El Verdadero Amor Perdona 💞

capítulo 51

Quién es el padre de Max?:

Diamante:

Nápoles, Italia...

* joder, si la trabajadora social se entera de esto, me aplastará las pe...

* tranquilo, señor. Seguro que no están muy lejos de aquí. Los encontraremos enteros y sin un rasguño, y nadie sabrá nada. No creo que Peruru lo cuente, porque se lo llevarían de vuelta al internado y esta vez sin Max. Ya sabe por qué...

Asiento e inevitablemente mi mente viaja al momento en que llegamos aquí y todo lo que hasta entonces ha sucedido. Como imaginé, esta cosa de ser padre adoptivo resultó ser una gran locura! Literal! Ese par de críos ya me tienen al borde de que caiga en un psiquiátrico por todo lo que me hacen pasar. Cuando no se meten en problemas con el personal de la casa, lo hacen en el colegio o en los institutos donde toman sus cursos de idiomas, arte, deporte, etc. En todos los lugares donde los inscribí para darles las mejores herramientas.

Peruru tiene severos problemas con la autoridad. No respeta a nadie si yo no estoy presente. Al principio quiso tomarme el pie también, pero logré de una manera (nada violenta) someterlo. Demostrarle que aunque es un crío, no se puede salir con la suya ni abusar de la horrible infancia que tuvo. Conmigo no dan resultado los chantajes ni la manipulación.

Desde que vi que comenzó a dar señales de violencia, fue que decidí ser más firme y duro con él. No hablo de pegarle ni dañarlo psicológicamente, porque en mi vida haría tal cosa. No. Sino a otra clase de dureza. Todo lo contrario a como soy con Max. Después, el terapeuta que los está viendo a ambos, me hizo saber que hice bien y desde entonces ya es una costumbre. Lástima que esto con Peruru no funcionara para que sea obediente con sus profesores y demás.

Por más terapia que está recibiendo, no da el ancho y esto que hizo hoy ya fue el colmo. Tan mal se ha comportado, que la trabajadora social advirtió que si Peruru no muestra ningún avance en cuanto a su relación con la sociedad, si da un motivo más para caer en problemas, deberé regresarlo a los servicios sociales para que ellos lo envíen a un reformatorio. Es muy joven, pero su espíritu pareciera el de un adolescente. Uno muy difícil.

Francamente ya no sé qué hacer con él. No me desagrada el crío, pues de una manera extraña, me proyecto en él, y además conmigo sí se cuadra, solo que no puedo estar las 24 horas pisándole los talones. No me he encariñado ni con él ni con máx, pero aún así no quiero que termine en un reformatorio. Eso sería lo mismo que haber tirado la toalla. Y Diamante Black nunca la tira!

En cuanto a Max, él es muy volátil últimamente. Cuando no continúa llorando por todos los rincones a causa de lo de costumbre, se la vive durmiendo, cabreandose por todo, y cuando no hace eso, está siguiéndole el juego a su amigo en una mala imitación de niño rebelde y espíritu libre. No le queda para nada. He observado que el alma de ese niño es demasiado noble, dulce y hasta frágil. Muy similar a Serena, por cierto. En eso también me la recuerda. Ya no solo cuando llora.

Pero sin salirme del tema, Max también es muy inteligente. Tiene actitudes para muchas cosas. Llegaría lejos si tan solo dejara de ser retraído, introvertido y en cambio nos diera a todos la oportunidad de ayudarlo para que supere a su loca madre. Para que todos sus traumas se esfumen y pueda ser cíen por ciento feliz.
Yo trato de tenerle paciencia y hasta alentarlo para que se anime a hacer las cosas. A nadie le había rogado y con él lo he hecho. Me siento tonto cuando lo hago, pues seguro que así se debe ver un padre con sus retoños y, yo de padre no tengo nada!

Inclusive les he dicho que no me vean como a un padre adoptivo si no más bien como un mentor o lo que sea menos eso. No me gusta y al parecer a ellos tampoco porque hasta la fecha solo se refieren a mí como 'señor'. El hombre que pone el dinero y les da un techo.
La trabajadora social no ve bien ese detalle, pero eso debiera importarle un carajo. No es ella quien tuvo que adoptar a dos críos totalmente difíciles, y hacerse a la idea de la noche a la mañana que su vida ya no será la misma porque dos seres vivos y pequeños ahora dependen de ella. En ningún momento fue mi intención hacerme de responsabilidades a este nivel, y si me dieran a elegir entre volver a hacer todo o haberme quedado en mi país, sin duda nunca habría salido de ahí.