PECADOS

32 | No me falles.

Hakan Bolat.

Me sacaron de la celda de castigo apenas podía ver por lo inflamado que estaban mis ojos, fui hasta el patio de comidas, tomé mi plato de sopa no podía comer simplemente no tenía hambre o lo que estaba frente a mi no era nada apetecible.

— Debes comer, ella te quiere ver bien — levanté mi vista para encontrar a Burak.

— No tiene importancia, lo único que quiero hacer es salir y matar a nuestro padre — Di un golpe en la mesa.

— No manches tus manos de sangre, Hakan sé que duele, pero no te conviertas en él, tu no eres así no cometas los mismos pecados.

— No merece vivir.

— Tu no saldrás de aquí con la conducta que llevas, cada día es un nuevo problema.

— Hablas como si te importara, como si somos hermanos con mucho aprecio, deja tu hipocresía.

— Hakan, cada quien llevaba su vida en casa, nadie era tan unido con nadie.

— ¡Yo si lo era con mamá! — Grité y los policías se me acercaron.

— Creo que es momento de una buena ducha Hakan. — Dijo el policía y sonreí — Pues que esperan señores — Sentí un golpe en mi abdomen, me levanté y di un puñete en el labio de uno de los policías, entre algunos me llevaron hasta las duchas.

Cada vez las golpizas son peores pero solo inconsciente se va el dolor de perder a mi familia, sentí mis ojos pesarme y el líquido rojo en el suelo indicaba toda la perdida de sangre que los golpes producían, mi vista se volvió nublosa todo se torno oscuro.

Desperté porque sentí ardor cerca de mi ceja y en mi labio sentía algo pegajoso, observé mi cuerpo, está mi abdomen vendado, intento mover mi cabeza pero el collarín no me deja.

— ¿Dónde estoy?. — Observo a mi alrededor es una habitación esta no es la enfermería de la cárcel, ¿estoy en el hospital?.

Me intenté levantar pero el dolor no cesa, miro mi brazo hay un suero en él.

— Bienvenido Hakan — Abrí mis ojos más de lo normal al verla entrar a la habitación ¿Qué demonios esta vieja es inmortal? ¿Que hace vestida de Enfermera?.

— No me volverás a lastimar, no me volverás a torturar ¿donde tienes a Celeste?. — Dije intentando levantarme de la cama.

— Tranquilo vengo en son de paz — Levantó sus manos.

— ¿Qué es lo que quieres?. — Pregunté aún intentando levantarme de la cama.

— Que vuelvas a trabajar para mi, debes saber que Celeste está de mi lado, si no me crees puedes llamarla ahora mismo, tengo poco tiempo.

— ¿Poco tiempo para que?.

— El padre de Celeste está vivo y es mucho más poderoso que yo o bueno eso cree él, debe creer que tú estas de su lado para que puedas vivir y que el plan continúe tal cual lo he planeado.

— ¿Quién me asegura que esto no es una trampa? — Ella tecleo en su celular y lo giro hacia mí era una videollamada vi a Celeste me aclaró todo lo que debía decir o hacer, él padre de ella planea secuestrarme durante mi traslado a la cárcel.

— Listo Hakan, espero que no me falles.

— No se porque diablos confío en ti, pero solo así me mantendré vivo.

— Y conseguirás la venganza que deseas — Dijo mientras se volvía a poner la mascarilla para no ser reconocida.

— Es un trato justo — Dije y la vi desaparecer por el pasillo.