22. Vínculos

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Estaba lista para mi gran día. Cada uno de mis sirvientes me ayudaron a prepararme.

Mi vestido negro me hacía lucir majestuosa, varias joyas de oro blanco adornaban mi cuello, la capa roja que me coloco Alyssa me dio el toque para verme como toda una Reina.

-Princesa ya esta todo listo, me informan que el Príncipe Raziel y la Princesa Elea ya llegaron.

-Aquí comienza todo, es momento de vengar la muerte de Uzza.

Baje las escaleras al gran Salón donde se llevará acabo mi coronación, los funcionarios más importantes de nuestro Reino se encontraban a la derecha de mi trono.

Camine lentamente hacia mí lugar, con la mirada ubique al Príncipe Raziel el cual admito se ve bastante guapo, con traje en color blanco, resaltaba entre la multitud, sus penetrantes ojos azules se clavaron en mi.

Era obvio que apesar de estar molesto conmigo aún anelaba mi compañía, el efecto de unión de almas es muy poderoso, hasta yo me siento vulnerable por dicho vehículo.

-Alteza llego él momento. Dijo mi hermano viéndome directamente a los ojos.

Hay un ritual que todos los demonios supremos debemos aprobar para ser oficialmente coronados Rey o Reina.

Nuestro guerrero más fuerte debe enfrentarse a un duelo conmigo poniendo a prueba mis habilidades mágicas. Ambos pasamos al centro del gran salón, para no afectar a los espectadores un escudo mágico nos rodeó.

-Alteza será un honor pelear con usted.

-Lo mismo digo Nabam.

Nabam es uno de los guerreros más fuertes de nuestro Reino, es un demonio nivel 2 hermano gemelo de Alyssa, es idéntico a ella, mismo cabello rojizo y piel bronceada. Es un digno oponente.

Nabam es renociodo por su gran fuerza en un dos por tres me atacó sin previo aviso, pero yo soy mucho más ágil y esquive cada uno de sus golpes. Utilice un par de hechizos y lo derribe en un dos por tres.

-Alteza su poder es increíble.

-Lo sé, ¿Acaso ya te vas a rendir?.

-Claro que no Alteza.

Enseguida Nabam lanzó un hechizo de truenos para derribarme pero con un simple movimiento de mano desvíe el ataque, para finalizar le lancé una ráfaga de fuego azul y quedó lastimado en el suelo. Con ello logré vencerlo sin esfuerzo.

-Alteza felicidades.

-Gracias Nabam, ahora ve a descansar.

Mi hermano se acercó a mí -Esta más que claro que tus poderes son superiores, ahora acompáñame al trono para que el hechicero Guta haga la ceremonia oficial.

Guta es un demonio nivel 1, es un miembro de nuestro consejo, uno de los asesores que estará a mi lado para gobernar.

Me senté en mi nuevo trono y Guta se acercó a mi con la corona entre sus manos.

-En nombre de las leyes de las tinieblas, Lilith Hiems es oficialmente la nueva Reina del Inframundo. Que Lucifer la guíe en su camino y le brinde el poder para gobernar este Mundo.

Guta coloco la corona en mi cabeza y me dio a beber un licor con el cual hago mi juramento de lealtad.

-Yo Lilith Hiems juro ante todos los presentes que seré una Reina digna de admiración y protegeré a cada demonio de este Reino.

Hice una señal de brindis y bebí cada gota del licor del frasco, el sabor es delicioso.

Todos los presentes aplaudieron a excepción del los ángeles aunque era obvio, solo están presentes con la finalidad de demostrar que aún seguimos sus reglas. Eso me enfurecia pero ahora debía manterne la calma y disfrutar el momento.

Un gran banquete se celebró para todo el Reino, comida, alcohol y baile era lo que predominaba en el ambiente. Los ángeles se aburrieron y se fueron a sus habitaciones reservadas para su llegada.

Llego el momento de comenzar mi plan, me levante de mi asiento, me dirigí a la habitación del Príncipe.

Toque a la puerta.

-Adelante.

-Príncipe que alegría verlo.

-Reina Lilith no puedo decir lo mismo de mi parte.

-Raziel no puedes seguir enojado conmigo, solo fue una pequeña travesura haber cruzado el Cielo. Nunca tuve malas intenciones, solo quería conocer tu Reino.

-¿Pequeña travesura? Crees que soy ingenuo es lógico que algo tramas, ya no voy a caer más en tu juego.

Me acercó cada vez más a él, debo hacerlo perder el control, él Príncipe tiene que adorarme y arrodillarse ante mi.

-Como Reina del Infierno solo quiero llegar a un acuerdo contigo. No deseo una guerra entre ambos Mundos. Tu y yo sabemos que si eso sucede sería nuestro fin. Entonces la mejor opción es llevar la fiesta en paz, ¿No te parece?.

-Si es verdad lo que dices, demuéstralo.

-¿Cómo?.

-Dime que debo hacer para romper el vínculo que existe entre tu y yo.

-Lo habia olvidado, gracias a que te salve la vida ahora estas unido a mi. Pero tranquilo hay una solución, solo necesito el Cetro de Abalám para romper dicho vehículo, eso es todo.

-¿Cetro de Abalám? Tengo entendido que esta destruido.

-No creo Alteza, estoy segura que ese Cetro aun existe.

-Me estas engañando, es lógico que es una trampa.

-Príncipe no miento, cree que romper este vínculo sería tan fácil como beber una simple pócima, le recuerdo que bebió sangre de un demonio Supremo. La única forma es utilizar el Cetro de Abalám.

-No confío en ti Lilith.

-Usted toma la última decisión, por mi parte no hay ninguna prisa por romper esta unión. A mi me gusta estar a su lado, sentir su calor.

Ya estaba lo suficientemente cerca del Príncipe, se ve que luchaba internamente por alejarse de mí, pero su cuerpo no le respondía, lo tomé del cuello y lo besé. Intento recharsame pero ahora yo tengo la suficiente fuerza para no dejarlo ir.

Profundice el beso, ya había caído en mis redes, justo lo que queria.

De repente se escucho como asotan la puerta de la habitación, el Príncipe reacciono alejándose por completo de mí. Elea se veía furiosa viendo como el amor de su vida se besa con otra.

Alyssa se encontraba a su lado -Reina intenté detenerla pero no hizo caso a mis indicaciones.

-No pasa nada Alyssa puedes retirarte.

-Muy bien Alteza.


Un Amor Hecho Pedazos (Angeles Y Demonios)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora