Mentiras Indiscretas

𝚄𝚗 𝚙𝚛𝚎𝚜𝚎𝚗𝚝𝚎 𝚢 𝚞𝚗𝚊 𝚌𝚊𝚛𝚝𝚊

En la actualidad, en una mañana como cualquier otro día en el instituto....
- Buenos días Bryan. ¿Cómo estas? disculpa que te moleste.
- ¡Hola Marilla!, todo bien ¿Y tu?, no es molestia en absoluto. Dime, ¿En que te puedo ayudar?.
- Estoy bien, gracias por preguntar. Verás, he recibido una carta muy extraña y no sé de quién proviene. ¿Tú no has visto de casualidad a alguien por aquí?.
- De alguien que haya escrito la carta ¿tú dices?.
- Exactamente a eso es a lo que me refiero.
- Creo que no, o por lo menos no vi a alguien sospechoso. Ayer han venido dos mujeres con ustedes, ¿no puede ser que la halla escrito alguna de ellas?
- Lo dudo mucho querido. Son amigas de confianza.
- A caso ¿tu las conoces bien?.
- Las conozco bien. -Aunque no tanto como las conocía Brikston-. Son buenas personas créeme, ellas no serían capaces de hacer todo eso.
- Entonces no lo sé. Sinceramente lo dudo. Aunque más bien, ¿se puede saber que dice dicha cartas?. O ¿Por qué haz dicho que es extraña?.
- Es algo privado supongo. No es algo que deberían de leer ustedes, por eso digo. Me llamaba mucho la atención la letra de la persona y su forma de expresarse, es todo. -Le dije mintiéndole. Ya que estaba más que claro que la carta hablaba sobre él y su identidad. Además Brikston nunca me había dicho que su hijo era Bryan, ni siquiera conocía su género hasta que lo leí y en ese momento me enteré-.
- ¿Hay algo más en lo que te pueda ayudar?.
- En absolutamente nada, te lo agradezco.
- No hay de que Marilla. Espero que encuentres a alguien que pueda ayudarte con eso. Y no te preocupes, mientras no sea una amenaza como la que hicieron recientemente aquí en el instituto, está todo más que bien.
- Ok gracias Bryan. Tú no te preocupes, solamente quería saber eso, es todo. ¿Tú como vas con los exámenes?. He visto que tus notas han mejorado mucho este último trimestre.
- Siento que me está yendo muy bien, gracias por preguntar. Aunque si te tengo que ser sincero, no es para nada fácil. Hace poco he rendido el tema de trigonometría y es realmente complejo. Pero nada para quejarme porque es difícil y me he sacado un ocho, así que estoy muy feliz y orgulloso por ello.
- ¡Que bien! Me alegra oírlo, bien por ti.
- ¿Tú como la has pasado en el viaje?.
- ¡Genial!. Ya sabes...he trabajado mucho pero también lo considero como que fue un viaje tranquilo y que me venía bien para tomar aire y descansar, estuvo de maravilla sin duda.
- ¡Que bien! ¡Que buena onda!. Me alegra mucho realmente. Ahora si me disculpas, iré al cuarto de Julieta para desayunar con ella.
- Me parece bien. Pero ojo, que no sé si estará despierta. Anoche hemos vuelto muy tarde y no me sorprendería que aún esté durmiendo.
- Dale, tranquila no te preocupes. Te veo luego ¿si?.
- De acuerdo, después te veo. Adiós.
- Adiós.

Bryan Kendall
Realmente me parece verdaderamente extraño todo lo que ha pasado. ¿Por qué de repente Marilla tuvo que irse de viaje? ¿Quiénes son las mujeres que vinieron con ellas?. Presiento que algo ocultan, y como el gran observador e investigador que soy, intentaré de averiguar qué ocurre. Aunque si vamos al caso, ¿debería de desconfiar de Marilla y Julieta o aún seguir confiando en ellas?. Julieta es asombrosa y estoy enamorado de ella, la amo con todo mi ser y con todo lo que tengo. Pero por su parte, Marilla no me ha contado que contenía tal carta.¿porque habría un motivo para ocultármelo? Y de ser así ¿cuál sería este?. Son muchas dudas las que se me fueron ocurriendo, pero muy pocas respuestas. Estoy confundido y por ende, al dirigirme al cuarto de Julieta, platiqué un rato con ella y aproveché la oportunidad para consultarle tales dudas que quizás me sabría responder. No obstante, de ocultarme un secreto, sé que tarde o temprano, lo descubriré.

- Buenos días mi amor...-Dije en voz baja. Susurrándole en el oído mientras se encuentra acostada en su cama-. Ya es hora de despertarse...
- Buen día cariño. ¿Qué haces aquí? Pensé que tú estarías en la...
- ¿En la habitación que me pertenece?. -Le interrumpí y consulté-.
- Si a eso me refería.
- Debería de estar allí. Pero apenas te pude ver anoche cuando regresaron del viaje y quería saber cómo la pasaron. La última vez que te vi estabas media agotada y requerías un descanso ¿no?. Por eso mismo, vine para ver cómo estás amor.
- No tienes de que preocuparte cariño. Gracias por venir hasta aquí, ¿pero no crees que es hora de seguir durmiendo?. La he pasado genial fue maravilloso conocer Roma y hacer un tour por ahí. Fue increíble, sin duda.
- No hay de que. Pero no creo que sea la hora de seguir durmiendo. Son las nueve de la mañana. ¿No te parece que ya es lo suficientemente tarde para aún estar en la cama?.
- No lo creo ja.
- No importa, no tienes porque levantarte ni irte de aquí. Aunque yo no me iré, quiero charlar contigo.
- Entonces dime. ¿Qué quieres oír?.
- ¡Cuéntame todo! Te oigo.
- Fue muy lindo. Pasar tiempo a solas con Marilla fue muy..-Empezó a pensar en las palabras indicadas para decir a continuación-. Relajador e innovador. Por lo menos para mi, pienso que fue muy bonito compartir el tiempo con ella. Me siento muy contenta por haberla acompañada y por haber hecho el viaje, fue asombroso.
- Si, la verdad es que he oído cosas muy lindas al respecto. Además la cultura de allí es muy interesante ¿no?. Pero al margen de eso, ¿qué estuvieron haciendo?.
- La realidad es que si, tienen una cultura muy diferente a la nuestra y muy cautivadora. Es interesante para analizar y ver, real si que lo es. Aunque mi amor ¿Por qué te interesa tanto? Hemos hecho de todo.
- Si, pero estoy interesado en saber cómo te fue.-Le dije con el fin de indagar y averiguar más bien-. ¿A caso preocuparme por ti tiene algo de malo?.
- En absoluto, eso es lo que más me gusta de ti. Que seas dulce, amable y que también estés para mi es muy importante y lo sabes ¿cierto?. En conclusión, hemos hecho muchas cosas.
- ¿Cómo cuales?.
- ¿A que te refieres exactamente?. Recorrí varios sitios de Roma, almorcé y cené en restaurantes...realmente un sueño inolvidable.