Capítulo 6: Aún con vida

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En Ciudad Pálida el viento, soplaba bastante, no sólo eso, cerca de la Torre de señales, se podía ver que este estaba llevando algo.

Trozos muy pequeños de una cosa estaban en el cielo siendo llevados por el viento y, si te acercabas lo suficiente a estos trozos, podías escuchar una muy débil estática apenas audible.

Estos trozos se dirigieron hacia una calle desolada y unos comenzaron a amontonarse en el suelo tomando una forma humanoide muy pequeña, mientras que otros se juntaron un lado tomando la forma de un sombrero.

Al terminar de juntarse, se podía ver que la forma humanoide era un niño con el pelo negro corto y desordenado que le sobresalía un poco, vestía un traje elegante y a su lado se encontraba un sombrero fedora de color gris azulado oscuro.

Este niño no era otro más que Mono, que se encontraba inconsciente bajo la lluvia mientras que esta golpeaba su cara.

Cuatro horas después.

Luego de unas horas en las que el chico estuvo tirado en el suelo, por fin dio señales de vida comenzando a mover poco a poco su cuerpo, se estaba despertando.

Abrió los ojos, la lluvia golpeaba en su oído izquierdo. Estaba desorientado, no entendía ni recordaba nada por el momento.

Levantó su mano para poder frotarse la cabeza debido al dolor que sentía en esta mientras que con la otra trató de sentarse, fue doloroso, pero lo logró.

Miró a su alrededor confundido para saber dónde se encontraba y tratar de orientarse: estaba en medio de una calle llena de basura y había edificios de gran altura encorvados.

Dirigió su mirada a su atuendo, era elegante, pero incomodo; luego a sus manos, estaban temblando, no por frío, ni él sabía el por qué, hasta que su memoria comenzó a hacerse más clara y poco a poco sus recuerdos volvieron, todos y cada uno de ellos y, entre todo ellos, se concentró en el último que tenía, donde era "desintegrado" por su versión más joven.

Luego, la razón por la que estaba temblando se hizo fácil de descifrar, tenía miedo, miedo de haber muerto, miedo de ya no poder respirar, sentir, o pensar.

La mirada de Mono comenzó a ser borrosa debido a las lágrimas que a empezaron a caer por sus mejillas, abrazó su cuerpo acostándose de nuevo en el suelo, sintiendo lo bueno que es estar con vida.

Luego de diez minutos, el chico se calmó y estaba sentado en el suelo nuevamente mirando sus manos, no se había dado cuenta que eran más pequeñas, no eran las manos grandes y arrugadas que tenía cuando era ese hombre alto y delgado, y a pesar de que el chico seguía siendo un poco pálido, era un pálido más normal y no parecía un muerto, además de que ya no estaban frías, ahora tenían calor.

Después de mirar sus manos, comenzó a mirarse el cuerpo, era bastante pequeño, hace mucho tiempo que no se veía así.

Para confirmar lo que él creía, Mono dejó de mirarse el cuerpo y se levantó con dificultad para acercarse a un edificio y mirarse por el reflejo del cristal.

Cuando lo hizo, no podía creer lo que veía, era él, como un niño de nuevo. Se tocó la cara para confirmarlo aún más, y esta era estirada, no arrugada; sus ojos no parecían hundidos ni demacrados, simplemente era un niño de nuevo.

No entendía por qué era un niño otra vez, no recuerda haber echo nada para serlo, pero no se molestó en tratar de averiguarlo, era él y estaba vivo, era lo único que le importaba.

Mono se sentó y se recostó en la pared del edificio, a pesar de ser libre, ahora sólo quería descansar, pasó por mucho en tan poco tiempo que seguía sin entender nada.

Little Nightmares: The return of MonoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora