✘VIDA ETERNA✘ © [SVD #3]

Capítulo 9 ✘ El tiempo avanza

  ✨ Narradora Omnisciente ✨

Sin permiso Esteban entra a esa habitación sin necesidad de cerrar la puerta mientras se acerca a él.

—Iré a entrenar a criatura, te aviso por si quieres acompañarnos mientras te ocultas —espeta con burla, se detiene en espera de su respuesta. Borra su sonrisa y lo analiza con detenimiento — Darren ¿no vas correrme o insultarme?

Ladea la cabeza

Él sentando desde la orilla de la cama sin voltear a verlo. Su vista está clavada en esa carta que recibió.

—Ayline —pronuncia y gira a verlo— tal vez... existe —sin más remedio le entrega la hoja que sin dudar, ese rubio vampiro la acepta y enseguida revisa— Alguien la dejó aquí, la encontré ayer. Debió aprovechar que no estaba en el Castillo.

Esteban deja de leer la carta y enfoca la vista en él.

—Darren, te recuerdo que pequeña está ... muerta. Es imposible que haya regresado a escribirte esto.

—Es su maldita letra

Esteban niega y da un paso hasta él.

—No es pequeña. No te puede afectar una simple nota. Debe ser una broma, solo se aprovechan de la situación —él vuelve a ver la carta— analizala Darren, es una clara advertencia.

El susodicho gruñe en respuesta.

Desde que la encontró, no a dejado de releerla, de analizar cada palabra hasta este punto aprendersela de memoria.

—Esta firmada por una maldita A —rapido se pone de pie— ¿Quién la dejó aquí?

—Eso hay que averiguarlo —le responde Esteban con calma— debió ser él. Ese antiguo vampiro debió enterarse lo que pasó con pequeña y para afectarte te deja esta carta. Piensalo Darren, todo indica que fue él. Es más creíble que pequeña.

—¿Cómo es que entró? Debieron verlo, darse cuenta de su maldita presencia.

—Ese es el gran problema. No nos comentaron nada durante nuestra ausencia. Si es tan fuerte, debieron descubrirlo o lo peor, que entró al Castillo sin nadie darse cuenta.

Ambos guardan silencio

Esteban revisa la nota

—Alguien debe estar ayudándolo. Espero no tengamos un traidor aquí. —alza la vista y lo observa— Darren, no es ella. Vamos a descubrir quién la dejó, vamos a estar alerta —hace una corta pausa— tenemos mas problemas más graves para darle importancia a esto —mueve la hoja— es una simple nota, nada más. Olvídate de esto y sigue siendo el rey que necesitamos ¿De acuerdo? —no recibe su respuesta— iré a entrenar a tu hija, controlarla si es más importante.

Esteban termina por romper la hojar en varios trozitos y tirarla al suelo.

—Es tu habitación, la limpias. —agrega con burla y se da la vuelta hasta marcharse con velocidad de la habitación.

Darren desvía la vista en el balcón, se obliga a dejar de pensar en la nota.

—Ya no existes Ayline —hace sus manos puños—y te voy a encontrar maldito Derek —finaliza sin evitar una maliciosa sonrisa.

+ Un mes después +

—¿Segura que no quieres mi sangre? —le repite Owen por tercera vez.

Ana Liz deja de ver la puerta y se medio voltea logrando verlo.

—No estoy sedienta Owen —le responde ignorando la sensación de sed. Últimamente esa vampiresa se siente extraña con ella misma.