Capítulo 6.5 ✘ La carta

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Aquella vampiresa consumida en su descanso, se encuentra en esa habitación, acostada sobre su cama mientras es vigilada por ese antiguo vampiro con atención.

Él sin dejar de verla, recuerda lo que acaba de pasar. Con ella, con su creación.

—Mi Señor, no es lo correcto —se atreve a hablar su informante situado a una cierta distancia de la cama, sin dejar de verlo y ver a esa vampiresa.

—Fue lo que causó Vlad

—Y ya recibió su castigo. En este momento está descontrolado. Ya me encargué de él, hizo lo que me pidió —Darkiel hace una corta pausa— bebió sangre mortal.

Esa última palabra causa una sonrisa maliciosa en ese antiguo vampiro dejando visibles sus largos colmillos.

—Lo tuve que sedar, no volverá a causarle más problemas mi Señor.

—Te equivocas, en el momento que se alimentó como es debido, ya existen —le responde y ladea un poco la cabeza —se atrevió a enfrentarme. Se atrevió a ser el donante de Elizabeth. —recupera su postura y gira a verlo— ella no debió probar su sangre.

—La señorita Elizabeth no lo volverá a hacer. Estaba sedienta, no es toda su culpa mi Señor —su informante mira con pena a la susodicha— ella está muriendo si le seguimos prohibiendo la sangre que necesita.

El vampiro sonríe con maldad y regresa la vista en ella.

—Y lo hará cuando sea necesario —levanta su brazo y esa pálida mano se situa en su frente— mi amada hija no recordará nada.

—Mi Señor, no lo haga —él se atreve a dar un paso al frente— ya es demasiado. Usted se debilitará.

—Es necesario —sentencia y aleja su mano de ella. Derek observa con atención su brazalete, basta con colocar uno de sus dedos sobre el objeto y recita en voz baja esa simple palabra que de forma sorpréndente; esta vez aparece un broche visible.

—Mi Señor, piense en las consecuencias —insiste su informante y con velocidad aparece del otro lado de la cama.

Luce más preocupado que el mismo vampiro.

Él lo ignora, con sus largas uñas abre el broche y se quita el brazalete hasta dárselo a su leal informante que sin más remedio, lo acepta.

Derek observa sus propias manos, su excesiva palidez resalta siendo evidentes venas que cubren sus brazos y termina en la punta de cada uno de sus dedos. Otras se extienden por su cuello, en su rostro, en especial bajo sus ojos. Mientras en el proceso, ese tono carmesi cambia completamente a un tono oscuro. Sus colmillos han crecido de gran tamaño, tal vez un poco estorbosos sin embargo son parte del vampiro monstruoso que es.

Su informante niega en desacuerdo sin embargo no se atreve a intervenir. Se limita a ver y esperar los resultados.

Derek gira a ver a esa vampiresa, con lentitud hace girar su cabeza del lado izquierdo dejando expuesto su cuello. Existe un gran riesgo, un posible descontrol sin embargo se obliga a actuar y con velocidad encaja sus colmillos en su cuello, sin ella quejarse al estar inconciente. Solo succiona unas cuantas gotas necesarias mientras se enfoca en ver todos sus recuerdos y enfocarse en lo más importante.

Ser vampiro le permite ver como si una película se tratase la vida de esa vampiresa en su época de humana.

Una inocente bebé es cargada entre los brazos de una humana: Sara. Ella la arrulla con una inmensa alegría en su rostro mientras ve a su hermana que rechaza cargarla.

—Es hermosa Aria

—No la quiero, es toda tuya hermana.

Ella gira a verla y la alegría se esfuma a una expresión triste.

✘VIDA ETERNA✘ © [SVD #3]  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora