⊱25⊰ᴾᵘⁿⁱˢʰᵐᵉⁿᵗ

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Los chicos han perdido la cuenta de los shots que se han tomado, pero ahora los tres están en la pista de baile meneando sus caderas y disfrutando de la música, las luces neón alumbran sus rostros, la gente a su alrededor se mueve y salta haciéndolos reír por los movimientos que hacen, Harry ha estado restregando su trasero contra el de Niall intentando ser sexy mientras Liam los mira y ríe de ellos, luego los tres están abrazados saltando y moviéndose al son de la canción electro pop que suena. 
El alcohol definitivamente ya está en su sistema, sus manos se sienten hormiguear por el vodka que recorre su cuerpo, los tres tienen sus ojos vidriosos y su frente con gotas de sudor por el gran calor del lugar, pero aun así no se detienen. 
Niall se ha subido a una mesa y está bailando haciendo que todos a su alrededor le aplaudan y lo animen, Harry ha sacado su teléfono para grabarlo y subirlo a sus historias sus risas no faltan por los movimientos vergonzosos que el rubio hace, Liam solo sigue tomando y bailando a un lado de Harry e intentando seguir los pasos de Niall. 

El rizado guarda su teléfono y toma una botella de la mesa de unos jóvenes que se encuentran ahí y se empina mientras todos le gritan a su alrededor, el sabor amargo le quema la garganta, pero no le importa y le pasa la botella a Niall que por igual da un gran sorbo mientras baja de la mesa los jóvenes los han rodeado, dejando a los tres sumisos bailando en medio de los jóvenes que toman su botella y les vuelvan a dar shot a cada uno. 
Todos están bailando y moviéndose, manos tocándose y disfrutando la cabeza de todos, da vueltas por el alcohol y el humo de los cigarrillos, las luces los tiene perdidos, pero ellos siguen en su mundo. 

Dos hombres trajeados y con cara de pocos amigos llegan en una gran camioneta último modelo, el pelinegro la estaciona cerca del bar y azotando las puertas con enojo ambos se dirigen a la entrada del bar, con sus trajes costosos que usan no encajan con el lugar lo que hace que algunas miradas coquetas y otras extrañadas los volteen a ver, pero no les puede importar menos, sus mentes están en encontrar a sus sumisos y asegurarse que todo esté bien.
No necesitan hacer fila para entrar, el guardia los conoce y sin más los deja entrar.

El rizado no ha dejado de reír y las manos en su cintura cada vez lo acercan más al cuerpo del joven de pelo negro que susurra cosas en su oído y le anima a comer una de las pastillas que anteriormente ha sacado de su pantalón, sus amigos están igual que él solo que a Niall lo han sentado en las piernas de otro joven y Liam está intentando escapar de uno, parece que es el más cuerdo de los tres. 

— Te hará sentir bien y disfrutaremos más en los baños, vamos ojitos, tómala– le acerca la pastilla a los labios. 

El rizado duda un momento, pero el alcohol en su cuerpo no lo deja pensar con claridad, intenta quitarse de encima las manos del joven para apartarse y respirar, pero este lo toma con más fuerza. 

— Mmm...no creo que a mi amo le guste que tome eso – susurra 
Harry con nerviosismo

A unos pocos pasos de ellos al fin se encuentran los dos hombres trajeados, ambos miran como sus niños están ebrios y con otros hombres, se acercan rápidamente a ellos.

— ¿Amo? Que eres un jodido perro.– se burla el joven 

— Es una persona y será mejor que apartes tus manos de mi novio – la voz ruda de Louis hace que el joven suelte a Harry y lo mire. 

El pequeño tiembla al ver a su amo ahí, los otros dos sumisos ya han sido tomados de las muñecas y jalados hacia la puerta, Louis con un empujón quita al muchacho, este por miedo al ver al hombre tan serio no dice nada pareciera que lo atrevido se le quitó cuando vio a un hombre de verdad, toma a Harry de la mano sacándolo de ahí.
Los tres sumisos suben a la parte de atrás de la camioneta, nadie dice nada en el transcurso del camino, el ambiente está tenso que se podría cortar.

⊱𝐋𝐨 𝐩𝐫𝐨𝐡𝐢𝐛𝐢𝐝𝐨⊰ L.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora