Capitulo 15

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Mia

Después a unas horas más tarde la alarma de mi móvil en forma de un pingüino bailarín irrumpe mi sueño. Literalmente, porque mi subconsciente traduce el sonido en la imagen de un pingüino que baila.

Sin embargo, la placentera fantasía no dura mucho. Entonces cuando me despierto de inmediato comienza a dolerme la cabeza, y cuando intento levantarme no pude ya que unos brazos fuertes me sujetan fuerte de la cintura, intento moverme para apartarlo pero justo el se mueve un poco lo cuál quito su brazo de mi abdomen saliendo con cuidado de la cama sin despertarlo.

"Ay, no"

Recuerdo a un chico que daba grima. Me entra el pánico y abro los ojos de sopetón... Pero lo que veo es la piel tatuada de un chico encima de mí. Tiene la cabeza sobre mi estómago y me rodea con un brazo la cintura.

Se ríe él pero todavía sigue con los ojos cerrados

Y entonces me vuelvo hacia él, lo cuál noto que no es el tipo de la discoteca con el que baile sino que es nada más y menos que Nicholas, y eso era lo único que me faltaba tener al imbécil que me rompió el corazón en mi cama.

Intento hacerlo a un lado sin despertarlo, pero él suspira y abre los ojos muy despacio. Los cierra otra vez, se levanta y desenreda nuestras piernas. Salto de la cama y, cuando vuelve abrirlos, no dice nada, sólo me observa como si estuviera viendo a un depredador. La imagen de Nicholas dentro de mí se repite en mi mente una y otra vez.

"Pero ¿en qué demonios estaba pensando?."

Sus ojos azules se conectan en mi al abrirlos por completo

Quiero decir algo, pero la verdad es que no se me ocurre nada. Por dentro me estoy poniendo mala, me va a dar un ataque. Como si supiera por lo que pasa por mi mente, salta de la cama con la sábana en mano se cubre el cuerpo desde la cintura para abajo.

__ Ay, por favor. __dice él en un susurro.

Y segundos más tarde se sienta en la cama cubriéndose su cuerpo de la cintura hasta abajo, y se sienta en una silla y me mira.

__ Por qué estás en... __comienza a decir y yo cierro las piernas cuando me miro dándome cuenta de que solo llevó un sujetador.

Cojo la toalla que está en la silla y cubro mi cuerpo con ella, después me siento en la cama.

Se ríe pasándose la mano por el pelo

Frunzo el ceño

Y yo cojo la almohada que esta en la cama a un lado de mi y se la lanzo en la cara, pero lo único que ocasiona es que se vuelva a reír.

__ Mia..., di algo. __añade viéndome fijamente.

Lo miro seria

__ Yo..., no se que decir. __confieso desviando la mirada de él.

No me puedo creer que haya pasado. No puedo creer que Nicholas esté aquí, en mi cama, desnudo.

__ Lo siento __dice, y deja caer la cabeza entre las manos.

Me va explotar el cerebro por las cantidades ingentes de alcohol y por haberme acostado con Nicholas.

__ Más te vale __mascullo.

Se tira del pelo

__ Fuiste tú quién me llamo. __contesta sin dejar de verme.

__ ¡Pero nunca te dije qué vinieras! __replico con un grito.

No sé que voy hacer. No he decidido aún si quiero pelearme con él, echarlo a patadas o intentar resolverlo como una adulta.

Segundos más tarde me voy al baño, me meto a la ducha dejando que el agua caliente me libere de está resaca, la cabeza me da vueltas.

Saga II- 𝐓𝐫𝐞𝐬 𝐌𝐞𝐬𝐞𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora