Conociendo lo sobrenatural

Capítulo 35. La última prueba

Los personajes utilizados en esta historia no son de mi propiedad. Créditos a sus respectivos autores.

— ¿Sensei? ¿Qué hace aquí?

— Quería ver como seguían entrenando. Estoy cubriendo el lugar de Goku por un par de horas. Pero, jajajaja, tu cara ha mejorado un poco en todos estos días sin vernos. Ahora que lo veo, no solo la tuya, sino la cara de todos luce mejor — comentó Azazel con una pequeña risa.

— Goku se excedió con el entrenamiento. Quiero decir, ni siquiera somos capaces de quitarle el agua supersagrada. A este ritmo ninguno de nosotros la conseguirá — Issei resopló con cansancio.

— Eres un idiota, si hace todo eso es por su bien. Si quieres librarte de esto, alcanza el Balance Breaker de una vez. Les diré algo, no podrán quitarle esa agua en el tiempo que queda por más que se esfuercen. Aun así, no pierdan las esperanzas y continúen.

Los chicos lo miraron con un poco de molestia. Esas palabras no los motivaban en lo más mínimo.

— Mientras se preparan para comer, hablaré con Ise sobre algunas cosas.

El chico castaño se extrañó mucho, pero siguió a Azazel que caminaba hasta unos árboles cercanos.

— ¿Qué es lo que quieres hablar conmigo?

Azazel lo miró de frente y le habló.

— Ise, ¿qué piensas de Akeno?

— Creo que es una buena chica — Issei respondió con sus más honestos sentimientos.

Su modo sádico le daba un poco de miedo, pero por lo general la veía como alguien amable. Además, le parecía linda la parte donde se muestra como una niña con él. Azazel negó con su cabeza y lo volvió a interrogar.

— Eso no es a lo que me refiero. Quiero decir, como una mujer.

— Ella es atractiva. Es una de las personas con las que quisiera estar.

Azazel hizo una seña a su respuesta como si estuviera aliviado.

— Ya veo. También tengo que velar por ella en lugar de un amigo mío.

— Te refieres al padre de Akeno-san, el cual es uno de tus subordinados, ¿Verdad?

— En lugar de un subordinado, Baraqiel es un compañero de tiempos antiguos como Shemhazai. Un amigo. Hicimos un montón de estupideces juntos. Por lo tanto, antes de darme cuenta, todo mundo a mi alrededor, además de mí, había llegado a tener esposas e hijos — Azazel dijo suspirando profundamente.

— Bueno, aparte de eso, estoy muy preocupado por Akeno, ya que Baraqiel y ella son de mi incumbencia.

— Sensei, eres inesperadamente de buen corazón, o quizá debería decir una persona entrometida. También te involucraste en nuestro entrenamiento y lograste convencer a Goku de que nos entrenara — Issei le dijo con una sonrisa en su rostro.

— Solo soy un ángel caído ordinario con tiempo libre. A pesar de que fue por eso que también crie al dragón emperador blanco — respondió Azazel con naturalidad.

Issei no pensaba de la misma forma. Desde su perspectiva, Azazel era un ángel caído muy extraño y que asomó la nariz en cada uno de sus asuntos.

— En cualquier caso, estoy pensando en confiarte a Akeno.

— ¿Confiarla a mí? — Issei preguntó sin saber a qué se refería exactamente.

— Eres un tonto, pero no eres mala persona. Por encima de todo, no pareces tener discriminación hacía ella.