38 semanas después...
Lo logré, termine la secundaria, y ahora tengo un embarazo de nueve meses, todavía nadie puede creerlo, al principio varias personas reaccionaron muy mal, pero ahora ya están más que acostumbrados, hoy tenemos la fiesta de revelación de género, estamos ansiosos, y a mí me consumen los nervios.
-Gorda apúrate que ya está todo listo me avisó tu hermana. -mi hermana... Diana, se está acordando de muchas cosas, pero su mente no está muy clara todavía.
-Ya termino Tomás... Ayúdame a calzarme no llego. -mi panza está bastante grande, demasiado, mi bebe es muy grande por lo visto. Tomi sabe todo lo de los controles, y sobre las ecografías, hasta ahora a mí me ocultan para que me enteré todo hoy en la revelación de género y Baby shower, de todas formas tampoco quiero saber así es una sorpresa, pero me mata la ansiedad, lo noto a Tomi ansioso, el tampoco sabe el género de nuestro hijo, solo sabe el peso y como va, que por lo visto va muy bien.
(...)
Llegamos e hicimos apuestas, todos nos pusimos chupetes chiquitos de collar con el género que pensábamos que tenía el bebé, yo me puse uno celeste, Tomi se puso dos, uno celeste y otro rosa, a lo que me empecé a reír, el cree que son dos. La mayoría eligió nene, y algunos nena.
-¿Estan listos? -nos pregunto Avril, y asentimos.- bueno agarren una bengala cada uno. -hicimos caso y nos pusimos en nuestras posiciones mientras todos hacían cuenta regresiva. Las bengalas empezaron a largar humo, y seguido humo de color, mi bengala tenía color rosa y la de Tomi color azul, lo mire extraña.
-Son dos amor -me dijo besándome, me emocioné demasiado, tenía Miles de camaras a mi al rededor, sacándonos fotos, y todos muy emocionados por la noticia, no podía explicar mi felicidad, mi emoción.
-Al principio no estaba de acuerdo, pero ahora estoy más que seguro que vas a ser una gran madre hija, te amo y quiero lo mejor para los cuatro. -me dijo mi papá besando mi frente, haciendo que llore.
(...)
Pasamos muy bien la tarde, estuvo todo muy lindo, pero yo ya estaba muy cansada, necesitaba dormir y descansar mi espalda, no es fácil llevar dos criaturas en el cuerpo.
-Compre algo para nuestro príncipe y princesa. -me dijo Tomi apareciendo en el cuarto.
-A ver. -dije sonriendo y sentandome en la cama. Me estiró dos bolsas, dos ajuares color blanco con dibujitos. Otra cosa más para nuestros bebés.
-Mañana vamos a comprar otra cuna más, y fíjate un carrito doble que te guste, porque no falta nada amor. -me dijo acostando su cabeza en mi panza y abrazándola.
(...)
Nos despertamos, a la mañana, mientras miraba mis una serie hacíamos fiaca. Hoy entraba a las 39 semanas, la panza me iba a explotar en cualquier momento y tenía más antojos que nunca.
-Uy... Tengo ganas de comer papas fritas.
-Gorda son las ocho de la mañana. -le puse carita triste y se levantó a comprarme papas fritas, tardó un montón así que supuse que se recorrió todo para buscar las papas. Hasta que llegó, con mis papás y dos bolsas más.- te traje papas, facturas, tu yogurt, cereal de almohaditas, frutos secos, y jugo de naranja, sonreí y fue a prepararme todo.
Había aumentado de peso, pero de todas formas comía sin culpa alguna.-Tenemos visitas -dijo Tomi dejando entrar a el padrino de uno de nuestros hijos, a Lucas.
-Meroo -le dije abrazándolo, el nos había echo mucha compañía estos meses, y estaba más que orgullosa de que Lucas sea el padrino de alguno de mis hijos.