Solo mía, morena

Capítulo 2

Cuando consigo despertarme del shock, intento salir detrás de él. No porque quiera saber qué acaba de pasar, porque realmente no lo sé y por ahora creo que no quiero averiguarlo, sino porque no se dónde es mi segunda clase, es más, ni siquiera sé cuál materia es.

Cuando llego, otra vez tengo que sentarme con Ethan. Tenía la esperanza de que cambiáramos de compañeros en algunas clases, pero por ahora parece que no.

Una vez entra la profesora de... ¿matemáticas?, me hace presentarme y contarle como voy o bueno, como he ido en los otros institutos con su materia. Bah, nada interesante. La clase transcurre y Ethan no deja de mirarme, lo cuál hace que me ponga muy nerviosa. Seguimos así por un rato más, hasta que me canso y me vuelvo hacia él.

-¡Eh! Deja de mirarme de una vez-Grito en un susurro.

-¿Por qué?-dice confundido.

-Porque me estás poniendo nerviosa.

-¿Acabamos de conocernos y ya te pongo nervioso morena?-cambia su expresión de confundido a una increíble sonrisa.

-¿Acabamos de conocernos y casi me manoseas? Deja de hacer el tonto, es mi primer día y no voy a permitir que me lo chafes. Aquí en este instituto estaré bastante tiempo, por lo que debería empezar a buscar bueno amigos y si me permites decirte algún que otro chico-digo no sé realmente para qué, sólo sé que siento la necesidad de picarlo. Y parece que funciona porque  cuando lo escuchó se le cambió la cara- por lo que te pediría que dejaras ese jueguecito que tienes y me dejes en paz, por favor.

-Mira, muñeca, no sabes cuanto me alegra de eso de que te quedarás por aquí bastante tiempo. Es más, creo que te quedarás mas tiempo del que tu crees. Ahora, lo que no me ha gustado es eso de buscar amigos y algún que otro chico. Mira cariño, solo puedo decirte que nadie se acercará a ti sabiendo que yo estoy interesado, así que siento chafarte la fiesta, porque esto no es un jueguecito y con el único con el que tratarás seré yo.

-¿Y quién te crees tú para decirme a mí con quién puedo o no estar, eh? Además ni que fueras el rey de esto, y por mucho que lo fueras no puedes tener tanto interés en mi como dices tener, ya que me acabas de conocer, es... imposible.

-¿Señorita Smith, algún problema?-dice la profesora justo cuando Ethan estaba por responder.

-No señorita, disculpe-Digo.

Después de eso no volvimos a hablar en toda la clase, ni en la clase siguiente. Y por fin suena la alarma del recreo. Bueno por fin, no sé yo que haré ahora, ya que bueno, se puede decir que no conozco a nadie. Mientras espero para pedir mi comida, veo al fondo en una mesa sentado a Ethan junto a una chica, que tiene cierto parecido con él. Pelo castaño, ojos azules... muy guapa por cierto.

Él le tiene echado el brazo por los hombros,¿será su novia? No creo ¿no? Tienen rasgos parecidos por lo que espero que sea su hermana o algún familiar. Bueno aunque no puede ser su novia ¿no?, y si lo fuera ¿por qué me besó y me dijo que solo era el comienzo? La verdad no lo sé, solo sé que empiezo a sentir un poco de ¿celos?, por lo que prefiero quitar la mirada de ellos. Nunca había sentido esto por nadie, bueno digamos que no he tenido novio en mi vida, pero si que me han gustado chicos y nunca había sentido esto.

Cuando por fin termino de pedir mi comida, me doy la vuelta para ir a la biblioteca. Sí, llamadme como queráis, pero la lectura es un buen mundo en el que puedes refugiarte cuando estás o te sientes solo y en este caso lo estoy. Así que empiezo mi camino hacia la biblioteca pero choco con alguien y su comida se cae al suelo. Rápidamente me agacho para recoger su comida y disculparme. Cuando lo dejo todo en la bandeja, la levanto para dársela cuando le miro. Joder, que chico. Es un morenazo, de pies a cabeza, pelo negro y piel tatuada, aunque un poco menos que Ethan  y con unos ojos mieles preciosos. Aun así no tiene nada que hacer contra él.