-Bueno La, cuidate mucho mucho-mi hermana Ana me miró y esbozó una pequeña sonrisa- ¡no puedo creer que vayas a casarte!
-Yo tampoco..-forcé una sonrisa, después siguió mi mamá.
-Te amo mucho hija, cuidate, la próxima vez que nos veamos seguramente vas a estar caminando-ella elevó sus cejas y asintió con la cabeza, besó mi mejilla y me guiñó un ojo.
-Bueno mi princesa menor, voy a extrañarte-mi papá no me quería soltar.
-¡Ya voy a ir a visitarlos!-se los prometí.
-¡Te tomamos la palabra!-mi hermano Pato me sonrió después de besar mi frente- ¡mandale saludos de mi parte!
-¡De parte de todos!-mi mamá me saludó con la mano y se fueron, cuando me quedé sola solté un suspiro.
Eran las dos del mediodía pero igualmente fui en busca de helado de chocolate, agarré una cuchara y comí mientras no podía evitar el sentirme triste, Peter... ¿Donde se había metido? Desde que empezó el día no supe nada de él, no me llamó, no me mandó un mensaje, nada, y después pretende que crea que está intentando hacer todo lo mejor que puede, que le importo, que piensa hacerse tiempo para pasar conmigo... ¿donde está ahora mismo?
Solté la cuchara y devolví el helado al freezer, no tenía que comer como comida un postre, así que me prepare una tortilla de papas y una ensalada.
-Hola-Peter hizo acto de presencia, tenía una cara indescifrable, me saludó con la mano antes de sacarse abrigo por abrigo-hace mucho frío afuera, si salís es mejor que te pongas mucha mucho ropa
-Cómo si pudiera irme a caminar sola como si nada-sí, ironía, ni yo estaba tolerándome a mi misma.
-¿Vas a comer solo eso? ¿No te da un poco de frío? Puedo preparar sopa-cambió de tema- le pregunto la receta a mi mamá de la de ella, ¿te acordás?-agarró su teléfono celular y mandó un audio que grabó- hola ma, ¿como va todo? Necesito un favor, que me pases la receta de tu sopa mágica para combatir el frío
-No hace falta nada de eso, ya me preparé algo...-tomé aire y busqué su mirada, noté que estaba evadiendo el mirarme directamente a los ojos- ¿vas a seguir ignorándome?
Peter negó con la cabeza y caminó hacia mi, me abrazó fuerte, no sabía si ceder o no, ¿podía confiar? Ya me cansé de ilusionarme y salir perdiendo.
-Vení-me tomó de la mano, ¿porque quería que me subiera a un ascensor? Bajamos hasta la cochera y ahí estaba su auto-¿vas a llevarme a dar una vuelta? Yo solo quería hablar con vos Peter, ¡necesitamos comunicarnos! Vamos a ser papás, bueno vos los sos, a lo que voy es que ya somos adultos, desde hace bastante, y nunca nos comportamos así..
-Y soy peor que vos en eso, lo sé-suspiró- esto es lo que estuve haciendo desde que me desperté..-abrió el baúl, ahí había una caja de cartón, la abrí, había un gatito atigrado con ojos miel, era cachorro, sonreí, lo sostuve entre mis manos y lloraba-lo busqué en un refugio de esos que rescatan animales, en realidad al principio me contacté con varios, pero por lo general te evalúan mucho antes de darte uno .. Y bueno, confiaron en mi, les conté que a mi mujer siempre le hizo ilusión adoptar un gatito pero nunca pudo... Hasta ahora, ¿lo queres La? Sé que cada vez tenemos más responsabilidades, y esta es una más pero sé que toda la vida quisiste un compañerito animal-esbozó una pequeña sonrisa- mi amor estoy dispuesto a todo con vos... yo..-noté que estaba pensando muy bien que palabras usar- te amo La... Y cuando te lo dije fui sincero.. te amo Mariana-no dejó de sonreírme- me importas, mucho me importas, sos la mujer de mi vida, y perdón si te hice tanto daño que crees que puedo arrepentirme de lo nuestro y alejarme, pero no pienso hacerlo.. Sos la persona que siempre estuvo para mi, y yo quiero siempre estar para vos..-me hizo una caricia en la cara, el gato quería bajarse de mis brazos, lo dejé en la cajita- acepto cada cosa que quieras que le deje en claro a cualquier persona, no quiero que desconfíes de mi y no creas en nosotros.. No dormí bien toda la noche, me quedé pensando qué podía darte, como podía hacer para que sientas que sí estoy comprometido con vos.. con enfrentar este nuevo camino juntos
Mis ojos se llenaron de lágrimas y me sentí una tonta, me puse a llorar y él rodeó mi cintura con sus brazos, me acercó a su cuerpo con toda la delicadeza del mundo.
-Perdón por haberme puesto así...
-No La, perdón a mi, por todo... No estoy orgulloso de mi pasado, pero sí quiero poder estar orgulloso de mi presente y mi futuro, quiero estar orgulloso cuando nuestro bebito me llame papá, ahí me voy a dar cuenta de que por lo menos hice algo bien
-Yo... No quise que te sintieras así Pit..-quise matarme.
-¿Sabes? Todo lo de Natalie, lo de tu cirujano y lo que pasó en el último tiempo me hizo "despertarme" por las malas, me di cuenta de que no quiero hacerte sentir mal, nunca más, y no te preocupes por mi, solo es mi karma, no llores mi amor-me sonrió nuevamente queriendo levantarme el ánimo, rozó su nariz con la mía, recién ahí me reí- te amo, te amo mucho
Creí que iba a dejar de llorar pero no pude hacerlo, estaba emocionada, ¡sí!, estaba ocurriendo, Peter Lanzani, mi mejor amigo me había confesado todo lo que este último tiempo se le cruzo por la cabeza, me hizo el regalo que siempre soñé, y me declaró su amor, siempre quise escucharlo, y ahora... No puedo evitar derretirme de la ternura y el amor.
Rodeé su cuello con mis brazos y lo besé, sonreí sobre su boca y él volvió a besarme con más pasión, nos sonreímos con tontos y escuchamos un llanto, era mi gatito, nuestro gatito.
-Hola Michi Michi-lo cargué nuevamente y el gato me observó desconfiado.
-¿Michi?-Peter se rió.
-¿Es hembra o macho?
-Macho, así que creo que Michi le sienta bien
Asentí con la cabeza feliz, besé la cabecita de Michi.
Peter tenía varias bolsas y una caja, le había comprado juguetes, una camita, de todo para que se entretenga, subimos por el ascensor y al llegar al departamento dejé al cachorro en el suelo, curioso se puso a inspeccionar, de un momento a otro lo perdí de vista.
-¡¿Donde está Peter?!-me sobresalté, él se puso a buscarlo.
-Ey, no asustes a tu mamá-chasqueó los dedos de su mano y Michi se acerco, estaba abajo del estante de los libros- vas a comportarte, ¿ok? No le des dolores de cabeza, para eso me tuvo a mi causándole eso por años-bromeó y levantó su mirada, Peter elevó sus cejas y no pude tomarlo con seriedad- vení vamos a hacernos mimitos en familia-cargó al gato y se sentó en el sillón a mi lado, me lo apoyó sobre mis piernas y el animal se acurrucó pegado a mi panza, se quedó dormido.
-Sos perceptivos, ¿no?
-Sí, los animales lo son-Peter asintió y me hizo una caricia en la cara-¿te gustó mi sorpresa?
-Obvio-le dejé varios besos en una de sus mejillas, después tomé aire y solté un suspiro- yo.. yo también quiero que lo nuestro funcione, sé que es un desafío, que hay que organizarnos mucho, estar atentos, estar en todo, aprender a escucharnos.. Quiero poder dejar de dudar, ser tan miedosa.. Ahora no estás dándome motivos y me molesta eso, me hace que me sienta una idiota, porque realmente soy mi propia enemiga, mi cabeza, y estoy sensible, pero eso no tiene nada que ver con lo que estoy hablando, yo...
Y me quebré, Peter me besó pausadamente la frente, con toda la delicadeza y el cuidado del mundo.
-Mi amor-elevó sus cejas y nuestras miradas se conectaron- ¿estas sensible? Sí, ¿esta mal? No.. Estas embarazada La, y pasaste por muchas emociones juntas, quiero poco a poco sacarte esos miedos... Quiero que te sientas en paz conmigo, con esta vida en conjunto en la que estamos apostando..-dejó pequeños besitos en mis labios y me sonrió- ¿te dije que te amo hoy?
-¡Tarado! ¡¿Vos queres que siga llorando?!-me molesté sin dejar de lagrimear-y con lo de la paz... Sé que al tenerte en mi vida eso es algo jodido, no siempre vamos a tener paz pero quiero esos momentitos, como ahora
Él asintió con la cabeza.
-Todos los días guardémonos por lo menos un tiempito para los dos solitos, ¿te parece bien?
Le sonreí y lo besé.
-Sí... y Pit-lo llamé y capté toda su atención- te amo-volví a ponerme emocional, él agarró mi cara entre sus manos y me besó desesperadamente, empezó a faltarme el aire, por eso me separé un poco, solo para respirar mejor.
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Cazadora de sentimientos
FanfictionLali siempre odió ser débil, sobretodo si de Juan Pedro se trataba, nunca pudo decirle "no", por eso muchas veces salió lastimada (claramente él nunca lo supo), siempre tuvo sentimientos fuertes, pero se conformó con ser su amiga, su confidente, la...