Zona Segura

Retos populares

Desde que Mo Ran había descargado TikTok, se había vuelto adicto a ver los videos cortos en esa red social.

No subía nada ni le interesaba hacerlo, pero le gustaba perder su tiempo libre en el teléfono, incluso había aprendido un poco gracias a algunos videos informativos.

De repente cantaba la música que aparecía en trends famosos, a veces decía frases icónicas de las personas más visualizadas dentro de la plataforma e incluso hacía retos y experimentos.

Jamás se había arrepentido de hacer uno, excepto cuando decidió intentar un reto de parejas con Chu Wanning.

El reto era simple. Se trataba de juntar lo más posible tus labios con tu pareja sin besarse durante un minuto a ver quién perdía, incluso apostó un pote de helado de chocolate para después de comer si su Wanning ganaba.

Tras terminar de explicar el reto, le preguntó a Wanning si estaba de acuerdo en hacerlo, y solo para hacerlo feliz aceptó aunque no estaba interesado. De hecho, ni siquiera había prestado atención real a su explicación debido a que tenía unos pendientes por terminar revisando exámenes de sus alumnos.

Mo Ran se entusiasmó por la afirmativa de su esposo, así que lo tomó de las caderas dejando un beso en la clavícula.

—¿Listo?

—Sí... —comentó un poco avergonzado debido a que no terminó de escuchar la explicación de su contrario y ahora no sabía lo que tenía qué hacer.

Por su parte, el más alto se acercó a los labios de su esposo después de colocar el temporizador, incitando a este para besarlo en busca de saber quién sería el primero en perder.

Estaba seguro que no aguantaría más de cinco minutos sin besar a Chu Wanning, pero le intrigaba saber quién perdería primero porque aunque su esposo era más retraído, también le gustaban los mimitos de vez en cuando.

Lo que no esperó fue que después de acercarse, ni cinco segundos pasaron cuando Chu Wanning lo besó.

Aunque correspondió, se separó dejando escapar una pequeña risita.

—Perdiste. Pero te dejaré una oportunidad más, ¿De acuerdo?

Aunque detestaba perder, quería que su Wanning ganara.

Mientras tanto, el mayor frunció el ceño y asintió con la cabeza sin comprender por qué había perdido, indispuesto a pedirle a su esposo que volviera a explicarle ese reto.

Cuando Mo Ran volvió a acercar sus labios, Chu Wanning lo besó de nueva cuenta.

Le dio varias oportunidades más en busca de que Chu Wanning ganara, y aunque disfrutaba de los dulces besos de su contrario, se dio cuenta de que este seguía perdido con el reto, así que volvió a explicarlo.

—¿Entendiste en qué consiste? —pidió saber tomando con ternura las mejillas de su hombre.

Un poco avergonzado, Chu Wanning asintió con la cabeza sintiéndose un tonto por no haber prestado atención antes.

—De acuerdo, entonces iniciemos.

En esa ocasión, el que terminó perdiendo después de dos minutos fue Mo Ran, y aunque ambos querían besarse, Chu Wanning era demasiado competitivo, así que incluso cuando su esposo unió sus labios, no correspondió el suave beso.

Mo Ran rió encantado, sin importar que su esposo no hubiera devuelto el gesto, después de todo era un reto.

—En un rato iré por tu helado —prometió besando en esa ocasión su frente—, sigue trabajando.