✘VIDA ETERNA✘ © [SVD #3]

Capítulo 17 ✗ Antiguo rival

—¿Por qué tengo que darte mi anillo? Me dijiste que nunca me lo debo quitar.

Ese pequeño vampiro retrocede un paso atrás mientras oculta su diminuto anillo con su mano.

—Lo sé Noah, pero necesitas uno nuevo. Debes cambiarlo antes de que ese anillo sea difícil de salir por ese dedito —Esteban se agacha hasta su baja altura y con delicadeza lo toma de la mano logrando ver su anillo— tengo uno mejor para ti.

Bajo su atenta mirada, le muestra un anillo de mayor tamaño e identico. Su creación asiente y se deja reemplazar su anillo por el nuevo.

—Vez, te queda a la perfección —su creador lo observa con atención— estás creciendo demásiado rápido Noah y no debería ser así.

—¿Es mi culpa?

Esteban le sonríe siendo visibles sus colmillos.

—No lo es, esto es parte del cambio pero me cuesta asimilar que no te serás un niño toda tu eternidad. Apenas hace meses eras un hermoso bebé —acaricia su mejilla con ternura— y mírate ahora.

Enseguida aleja su mano y se pone de pie. Ante la diferencia de estatura, Noah levanta la cabeza y le sonríe luciendo sus colmillos que comienzan a crecer más y sobresalir.

—Te quiero papi

—Y yo a ti —Esteban se encarga de desordenar su castaño cabello— sabes Noah, creí que estar aquí y con todo lo que pasó, que tantas pérdidas me volverían realmente loco —medio sonríe— pero llegaste tú y cambiaste algo en mí. Eres mi razón de existir Noah, el hijo que siempre quise tener —extiende sus brazos— ven a darle un abrazo a tú padre.

Noah ríe y se le lanza encima. Con un rápido movimiento lo carga entre sus brazos.

—Ajam, verlos así me hace sentir un poco de celos.

El rubio vampiro desvía la vista en el responsable de la interrupción. Le sonríe y baja a su creación al suelo.

—No es mi culpa de que alguien creció demásiado rápido que ya no quiere un abrazo de tú tío favorito y hay un reemplazo que no se niega a recibirlos.

Dean ríe y se detiene a unos pasos cerca de ambos.

—Lo decía en broma aunque no se me olvida esos tiempos. Me tratabas como un niño, era tu consentido y tú sobrino favorito.

—De cierta forma, eres el único que tengo

Ambos ríen

Dean posa la vista en ese pequeño vampiro

—Hola Noah

—Hola primo Dean

Él alza la vista

—Me gusta que me diga así, cada vez creces más.

—Y no me lo recuerdes, estoy pensando en tomar medidas drásticas sobre eso.

—Es algo que no se puede impedir tío Esteban —él se encoge de hombros— así es nuestra naturaleza —Dean avanza un paso adelante y se medio gira— mejor quiero que veas a alguien, mi novia a venido a verme.

Tanto creador y creación ladean la cabeza al mismo tiempo logrando ver a Amaris acercarse a ellos.

—Hola —emite al colocarse a un lado de Dean.

—Vaya, sí vino la lobita

—No le digas así tío Esteban

—Dejalo Dean, no me molesta —le dice Amaris y coloca su mano en su hombro— que bueno verlo rubio vampirito ¿Cómo está?