EPÍLOGO (2/2)
¿Preparadas, amigas? </3
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Terminé de charlar con algunos invitados después de la gran competición de baile que por supuesto habíamos ganado Cole y yo, cuando noté algo —o mejor dicho, a alguien — tocándome el hombro desnudo.
Para mi sorpresa, era Greg, el padre e Rhys, junto a Abby. Los dos iban muy elegantes.
—Hola, Madelyn. Enhorabuena.
No sabía muy bien cómo actuar, ya que los dos hermanos me estaban mirando de reojo desde donde estaban. Además, conmigo tampoco fue lo que viene a ser demasiado agradable, pero no era capaz de tratarle mal a mi suegro, que es lo que era para mí a fin de cuentas.
—Muchas gracias a los dos por venir —sonreí simpáticamente. Abby me dio dos besos y Greg hizo lo mismo —. ¿Os falta algo? ¿Bebida, comida...?
Intercambiaron una mirada y torcieron la boca.
—En realidad, nos íbamos ya. En un par de días los niños empiezan el colegio y no nos apetece que pierdan clase —me explicó Abby, aunque por su expresión, parecía que no estaba muy conforme con esa decisión—, pero ha sido un día increíble, de veras.
Alcé las cejas bastante sorprendida. Sinceramente, no me esperaba que fueran a irse tan pronto, y tampoco es que me apeteciera demasiado. Quería conocerlos. Quería... no sé, tenía la sensación de que debía acercarme más a ellos. Pero, por otra parte, seguramente Rhys y Rachel sentirían un gran alivio sabiendo que su padre se marchaba ya.
—Es una pena —concluí, acompañándolos hacia la salida de la playa —. De todas formas, podríamos vernos...
—Creo que no es una buena idea —me cortó Greg, algo más tenso. Fruncí el ceño, confusa —. Sabes perfectamente que mi hijo no quiere saber nada más sobre mí, así que lo mejor será distanciarnos. Si eso es lo que quiere, así será.
Me quedé muda.
Vale, estaba claro que era consciente de la situación; sus hijos no querían verlo ni en pintura. Y era totalmente lógico, se lo había ganado a pulso comportándose de aquella manera. Pero eso no quita que, por estar enfadados con él, directamente Greg se rindiese. Eran sus hijos, ¿No...? ¿No debía luchar por ello? ¿Por su familia?
—Está bien. Sí. Quizá tengas razón.
Para variar, los únicos que se despidieron de los hermanos fueron toda la familia menos Greg, que levantó la chaqueta como modo de despedida y lo único que recibió fue un apretón en la mandíbula de Rhys.
Resoplé dándome por vencida, pero estaba claro que esta familia necesitaba un respiro. Rhys lo necesitaba, y yo lo único que quería era hacerle feliz.
Mi padre estuvo casi toda la boda con los Scott, como no era de extrañar, y aunque no me apeteciese por nada del mundo acercarme a ese círculo, tarde o temprano debería hacerlo.
Mejor tarde, sí.
Di media vuelta en busca de una buena copa. Después de todos los nervios acumulados, necesitaba un chute de energía y euforia que me pusiese a tono, como el resto.
—¡Maddie, ven! —gritó una voz femenina que procedía de la parte más cercana al agua, donde la última mesa de comida y bebida.
Me di cuenta de que se trataba de los chicos y de Rhys. Creo que llevaban unas copas demás. Al acercarme, Rhys me rodeó la cintura y besó lentamente mi sien.
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FUGAZ © [ARDENT#2]
Teen Fiction[BILOGÍA ARDENT #2] Dos meses daban para mucho. Para salir, relajarte, socializar, hacer un cambio de look radical o volverte loca. Maddie Griffin prefirió la última de todas. Dos meses después de su viaje inesperado a Australia, se encuentra en Mi...