Capítulo 19

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Me hicieron varios estudios y me quedé dormida en una de las sillas de la clínica esperando los resultados, cuando abrí mis ojos me di cuenta de que tenía todo el cuerpo duro, estaba muy incómoda.
-¿Ya están los resultados?-pregunté y vi a Peter que tenía varios sobres en mano-¿los revistaste?
Él negó con la cabeza.
-Tengo miedo de que tengas algo malo..-me miró preocupado- prefiero enterarme cuando te revisen en unos minutos
-¡Pero yo necesito saber que tengo! ¡Sabes que en ocasiones soy ansiosa!-le saqué los sobres de su mano y justo un médico me llamó, me puse de pie mientras me sentía frágil.
-Y bueno-me senté en la camilla mientras el médico revisaba mis valores.
-Todo esta bien, el bebé esta bien, ¿ya lo sabias?-él hombre elevó sus cejas y negué con la cabeza entrando en shock.
Había una probabilidad de que eso haya pasado, de haber concebido un hijo, pero esa probabilidad ya no era una probabilidad, ahora era una certeza, era real, mis ojos se cristalizaron por la sensibilidad, no sabía si estar enojada, feliz, tenía muchos sentimientos encontrados.
Peter también estaba estático.
-¿Qué?-repitió tratando de procesar lo que había dicho el médico.
-Que Mariana está embarazada, felicidades mami-el médico me regaló una sonrisa y le sonreí nerviosa.
No presté atención a todas las indicaciones que me dieron para cuidarme, menos mal que me habían anotado todo.
Cuando salí de la clínica y caminé hasta el auto las piernas me temblaron, claramente no me quedaba nada en el estómago.
-Lo mejor es que coma Peter-lo saqué de sus pensamientos, él asintió y manejó hasta una cafetería cercana a su departamento.
Pedí un poco de todo, tostadas, huevos revueltos con palta, granola con yogur, jugo de naranja y té, Peter se quedó mirando todo el despliegue que había en la mesa, empecé a comer sin culpa.
-Es culpa mía...-Peter finalmente habló- ¡y yo que te juraba que nunca en mi vida había cometido un error! Primero Julián y ahora..
Lo fulminé con la mirada, no me cayeron nada bien sus palabras.
-¡No quise decir eso! Sabes a que me refiero La...-tomó aire y soltó un suspiro-¡para mi también esto es mucho! Recién me estaba haciendo a la idea de ser papá y...-no pudo seguir- evidentemente soy irresponsable, ¡espero no seguir encontrándome con nuevos hijos a los que nunca conocí! Siempre creí que había hecho todo bien...
-Todo bien...-no dejé de mirarlo y elevé mis cejas, asentí con la cabeza- todo mal hiciste, ¡pero tampoco tenes toda la culpa! Yo últimamente no estaba tomando mis pastillas anticonceptivas porque ya tenía que tomar muchos medicamentos, si bien sé que lo que vaya a hacer yo es decisión mía no quiero perderme de ver como puede llegar a ser...-se me llenaron los ojos de lágrimas y apoyé mi mano en mi panza- estoy embarazada-lo dije en voz alta y eso cobró otro sentido.
Peter me miraba en silencio, se puso de pie, dejó su silla al lado mío y me abrazó fuertemente, me aferré a él como un koala, se me iban cayendo lágrimas de los ojos, sentía una incertidumbre terrible.
-No.. No quise reaccionar como lo hice La..-Peter me hizo una caricia en la cara- también todo esto es mucho para mi y... Sé que vos estas muy sensible, y seguramente ahora vas a estarlo más..-elevó sus cejas- y voy a tratar de no seguir dándote disgustos.. No puedo prometértelo, pero puedo intentarlo-chocó su frente con la mía y cerré mis ojos, me aparté cuando mi teléfono empezó a sonar.
-Hola Santiago-lo saludé atendiéndolo- ajam... Sí, entonces te enteraste.. No... No lo sabe... Lo mejor es que no lo sepa.. Sí, puedo verte más a la tardecita, ajám, quedamos así, ¡nos vemos'
Levanté mi cara y Peter estaba serio, estático.
-¿Quién no sabe qué?-elevó sus cejas- ¿pensas salir con él habiendo no dormido bien en toda la noche? ¡Te tenes que cuidar Lali!
-No es un asunto tuyo, es algo que tenemos que hablar él y yo, y si te preocupa el que no dormí bien ahora cuando volvamos a tu departamento duermo
No sé porque me salió ser tan dura con él, Peter dejó de hacerme preguntas y me habló lo justo y necesario, volvimos y fui directo a dormir, cuando mi alarma sonó era la hora, me cambié y me arreglé la cara con maquillaje, la realidad era que todavía tenía sueño, pero como en ocasiones soy orgullosa no pienso cancelar mi salida.
-Hola-Santiago me saludó, había venido hasta el departamento para verme y que yo no tuviera que moverme- traje dos cafés, son Colombianos, los granos de café de allá son de los mejores...
