Capítulo 34 ✘ Debilidad

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Ese rubio vampiro le permite la entrada a su creación en cuanto abre la puerta de su habitación y Noah corriendo entra y se dirige a la cama.

Sin ocultar su preocupación, Esteban entra y cierra la puerta. Observa a su hijo subir a la cama sin problema ante su rápido crecimiento. Se sienta y abre su libreta mientras dibuja.

—Últimamente estas muy raro. Tú comportamiento con la reina fue grosero Noah —se acerca a él— Es extraño que la rechaces ¿qué te pasa pequeño?

Esteban toma asiento en la cama a su lado. Sin embargo Noah sigue atento en su dibujo.

—Sea lo que sea puedes decirme. Soy tu padre y ante todo te voy a proteger y ayudar.

Entonces el pequeño vampiro levanta la cabeza hacia él.

—Vámonos del Castillo. Ya no quiero estar aquí papá.

—No podemos irnos Noah —el molesto deja de verlo y raya su propio dibujo— sé que afuera ya no es un peligro pero no estas listo para vivir en el mundo mortal. El Castillo es por ahora nuestro hogar. Además nos necesitan pequeño —le arrebata la libreta captando su atención— ¿por qué te quieres ir? ¿Tuviste un problema con Alina? —él niega— ¿con algún vampiro o vampiresa? —baja la vista— ¿con la reina?

Noah guarda silencio

Esteban lo obliga a verlo

—Ya no me gusta el Castillo —emite su creación en voz baja.

No obstante un golpe en la puerta los interrumpe y antes de evitarlo, esta es abierta.

—Esteban, es urgente que vayas a los calabozos. Más mortales están aquí.

Él gruñe, suelta a su hijo y se pone de pie.

—Estoy ocupado Darren —se voltea— no puedo encargarme de eso. Encargaselo a otro vampiro.

—Lo haces tú o lo hago yo

—Tú vas a matarlos, por algo pequeña me nombró quien los organiza en cada una de las celdas —hace una corta pausa— pero ahora estoy ocupado con... —guarda silencio cuando revisa la cama vacía. Lo busca en la habitación hasta dar con Noah a un lado de la cama, solo se asoma con miedo.

—Encargate ahora Esteban

Dicho esto y Darren cierra la puerta con brusquedad.

—Noah, levántate, sal de ahí — el pequeño niega varias veces. Esteban con velocidad llega hasta él y se agacha a su altura.

—El rey es malo

—Si es un maldito pero no te hará nada.

Noah baja la vista y comienza a llorar.

—Hijo ¿qué tienes?

—No me quiere cerca de la reina y si lo hago, me va a matar.

Sin evitarlo, Esteban deja crecer sus colmillos.

—¿Se atrevió a amenazarte? —masculla entre dientes. Espera su asentimiento y se pone de pie— descuida hijo, no se volverá a repetir.

Con velocidad se marcha dejándolo solo.

Mientras tanto, en la sala real Darren entra captando la atención de Aylin.

—Los malditos mortales ya están aquí.

—¿Cuántos son esta vez?

—30

Aylin da dos pasos adelante

—El límite eran 20

—No son suficientes Ayline para cada vampiro del reino. Así como cada vez hay más humanos, más vampiros existen aquí. Las malditas descendencias se están multiplicando. Se necesita más sangre mortal.

✘VIDA ETERNA✘ © [SVD #3]  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora