EL MEJOR POSTRE, TUS LABIOS
Vivir en Alemania, más concretamente en Múnich es algo que si me lo dicen hace un par de años, nunca me lo hubiese creído. Pero es algo que de verdad está sucediendo y todo por mis padres.
Mis padres hacen unos tres años que montaron un restaurante en Múnich. Nos vinimos a Alemania un poco por la locura, no sabíamos si esto iba a salir bien, pero la verdad es que todo va muy bien. El restaurante siempre suele estar lleno de gente.
Yo hace escasamente unas tres semanas, que acabe un máster de cocina. Nunca me había interesado mucho pero a medida que ha ido pasando el tiempo y he visto como van las cosas en el restaurante, pues quería probar también.
Aunque a mi me va más el tema de los postres.Cómo todos los días, sobre las doce y media del mediodía llego al restaurante y veo que hay muchas mesas que la están preparando para la hora de comer, sobre las una y media o dos más o menos.
- ¿hay muchas mesas hoy no? - le pregunto a mi madre.
- si Mikela, hay una reserva muy importante hoy.
- ¿vendrá gente famosa? - pregunto y mi madre alza los hombros.
- parece ser que si.
- ¿no sabéis quién viene verdad?
- no tenemos ni idea cariño - me dice mi padre dándome un beso en la frente.
- vale.
Mis padres son los cocineros y dueños del bar, después también está Astrid, Bernardo y Bruno que son los camareros del restaurante, Katharina que se dedica a apuntar las reservas y colocar los cubiertos. Y hay algunos cocineros más como es el caso de Hilma, Freda y Axel. Y yo soy la encargada de hacer los postres junto a Magda.
Los postres que suelo hacer, son la mayoría típicos de Alemania, aunque hay variedad incluyendo postres provenientes de otros países como España, Francia y Reino Unido.
Cuando ya tenemos los postres echos los dejamos que enfríen, miro a mis padres como cocinan y como trabajan con tanta tranquilidad. El mundo culinario, no es muy fácil digamos, tienes que tener mucha destreza y saber muy pero que muy bien lo que haces.
Veo a Katharina entrar a la cocina y se acerca a mi con una sonrisa.
- Mikela cuando veas quienes están ahí fuera vas a fliparlo.
- ¿hablas de la importante reserva?
- exacto.
- vamos Katha dime algo - digo y ella niega.
- no, quiero que cuando veas quienes son te sorprendas por ti misma no porque yo te lo haya dicho.
- bueno esta bien.
Mandan una comanda donde la reserva especial han pedido 24 postres. Todo una barbaridad.
La mayoría han pedido Baumkuchen, que el postre más típico en Alemania. Kaiserschmarrn, que es como una especie de crepes con uvas, pasas, manzana, almendras y azúcar que se mezcla con confitura. Y otros pastel de manzana.- Mikela, puedes salir - me dice Bruno - los que han echo la reserva quieren conocer a la repostera.
- enseguida voy.
Salgo y junto a Bruno, nos acercamos a la mesa que es. Abro los ojos en cuanto veo quienes son, ni más ni menos que la plantilla de jugadores del Bayern de Múnich.
- aquí tenéis a la gran repostera - dice Bruno señalandome y todos me miran.
Mis mejillas se tiñen de rojo y sonrió timidamente.
- los postres están deliciosos - me halagan.
- muchas gracias, espero que os haya gustado mucho.
- por mi repetiría - dice Davies - pero el mister me mataría.