cuarto epílogo, primera parte

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Narración:

Nueve años han trascurrido desde que Serena anunciara su nuevo embarazo por partida doble y, muchas cosas habían ocurrido desde entonces. Comenzando con la carrera profesional de la señora de Chiba. La emprendedora mujer siguió el consejo de su marido, y a tan sólo unos meses de dar a luz, lanzó su propio bufete por segunda vez. Todo apuntó a que los nuevos mellizos traían torta bajo el brazo ya que desde entonces a Serena las cosas le salieron a pedir de boca; rápidamente se hizo de clientes, tuvo encargos de empresarios de renombre, en fin, tanto fue su éxito que pronto el bufete 'Tsukino y Asociados' se colocó en el puesto número uno de los tres mejores en el país.

Su principal trabajo y por el cual se convirtiera en una excelente arquitecta de renombre fue el: Architectural Treasure, (Tesoro arquitectónico). Nombre que ella misma le dio al primer rascacielos autosustentable en México, el cual superaba por tres pisos al famoso Empire State. Serena siempre se había considerado admiradora de aquélla joya y de William Frederick Lamb, el arquitecto principal en su diseño, por ello lo tomó como inspiración. Claro, con la diferencia de que su obra maestra era toda modernidad para no afectar el medio ambiente, y a su vez, facilitarle la vida a quienes lo habitaran. Durante su construcción que demoró cerca de año y medio generó una variedad de empleos y atrajo la atención de cientos de turistas. Cifra que en muchas décadas no había sucedido en dicho país. Por esta razón y más Serena se rehusó a que dejaran el nombre en español, ya que bien o mal, como lo quisieran ver, suele generarse más publicidad cuando algo o alguien parece venir de otro lugar.

No era ninguna novedad que desde muy joven Serena deseaba llegar lejos en su profesión para superarse y enorgullecer a la familia, sin embargo, había una razón más poderosa para que se esforzara tanto, para que dividiera su papel de madre con el trabajo. Pagarle lo que le debía a su tío y regresarle algo a su padre de todo lo que éste había hecho por ella para convertirla en una mujer empoderada. Aunque nunca lo mencionó y los hermanos Aino no le reclamaron nada, la señora de Chiba se sentía en deuda. Una deuda de honor más que una monetaria. Algo comprensible si se ponían en sus zapatos.
Cuando obtuvo el dinero suficiente saldó su deuda con Haruka y, como Jedite jamás iba a aceptarle un centavo, lo que hizo fue remodelarle su mansión que buena falta le hacía. Todo lo planeó meticulosamente, en complicidad con Kakyuu idearon un viaje en crucero para que los esposos celebraran por adelantado su aniversario de bodas y así Serena pudiera darle la sorpresa a su padre. Resultó. Jedite no podía sentirse más orgulloso de su leona.

Darien no se quedó atrás. El éxito de sus diferentes plantas le generó el dinero suficiente para extender la agencia de seguridad a otros dos países y también invirtió en nuevos proyectos. El cielo era el límite. No es que fuese ambicioso más allá de lo saludable, no. Chiba trabajaba arduamente porque deseaba darle sólo lo mejor a sus tesoros, además de pensar en su futuro. De este modo el día que él les faltara ninguno de sus ocho hijos quedaría desprotegido. De alguna u otra manera continuaría protegiéndolos...

Pero no todo podía ser trabajo. En medio de los logros personales de cada uno, la familia Chiba Tsukino disfrutaron de nuevas alegrías, aventuras y experiencias. Especialmente con los bebés recién llegados, (que por azares del destino nacieron en la misma fecha que los primeros mellizos. Un 12 de abril). Fue como regresar en el tiempo y revivir el nacimiento y crianza de Naiku y Dafirot Kenji. Como debió ser; sin maldad a su alrededor, sin dolor o lágrimas de miedo. En pocas palabras la pareja no podía pedirle más a la vida.
A los tres años, precisamente en el cumpleaños de los cuatro mellizos, Darien que todavía no había olvidado la promesa que les hizo hacia mucho tiempo a sus tesoros les dio una fantástica sorpresa: las llaves de su nuevo "castillo". Entre comillas porque en realidad se trataba de un rancho ubicado muy cerca de Camino Lunar. Sí, esto significaba que se mudarían de país.
Tanto Serena como los hijos mayores se volvieron locos de felicidad. Aunque tampoco lo habían olvidado, ninguno se lo esperaba. Darien no tenía porqué gastar tanto si en su casita vivían cómodamente, pese a que la familia había aumentado. Las mujeres incluso soltaron a llorar considerándose muy afortunadas por tener a un esposo y a un padre como Darien. Verdaderamente no existía otro hombre igual.

El Verdadero Amor Perdona 💞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora