rió y elevó sus cejas.
-Cositas...-repetí y tomé a Peter de la mano, toda mi familia dirigió su mirada a nuestras manos entrelazadas y ahí estaba... El anillo.. ¡mi anillo!
Fuck.
Peter me soltó y nos miramos entre nosotros, ¿qué podíamos decir?
-Y eso-mi papá me señaló el anillo.
-Eso...-me reí- nosotros estamos.. Estamos juntos, con Peter, estamos juntos
-¡Eso es algo obvio! Pero.. ¿Qué onda tu anillo de compromiso?-Ana estaba gozando el interrogarme como una detective a la que tiene en la mira a un sospechoso y le va a sacar la máscara.
-Yo le pedí a Lali que se case conmigo, fue algo que pensé, que sentí, algo que me hace mucha ilusión, ¡me hizo muy feliz cuando aceptó!-me tomó por la barbilla para hablarme- me hiciste muy feliz, ¿lo sabías? Muy muy feliz... muy..
-Que melosidad-mi mamá se burló de nosotros- entonces van a casarse, ¿cuando?
-No planificamos eso todavía-Peter me tomó nuevamente de la mano- por ahora celebremos el que ustedes nuevamente están en familia y esta noticia
-¡Vos también sos familia! En realidad desde siempre-Pato agregó y le guiñó un ojo, se rieron, ¡que alivio que siempre se llevaron bien!
-Entonces otro brindis, deseo que todos mis hijos, mi mujer y vos Peter-mi papá levantó su copa- sean felices... Que aprendan a escucharse y siempre haya diálogo, respeto.. y amor
Mi papá le sonrió y supe que Peter tenía su "bendición", eso me hizo sentir mucha carga energética, pero de la buena, a lo largo de toda la noche sonreí y me reí mucho, cuando ellos se fueron me recosté en mi cama.
-Pit-lo llamé, él salió de la ducha porque se le había quedado impregnado el olor a humo de la parrilla- gracias por hoy... por la cena.. por haber enfrentado a mis papás, sé que son intimidantes..
Soltó una carcajada y me miró divertido, con sus cejas elevadas.
-Los conozco de una vida entera... Solo que ahora van a tenerme más vigilado porque me quedé con el máximo tesoro de sus vidas
Mis lágrimas me amenazaron y lo abracé fuertemente cuando se metió a la cama, escondí mi cara en tu cuello.
-No podes decirme estas cosas... Ahora que lo pienso nunca me prepare lo suficiente para que tus palabras bonitas sean reales.. Peter..-tomé su cara entre mis manos- creo que no estas siendo consciente de que para mi todo esto no es para nada poca cosa, por favor si no te pasan cosas intensas como me pasan a mi prefiero que me lo digas ahora así ponemos cierta distancia, no quiero llevarme una decepción yo
Sus labios se apoyaron sobre los míos, me besó con desesperación y eso le puso punto final a nuestra conversación.
Minutos pasaron pero para mi fueron segundos, mi respiración quedó agitada.
-No seas boluda Lali-sus ojos me penetraron- yo... Vos... me haces sentir tanto... y yo también tengo miedo, porque nunca me pasó esto... sentir cosas tan intensas, y ser consciente da miedo.. porque no quiero que nada malo te pase, que nada malo nos pase mi amor
Otra vez lo dijo, mis ojos se llenaron de lágrimas.
-Antes de que llegue mi familia me llamaste como ahora, y me encantó.. Por eso no pude responderte con claridad-le sonreí y él me devolvió la sonrisa-¿eso soy para vos Pit?
-¡¿Sos joda?!-rozó su nariz con la mía- sos mi amor Lali, te amo
Shock, entré en shock, del nerviosismo me puse a temblar, Peter me llenó la cara de besos.
-Yo también Peter, yo también te amo-se lo susurré vergonzosa.
Quedarme pegada a su cuerpo me pareció una linda manera para "coronar" la noche, estaba en mi lugar con la persona que siempre amé y ahora me confesó que también me ama.