27. Problemas

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Reino de las Tinieblas.

Mi hermana Lilith no ha regresado del Mundo Mortal, le prometí ir a buscarla si en dos días no volvía.

Me dirigí con Alyssa -Tengo un mal presentimiento, no siento la energía de Lilith, es urgente ir por ella.

-Estoy lista Alteza.

Abrí el portal el cual me daría acceso al Mundo Humano cuando uno de los guardias me infomo que el Rey Celestial se encontraba en el Inframundo.

-Alteza el Rey Adriel solicita verlo.

Inmediatamente me dirigí a buscar al Rey, algo malo estaba pasando, sino él jamás hubiera venido a verme.

-Rey Adriel, me sorprende su visita.

-Zagan hay graves problemas.

-¿Qué ocurre?.

-Raziel encontró el Escudo Mortalis en el Reino Humano e hizo uso de él.

-¿Qué? Estoy confundido.

-Ahora Lilith y Raziel son simples mortales.

-¡Imposible!.

-Ya fui a confirmar esta información con mis propios ojos.

-Lilith acaba de ascender al trono, no puede ser una siemple humana.

-Zagan existe una solución para contrarrestar los efectos del Escudo. Es algo extremo pero es la única salida.

-Por favor hable Rey Adriel.

-Tanto Raziel como Lilith deben tener una muerte trágica en el Reino Humano. Entre más sufran en la Tierra mayor es la posibilidad de recuperar sus antiguos poderes.

-¿Es la única opción?.

-Si, aunque no es seguro qué funcione del todo.

-Deberia haber otra mejor alternativa.

-Lo siento Zagan pero el Escudo Mortalis es muy poderoso, no existe otra forma, debemos intentarlo.

No había opción, Lilith debe enfrentarse a los sufrimientos del Reino Humano, Alyssa se encargará de cuidarla de cerca, aunque tiene prohibido interferir, por mucho que la vea sufri debe manter su distancia.

Raziel.

La culpa me dominaba, soy un ángel como puede invoclarme con un demonio, pero esto va más allá del vínculo que existe entre Lilith y yo. Debo aceptar que me enamore de ella, ante Lilith mi fuerza de voluntad es nula, solo deseo estar a su lado.

Una voz comenzó a llamarme -Príncipe Raziel, yo puedo ayudarte.

Gire en todas direcciones y no había nadie cerca de mí -Raziel te estoy esperando, ven a mí.

-¿Dónde puedo encontrarte?.

-Dirígete a la cascada que esta hacia el norte, yo puedo cumplir tus más intimos deseos.

-No creo.

-Es verdad, tu y Lilith puede estar juntos, existe una forma.

Es imposible que Lilith y yo podamos estar juntos, pero aun así decidí seguir la voz.

-¿Quién eres?.

-Soy la reliquia más importante de este Mundo, te ofrezco la oportunidad de vivir como un simple humano, será una vida sencilla pero feliz, sin obligaciones tontas que solo te causan desdicha.

-Acaso te refieres al Escudo Mortalis.

-Eres inteligente Raziel, ya casi llegas a mi, utiliza este beneficio que te ofrezco.

No tenia nada que perder, solo espero que Lilith no me odie tanto por convertirla en una humana, después de todo estoy seguro que ella no es tan mala como aparenta ser, anhelo una vida simple a su lado.

Además ella provocó que llegáramos hasta estás condiciones, escuché su voz y en un instante ella se encontraba a mi lado, no había tiempo que perder, tome el Escudo con una mano y con la otra sostuve a Lilith.

No lo pensé tantas veces, hice uso del Escudo Mortalis. Una nube negra se apoderó de mí, caí en un sueño profundo, cuando desperté me encontraba frente a una bella joven de nombre Nirmala.

Me conto como encontraron mi cuerpo en la gran selva, ella y su padre me trajeron a su casa, tenía una herida en el hombro, afortunadamente no era de gravedad y con sus cuidados me estaba recuperando sin problemas.

Un vacío en el corazón se manifestaba al paso de los días, no había recuerdos en mi mente, lo único que sabía era mi nombre. Para pagar la amabilidad de Nirmala y su familia, le ayudaba a recolectar comida, en algunas ocasiones íbamos de pesca o cazabamos .

Ellos adaptaron un pequeño cuarto para mi, me encontraba acomodando mis cosas cuando escucho la voz de Nirmala -¿Ya esta listo?.

-Si.

-Hoy solo tú y yo iremos a conseguir un poco de fruta.

-Perfecto.

Nirmala es una bella chica de ojos color miel, cabello castaño y piel canela, tengo entendido que su padre es una de las figuras más importantes de este lugar.

Cuando aparecí por primera vez en el pueblo, muchos hombres me vieron con malos ojos, aunque es lógico ya qué soy un completo desconocido.

Caminamos por una hora hasta llegar a unos árboles frutales de la zona, empezamos a recolectar mangos, bananos y naranjas.

De pronto una bella chica de piel tan blanca y hermosa cabellera oscura apareció ante mis ojos, ella intentaba cortar unas narajas, por su baja estatura se le dificultaba alcanzarlas.

Me acerque a ella -Me permites ayudarte.

Ella giro a verme y enseguida quedé paralizado ante su belleza, sus ojos cafés me miraron asustada. -Tranquila no te haré nada malo lo prometo.

-¿Quién eres?.

-Soy Raziel mucho gusto, te ayudare a contar un par de narajas.

Ella asintió con la cabeza, pase a su lado, su aroma a menta fresca despertó mis sentidos. Tome un par de narajas y las deposité en su cesta.

-Ya quedo listo.

-Gracias por tu ayuda Raziel, debo irme.

-Espera aún no sé tu nombre.

-Mucho gusto me llamo Lilith.

-Lindo nombre.

-Gracias, me voy.

No quería dejarla ir tan fácilmente, deseaba conocerla aún más, pero cuando estaba a punto de seguirla, la voz de Nirmala me distrajo.

-Raziel, ya tengo los bananos en las cestas, debemos irnos.

-Yo igual ya recolecte las narajas y mangos.

-¿Qué ocurre? Te vez distraído.

-Conocí a una chica de nombre Lilith.

-¿Lilith? Nadie en el pueblo se llama así.

Hice un pequeño gesto de molestia, ¿Acaso me mintió esa joven? Debo averiguar más sobre ella.

-Raziel hoy habrá una pequeña fiesta en el pueblo para adorar a nuestros dioses ¿Quieres acompañarme?.

-Claro Nirmala, será divertido.

Nirmala me devolvió una tierna sonrisa. Regresamos a casa y nos preparamos para la gran celebración de esta noche, en el fondo deseaba encontrarme con aquella joven.

Un Amor Hecho Pedazos (Angeles Y Demonios)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora