Capítulo 70. Como un dragón celestial

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Los personajes utilizados en esta historia no son de mi propiedad. Créditos a sus respectivos autores.

No había nada que se pudiera decir. Todo lo que aconteció fue una completa locura. El planeta pasó de estremecerse a quedar en una enorme tranquilidad. El mundo cambiaría después de contemplar semejante combate.

Rias caminó hasta la ventana de la habitación del hotel. Afuera había seres espeluznantes que llevaban túnicas negras que estaban mirando hacia arriba, específicamente a ellos. Sus rostros no eran visibles, solo sus brillantes ojos con intensiones asesinas. Cada segador de almas tenía una guadaña grande en sus manos.

— No podemos quedarnos más tiempo aquí. Vamos a salir a la fuerza. Akeno, vamos a hacer nuevamente la fusión para destruir este espacio artificial.

Tanto Akeno como los demás se sorprendieron por la forma de actuar de la chica. Se le veía triste, pero también molesta y muy determinada.

— Está bien, Rias. Esta vez les mostraremos nuestro máximo poder desde el inicio.

— Antes de que se fusionen debemos dejar en claro el plan. Lo de antes solo causará más problemas en este mundo. No solo la Súcubo y la Facción de Héroes, sino que Hades y los segadores de almas ahora saben que Goku no puede interferir de ninguna manera. Eso nos deja en una mala posición. Hay una gran probabilidad de que la Súcubo esté esperando que salgamos para atacarnos, así que traten de guardar sus energías por sí eso sucede. Lo que haremos será destruir la máquina creadora de esta barrera. Ophis destruyó el dispositivo de la barrera con la que Asia fue capturada, así que haremos lo mismo.

Después de que Azazel les explicara, Kuroka empezó a usar senjutsu y Le Fay usó su magia para encontrar el dispositivo. La pequeña bruja puso un mapa sobre el suelo de la habitación. Ellas dibujaron unos cuadrados en el papel, y al parecer estaban viendo como estaban los alrededores a través de su mente.

Las dos chicas empezaron a escribir letras de demonio en el mapa y a recitar cantos misteriosos, y también extendieron cenizas para completar el hechizo. Le Fay cerró sus ojos y levantó sus manos hacia el mapa. La hoja empezó a temblar y a moverse, las letras demoniacas comenzaron a brillar, y las cenizas empezaron a moverse por sí mismas.

— Hay una en el estacionamiento, otra en el techo. Y la otra está en el segundo piso del hotel en la sala de estar. En total he confirmado tres dispositivos de barrera. Y tienen la forma de una serpiente.... No. Una estatua de Ouroboros que se muerde la cola con su boca.

Le Fay le dio el papel que tenía el dibujo de la estatua a Azazel.

— Así que los dispositivos de barrera que tenemos que destruir son las estatuas de Ouroboros. Y hay tres. Parece que este será un trabajo duro. Este espacio artificial está especialmente creado para hacer que Ophis permanezca aquí. Esto no habría sido nada para la Ophis normal. La Súcubo y Georg debieron haber creado una barrera en este espacio que tiene como propósito reducir el poder de Ophis. Ahora, Le Fay, ¿qué está pasando con los dispositivos? ¿El número de segadores de almas aumentará al de antes?

— Si Gobernador. Hay segadores de almas reunidos donde están todos los dispositivos. Más bien, se extendieron por todas partes excepto este piso. Ellos están incluso presentes en el pasillo.... Parece que la mayoría de ellos se reunieron en el estacionamiento. Cao Cao-sama ya se ha ido de aquí, pero Siegfried-sama está aquí en su lugar. Georg-sama también se encuentra en el estacionamiento.

— ¿Qué hay del ser primordial?

— Ella también se ha ido.

Cuando Rias escuchó eso, le habló a Azazel.

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