-Ayyy-quise morirme- no estuve tomando café hoy, perdón, pero sigo sensible de la panza..
-¡Claro! ¡Cómo no lo pensé antes!-Santiago soltó un suspiro enojado con si mismo- vos.. ¿Te sentís un poco mejor Lali?
Me quedé pensativa, terminé asintiendo con la cabeza.
-Sí, descansar me hizo muy bien-asentí con la cabeza y le sonreí.
-Entonces... ¿Felicidades?-Santiago dudó- en estos casos nunca sé que decir, porque no sé si la persona quiere tenerlo o... Trato de ser respetuoso a las desiciones de los demás, vos.. ¿Tenes pareja?
-No sé si es una felicidad, pero sí una sorpresa-me sinceré- y no, no tengo pareja, ya lo hablamos antes
-¿Entonces el papá no sabe de tu embarazo? ¿No se llevan bien?
¡¿Qué tanto le interesaba mi vida privada?! La culpa era mía, yo le había permitido saber de mis cosas.
-No diría que no nos llevamos bien solo... Quiero cambiar de página, esto nos va a tener unidos de por vida, pero no tiene porque ser desde un vínculo romántico o de pareja..
-¿Me estas queriendo decir que tal vez en unas semanas, meses o días voy a poder invitarte a salir?
Santiago fue demasiado directo.
Negué con la cabeza.
-Me estas mal interpretando, ahora mismo siento que ni puedo pensar en eso.. Nosotros podemos salir.. Pero como amigos
Nunca creí que llegaría el día en el que yo misma mandaría a otra persona a la friendzone, se que es un lugar horrible, pero ahora no estoy de humor para pensar en un otro de manera amorosa, quiero enfocarme en mi actualidad.
-Todo bien Lali, tal vez más adelante..-Santiago volvió a insistir y me reí nerviosa.
Estaba tomando mi segunda taza de té cuando escuché el sonido de la puerta abrirse, suspiré aliviada porque llegó Peter, no había podido sacarme a Santiago de encima, ambos se miraron a los ojos firmemente.
-¿Viniste a ver su pie?-Peter se rió con ironía, ¿podía estar celoso?
-Solo vine en modo..
Lo interrumpí.
-Amigo, modo amistoso-miré a Peter y después le sonreí a Santiago al borde de un ataque nervioso.
-Si es de manera amistosa seguro es de una manera muy intima, los amigo se dan entre ellos también... tienen sus deslices..-Peter elevó sus cejas, ¡¿como se atrevía?! 
¡¿Había dicho lo que había dicho?!
-Ya veo lo que está pasando acá-Santiago no era ningún boludo, volteó para mirarme a mi-¿no era que el papá de tu bebé no sabía nada de tu bebé?
Tragame tierra, entrecerré mis ojos y sentí presión en mi brazo, no era de una manera fuerte, solo molesta.
-¡¿Qué?!-Peter elevó sus cejas mirándome serio, estaba molesto, se le había fruncido el ceño.
-Mejor me voy, nos vemos en la próxima consulta Lali, cualquier cosa tenes mi número-Santiago me besó en la mejilla y se escapó como un cobarde, me dejó a solas con un Peter que no dejaba de mirarme con intensidad, quién perdió la batalla fui yo, pestañeé.
-Hablamos de...-tomé aire y solté un suspiro- como me sentía, y bueno...
-Mentiste-adivinó-¡¿porqué?!
Sus ojos se cristalizaron y eso me resultó muy extraña, era como si hubiese tocado una fibra delicada de su interior.
-Quería... Solo quería que una persona me viera como la mujer independiente que solía ser antes de este accidente-me señalé el pie- que puede llevar adelante la mayoría de las cosas sola, y que puede crecer sin necesidad de estar atada a un interés amoroso, puedo sola Peter.. Puedo con esto sola, siempre pude sola, ¿ahora me vas a decir que pensas estar conmigo? Yo fui siempre quién estuvo para vos, vos no sabes estar para nadie más que tu círculo de nuevas personas superficiales
No entendí porque me agarró un arranque de furia, tal vez porque había muchas cosas que le había querido decir por mucho tiempo.
-Sé que sos una persona independiente, que podrías con todo sola, porque sos inteligente , muy inteligente, capaz... y sé que no necesitas de una persona que te haga promesas color rosa, y sé que te fallé millones de veces... Pero te lo dije.. Pienso hacer todo lo posible para por lo menos fallarte menos-suspiró- sí, fui ciego, estaba tan acostumbrado a que siempre estes que nunca... Nunca lo valoré... Y.. Podes estar enojada todo lo que quieras conmigo, ¡los dos sabemos que lo merezco! Pero... No me prohibas el estar cerca de nuestro bebé La..
Me miró suplicante.
Cada una de sus palabras me pegaron cachetadas en la cara, mi cabeza era un desastre, de todo lo que me había dicho la única parte que retuve fue la siguiente: "nuestro bebé".

Cazadora de sentimientosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora