5 | No estoy para juegos

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Relajé mis músculos al escuchar su voz.

— ¿Que diablos te sucede? — preguntó llevando sus manos a su cabeza.

— Creí que era cualquier otra persona no tú, un ladrón o algo así ¿Qué haces aquí?.

— Yo quería estar sola un momento contigo — levanté mis cejas sorprendido.

— Ajá si y que sigue que te disculpes — dije sarcástico.

— En realidad si venía a eso quería disculparme por todo lo que te he hecho pasar, ni siquiera te he llegado a conocer — bueno ella está diciendo la verdad.

— No hay problema.

— ¿Amigos? — cuestionó.

— ¿Porque cantas esa canción? — respondí con otra pregunta.

— ¿Beautiful Thing?.

— Tiene un significado especial para mi — Se sentó junto a mí en la arena.

— ¿Te gusta la canción o tiene un significado especial? — Preguntó con curiosidad.

— No es nada solo era una pregunta.

— ¿Tiene un significado especial para tí? — Cerré mis ojos y evite llorar pero era demasiado tarde cuando ella me abrazó, mi rostro estaba lleno de lágrimas igual que el de ella.

— ¿Porqué lloras? — pregunté al verla llorar.

— Perdí a alguien y era nuestra canción.

— Perdí a mi mamá ella amaba esa canción — Limpié sus lágrimas y ella las mías.

— Resultamos tener eso en común.

— ¡Que vivan los novios! — Gritó Héctor uno más de los meseros.

— Diablos está perdido borracho — Él intentó meterse al mar pero lo evite con ayuda de Celeste.

— ¿Conoces su departamento?.

— No, pensaba dejarlo en los asientos del recibidor.

— Si lo conozco yo me encargo — Lleve arrastrando a Héctor hasta su departamento encontré las llaves en su pantalón cayó en el sofá como sacó de papas.

Hablar con alguien se sentía bien, Celeste es, Dios tiene una voz increíble, debo averiguar quien es ese alguien especial que perdió.

...

Celeste Ercel.

Llegue temprano al restaurante organicé todo espere que todos firmaran, di las ordenes a todos.

— Hey yo me encargo de la mesa 4 tu sigue en la caja. — Asentí y seguí en lo mío.

— Que maldito dolor de cabeza — era Volkan quejándose.

— Sigue bebiendo que vas por buen camino — Dije sarcástica y el dio una mirada de no sabes lo que dices.

Limpiaba unos vasos hasta que sentí algo frío en mi cuello.

— Chicos no estoy para juegos — dije para limpiar mis manos de la espuma que tenían.

— Yo tampoco — Giré para encontrarme con un arma frente a mi y un hombre con pasamontañas.

— Yo - yo - yo no he hecho nada porfavor no no no me mate — Supliqué mientras mis manos temblaban dejando caer el vaso.

— Eres un desastre camina — Me grito y me empujó hasta la caja había un tipo mas apuntando hacia varias partes — Quiero todo el dinero, hey tu quita todo tipo de joyas relojes y demás cosas que nos sirvan pero ¡ya!.

El tipo empezó a quitarle las joyas a los clientes, Hakan y Volkan no hablaban, pero entre miradas y a pasos cortos Volkan derribó al tipo mientras Hakan le quitó el arma y apuntó al tipo que estaba conmigo.

— Sueltala o jalo el gatillo — Negué con la cabeza completamente asustada.

— Es tu novia o mejor aun tu esposa porque me gustaría pasar un buen rato con ella tiene todo donde debería estar — pasó el arma por parte de mis labios hasta mi cuello.

— ¡¡Sueltala en este instante!! — Gritó Hakan lleno de ira.

— ¿Y si no lo hago qué? — Hakan cargo el arma y di un golpe en el estómago del ladrón, jaló el gatillo.

Mi vista se volvió nublosa lo único que escuchaba era mi nombre repetidas veces.

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