Esta historia comienza con una familia en un hospital de Japón, en donde una mujer se encontraba dando a luz en la sala de partos, mientras su marido se encontraba afuera de la sala lleno de nervios. La mujer se llamaba Inko Midoriya, y el padre se llamaba Hisashi Midoriya. La mujer estaba sufriendo por la criatura que anunciaba con salir de su vientre, por lo que, gritando de dolor, en un último esfuerzo consiguió dar a luz a un bebé peliverde de ojos verdes, el cual reflejaba un rostro calmado, casi sin emociones. Inko estaba demasiado ocupada recobrando el aliento como para notarlo, pero los enfermeros lo vieron, y se lo llevaron para hacerle unas pruebas. Mientras tanto, Hisashi entró a la habitación con nervios y se acercó a su mujer.
Hisashi: ¿estás bien amor? ¿te encuentras bien? -dijo con la clara preocupación de alguien que ha conducido como un loco desde casa hasta el hospital con su mujer maldiciendo a los cuatro vientos
Inko: hehe, calma Hisashi, estoy bien, de verdad. No tienes que preocuparte.
Hisashi: gracias a dios -dijo soltando un suspiro de alivio demasiado fuerte, que hizo reír a su esposa. Pero en eso entran los paramédicos con el bebé y le dejan a Inko cargarlo en brazos.
Inko: -con preocupación- ¿ocurre algo malo con mi bebé?
Doctor: lamento comunicarles que su hijo ha nacido con una enfermedad neuronal que paraliza por completo todo su cuerpo, y puede que nunca pueda moverse o tener sensibilidad de este. Además de que sus otros sentidos se degradarán con el tiempo. Lo siento mucho.
Con esa noticia ambos padres se quedaron de piedra. Básicamente es como si su hijo estuviera muerto. Mientras tanto, en la mente del bebé, este dejó de llorar al momento en el que vio que no importaba cuánto llorara en su mente, nadie lo podía escuchar. En el tiempo en el que le hicieron las pruebas pudo replantearse lo que sucedía, y comprendió que no tenía control de su propio cuerpo, y por ello, de su propio destino, algo que no parecía ser normal dadas las expresiones de los adultos en la sala. Con esto en mente, no podía evitar estar nervioso, pues comprendió nada más nacer, que su vida depende únicamente de lo que decidan hacer los adultos a su cargo con él, mientras era entregado a la mujer en la camilla.
Inko: Muchas gracias doctor -dijo con tristeza en su voz.
Inko miró a su hijo en brazos y vio en sus ojos que este la estaba observando con detenimiento, sin ninguna expresión en su rostro. Inko sólo pudo verlo con tristeza, pues pensó que su hijo nunca podría tener una vida normal y feliz. Le dejó cargarlo a su marido, cuya mirada reflejó disconformidad por un segundo, antes de cambiarla a una forzada de cariño. Con ese gesto, el bebé notó que el hombre a su cargo no estaba conforme con su condición, lo que sólo le preocupó aún más, pues de él y de la mujer dependía su vida.
Inko: ¿cómo lo llamaremos cariño? -aún con voz temblorosa
Hisashi: ....... Izuku -con algo de seriedad, pues en verdad no le agradaba el estado en el que se encontraba su hijo, e incluso lo veía como un fallo en su plan de tener un hijo que le superara en el ranking de héroe, ya que él nunca llegó a entrar en el top 10, y pretendía que su hijo cumpliera con su deseo
Inko: Izuku... me gusta. Pega con su pelo y sus ojos -con una sonrisa en su agotado rostro.
Cuando le dieron el alta, ambos se fueron con Izuku, cada uno con diferentes pensamientos sobre su hijo. Mientras este estaba medio preocupado, debido a que no tenía la aprobación de su padre, pero sí el cariño de su madre. Al llegar a casa, ambos adultos se pusieron a discutir, debido a que Hisashi quería otro hijo que sí sirviera, mientras que Inko no podía creer lo que su marido estaba diciendo.
Hisashi: ¡¡no puedo ser padre de un error de la naturaleza como ese engendro!! -con desprecio en su voz a referirse a Izuku
Inko: ¿¡¡¡Cómo puedes hablar así de nuestro hijo!!!?
Hisashi: ¡¡Si no puedes verlo, entonces no te necesito más!!
Sin darse cuenta, sus gritos llegaban a los oídos de Izuku, el cual estaba temblando de miedo por dentro, ya que, aunque no entendía lo que decían, sabía que esos gritos eran por él y su condición, así como un choque de ideales sobre qué hacer con él. Tanto era su miedo, que sin darse cuenta empezó a temblar. Y no sólo él, sino todos los objetos a su alrededor. Cuando los gritos cesaron, y la discusión finalizó con un fuerte golpe de la puerta, seguido con el ruido que escuchó mientras se movía en coche para llegar a casa, Izuku se dio cuenta de lo que había pasado a su alrededor, y entendió que eso lo había causado él. Sin saberlo, su estrés y miedo extremo le habían hecho despertar su quirk de manera repentina, y pensó que eso era algo que tampoco era normal en la gente.
Cesó su hilo de pensamientos cuando alguien entró en el cuarto. Izuku sabía que se trataba de su madre, debido a la gentileza con la que abrió y cerró su puerta, y se acercó lentamente a su hijo con lágrimas de tristeza en su cara.
Inko: lo siento mucho hijo mío -snif-. Siento mucho no -snif- no haber podido darte -snif snif- un cuerpo sano y un padre cariñoso -snif- Mamá te promete que te cuidará y te protegerá -snif-, y tratará de hacerte feliz como debes ser
Izuku no entendió nada de lo que le dijo, pero notó el tono melancólico y decidido, y sus dudas se fueron cuando su madre lo tomó en brazos y lo abrazó con fuerza y con delicadeza, como con miedo a hacerle daño. Sin embargo, se rehusó a mostrarle su otra rareza por si la hacía cambiar de opinión, y en cambio, decidió usarla para mover ligeramente sus labios para mostrarle una pequeña sonrisa que hizo que su madre llorara aún más, pero esta vez de completa alegría, porque su hijo no le guardaba rencor por no permitirle vivir una vida normal. Estaba tan aliviada que ni se preguntó cómo pudo Izuku cambiar su expresión facial, cuando según los doctores no podía mover ni un músculo.
Y así comienza la historia de Izuku Midoriya, aquelque llegó a comprender el sentido de la vida, y que eventualmente se volveríauno con el universo.
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Ya saben, cualquier comentario, crítica o sugerencia, puede ir aquí, o en cualquier parte de la historia, en donde decidas escribirlo.
ESTÁS LEYENDO
Izuku: del Conocimiento al Entendimiento
ФанфикNacido con una enfermedad que le paralizó el cuerpo, tuvo mucho tiempo para pensar. Reflexionar. Comprender. Decidido a encontrar respuestas, viajará a un lugar en dónde se descubrirá a si mismo, y a todo lo que le rodea. ¿Cómo pudo viajar si estaba...